Inicia juicio a mujer con doble nacionalidad estadounidense y rusa acusada de traición en Rusia

MOSCÚ (AP) — El juicio de una mujer con doble nacionalidad estadounidense y rusa a la que Rusia acusa de traición dio inicio el jueves, al tiempo que aumentan las tensiones entre Washington y Moscú, entre otras cosas por la detención de dos periodistas estadounidenses.

El juicio se celebra a puerta cerrada en Ekaterimburgo, en el mismo tribunal que la próxima semana comenzará a juzgar el caso de Evan Gershkovich, reportero del Wall Street Journal detenido en marzo de 2023 y acusado de espionaje.

La acusada fue identificada por las autoridades rusas como Ksenia Karelina, residente en Los Ángeles, aunque medios estadounidenses utilizan con frecuencia el apellido Khavana, el nombre de su exesposo.

Karelina nació en Ekaterimburgo y fue detenida en febrero cuando visitaba a su familia.

La principal agencia de seguridad nacional de Rusia, el Servicio Federal de Seguridad, acusa a Karelina de recaudar dinero para una organización ucraniana que proporcionaba armas, munición y otros suministros al ejército ucraniano. Su novio ha declarado que ella hizo una única donación de unos 50 dólares a una organización ucraniana, según medios de noticias.

Karelina se enfrenta a una pena de hasta 20 años de prisión si es declarada culpable. Casi todos los casos penales rusos que llegan a los tribunales terminan en condenas. El juicio se aplazó por la tarde y la próxima sesión se fijó para el 7 de agosto, según informaron las agencias de noticias rusas.

Gershkovich, el estadounidense de más alto perfil entre rejas en Rusia, está acusado de recopilar información secreta de una fábrica de tanques en Nizhny Tagil, a unos 150 kilómetros (90 millas) al norte de Ekaterimburgo. Sus empleadores niegan la acusación, y el Departamento de Estado de Estados Unidos ha declarado que está detenido injustamente.

El juicio de Gershkovich, también a puerta cerrada, comenzará el próximo miércoles.

El periodista de Radio Liberty/Radio Free Europe, financiada por Estados Unidos y con doble nacionalidad estadounidense y rusa, lleva detenido desde octubre acusado de recopilar información militar y de no registrarse como agente extranjero.

Desde el envío de tropas a Ucrania en febrero de 2022, Rusia ha reprimido duramente la disidencia y ha aprobado leyes que penalizan las críticas a la operación en Ucrania y los comentarios que se considere que desacreditan al ejército ruso. Desde entonces ha aumentado la preocupación de que Rusia pueda estar apuntando a ciudadanos estadounidenses para su detención.