Los indígenas se citan en Brasilia en defensa de su derecho ancestral a la tierra
Brasilia, 22 abr (EFE).- Miles de indígenas comenzaron a acampar este lunes en Brasilia, donde permanecerán hasta el próximo viernes en un evento anual que estará centrado en la defensa de sus derechos ancestrales a la tierra, negados por la mayoría del Parlamento.
El Campamento Tierra Libre, que se celebra cada año desde 2004, fue instalado en los jardines de la Explanada de los Ministerios, una avenida en la que se sitúan todas las sedes del poder público y por la que los indígenas marcharán al menos tres veces esta semana.
Las manifestaciones tendrán como principal objetivo el Parlamento, dominado por una mayoría conservadora, que el año pasado, pese a una decisión contraria de la Corte Suprema, acotó los derechos de los pueblos originarios a las tierras que han ocupado históricamente.
Según una tesis conocida como "marco temporal", los derechos de los indígenas a las tierras se limitan a aquellas que efectivamente ocupaban al día 5 de octubre de 1988, cuando se promulgó la actual Constitución brasileña.
El "marco temporal" fue aprobado por el Parlamento pese a que la Corte Suprema declaró inconstitucional esa tesis, lo cual ha generado un conflicto institucional aún no resuelto.
El Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva llegó a vetar el proyecto aprobado en el Parlamento, que reaccionó de inmediato y restituyó el "marco temporal" con fuerza de ley.
La Fiscalía General ha presentado un recurso a la Corte Suprema en el que exige reiterar la inconstitucionalidad de esa tesis, pero el tribunal todavía no ha vuelto a analizar el asunto.
Ese recurso ha sido apoyado por la Articulación de los Pueblos Indígenas (Apib), organizadora del Campamento Tierra Libre, para el que este año se espera a unas 6.000 personas y que ha sido convocado con la frase "Nuestro marco es ancestral. Siempre estuvimos aquí" como lema.
Kleber Karipuna, uno de los directivos de la Apib, anunció este lunes que los indígenas han solicitado una audiencia con Lula para esta semana, a fin de agradecerle su "apoyo" y la creación, el año pasado, del Ministerio de los Pueblos Originarios.
Sin embargo, aclaró que los indígenas "esperan mucho más del actual Gobierno" y exigen, entre otros puntos, que el proceso de demarcación de tierras sea "más ágil y más rápido".
Según datos oficiales, los indígenas ocupan cerca del 14 % del territorio nacional, representado por unas 600 áreas ya delimitadas, a las que se pueden sumar otras 120 que aún son analizadas.
La demarcación de tierras indígenas, una obligación del Estado según la Constitución, estuvo suspendida entre 2019 y 2022, durante la gestión del entonces presidente ultraderechista Jair Bolsonaro, y fue retomada el año pasado por el Gobierno del progresista Lula.
Durante todo su mandato, Bolsonaro justificó su negativa al reconocimiento de tierras indígenas con el argumento de que haría "inviable" un mayor desarrollo del sector agropecuario, uno de los mayores promotores de la tesis del "marco temporal".
(c) Agencia EFE