LOS ÁNGELES.- Potentes olas golpearon las playas de la costa oeste de Estados Unidos y Hawai el jueves, causando inundaciones localizadas y heridas en al menos ocho personas que tuvieron que ser hospitalizadas.

Los meteorólogos instaron a las personas a mantenerse alejadas de las rocas y de la orilla, y a no dar la espalda al océano debido al peligro de “olas sorpresa” —olas ocasionales mucho más grandes que pueden llegar lejos en la arena y arrastrar a alguien fuera de la playa.

Una advertencia de marejada alta para partes del norte de California indicó que las olas oscilarían entre 8,5 a 10 y 12 metros, según el Servicio Nacional de Meteorología, que agregó que había informes de inundaciones en áreas costeras bajas.

En Ventura, un video filmado por transeúntes mostró una ola sorpresa golpeando un muro de contención, haciendo que una multitud de espectadores huyera en pánico mientras el agua se precipitaba hacia ellos. Según informó KETY-TV, ocho personas resultaron heridas.

En Aptos, en el extremo norte de la bahía de Monterrey, las olas invadieron la playa y se precipitaron hacia un estacionamiento, reduciendo a escombros todo a su paso. El condado de Santa Cruz emitió advertencias para que las personas en varias áreas costeras estuvieran preparadas para evacuar.

“La Madre Naturaleza está enojada”, dijo Eve Krammer, residente de Aptos desde hace varios años. “Quiero decir, estas olas son intensas. Son enormes”.

La misma zona fue golpeada en enero pasado cuando la costa oeste fue azotada por numerosos ríos atmosféricos, alargadas bandas de humedad concentradas en la atmósfera, que transportan vapor de agua y agua en forma de nubes, generalmente a lo largo de los límites entre grandes áreas de flujo divergente del aire en superficie, lo que incluye las zonas frontales asociadas a los ciclones extratropicales que se forman sobre los océanos.

“Siento empatía por las personas que están aquí, más abajo”, lamentó Jeff Howard, también residente de Aptos.

Aunque no eran tan grandes, las olas a lo largo del sur de California también se describieron como peligrosas, con corrientes de resaca potencialmente mortales.

Sin embargo, los surfistas no pudieron resistirse.

“Estuve esperando un rato porque las olas estaban realmente buenas y son un poco difíciles de atrapar aunque tengo una tabla muy grande”, dijo Alex Buford, de 27 años, que estaba surfeando justo al norte de Manhattan Beach en la costa del condado de Los Ángeles.

En Hawai

En Hawai, el servicio meteorológico pronosticó que las olas aumentarían de nueve a 12 metros a lo largo de las costas orientadas al norte y de 5,5 a 6,7 metros a lo largo de las costas orientadas al oeste en cinco islas.

El surfista profesional hawaiano Sheldon Paishon se estaba preparando para surfear el jueves por la mañana en Makaha, una famosa playa de surf al oeste de Oahu.

Paishon, de 30 años, ha estado surfeando en varios lugares alrededor de Oahu esta semana, aprovechando las olas durante la advertencia de alto oleaje que estará vigente hasta el viernes por la mañana.

“Siempre hay olas grandes en el invierno en Hawai”, dijo y advirtió a los surfistas novatos a consultar con los socorristas antes de entrar al agua y “asegurarse de tener gente a su alrededor y mantenerse a salvo”.

Los socorristas de Honolulu Ocean Safety, destacados en playas de toda Oahu, rescataron a 20 personas a lo largo de la famosa costa norte de la isla el miércoles, indicó la vocera Shayne Enright. También estuvieron ocupados con miles de “acciones preventivas”.

“Esta época del año produce olas increíbles, pero también puede ser muy peligrosa”, afirmó.

Las peligrosas olas también podrían provocar marejadas que podrían afectar propiedades costeras y carreteras, advirtió el servicio meteorológico.

Agencia AP