HRW y Amnistía piden justicia en la revisión del megajuicio contra saharauis

Rabat, 9 nov (EFE).- Las ONG Human Rights Watch (HRW) y Amnistía Internacional (AI) pidieron hoy "justicia" tanto para las víctimas como para los presos saharauis condenados en el macrojuicio relacionado con los incidentes de la localidad saharaui de Gdeim Izik en 2010, en los que once policías marroquíes fueron entonces asesinados.

El Tribunal de Casación está actualmente revisando el juicio celebrado en 2017 por Tribunal de Apelación de Salé (cerca de Rabat) que costó entonces a 23 independentistas saharauis condenas a penas de entre veinte años de cárcel y la perpetuidad (uno de ellos fue condenado en rebeldía), de los cuales ahora quedan 19 presos en la cárcel.

En un comunicado conjunto, HRW y AI denunciaron que los condenados cumplen penas "que les fueron impuestas en juicios empañados por denuncias de tortura" y basadas únicamente en sus confesiones ante la policía, sin otras pruebas.

La instancia judicial revisa aspectos de forma del anterior juicio -por encima de ella solo cabe un indulto del rey-, y se pronunciará sobre el caso el próximo 25 de noviembre.

El caso de Gdeim Izik se celebró en 2017 en un juzgado civil, después de que el Tribunal de Casación revocase las penas impuestas a los saharauis por el Tribunal Militar en 2013 y ordenase su repetición.

Pero las condenas que habían sido pronunciadas en 2013 fueron confirmadas por el tribunal civil en 2017, pese a que el veredicto se basó, en las dos ocasiones, "en gran medida en confesiones que los acusados habían impugnado", según el comunicado conjunto.

"El Tribunal de Casación es la última oportunidad de encaminar debidamente el juicio de Gdeim Izik", dijo Eric Goldstein, director en funciones de HRW para Oriente Medio y Norte de África en una declaración recogida por la nota.

Goldstein insistió en que tanto los condenados como los policías marroquíes asesinados y sus familias "merecen que se haga justicia en un proceso sea justo y que se vea que es justo".

Once policías marroquíes fueron asesinados durante los enfrentamientos que siguieron el desmantelamiento en otoño de 2010 del campamento de Gdeim Izik donde se instalaron 25.000 saharauis para reivindicar sus derechos sociales.

(c) Agencia EFE