El hotel que parece un hermoso espejismo en medio del desierto

Un palacio al borde de la nada más hermosa, en un paraje remoto, desolado y espectacular. Así sorprende Qasr Al Sarab, un hotel cinco estrellas en Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos.

Su nombre significa “espejismo” y se levanta en medio del desierto como una ilusión brillante. A menos que los huéspedes lleguen en helicóptero -el jeque Khalifa bin Zayed Al Nahyan tiene su propia villa aquí- el viaje de dos horas es tedioso.

El mantenimiento puede ser un desafío, a causa de las tormentas del desierto que suelen dejar granos de arena por doquier. Pero el personal está preparado: cuentan con maquinarias para despejar la arena no sólo de la piscina principal y los alrededores, sino también de las otras 60 piscinas privadas de cada villa.