Hongos mágicos, la gran esperanza de la psiquiatría

Ejemplar de Psilocybe semilanceata, el hongo del que se extrae la psilocibina
Ejemplar de Psilocybe semilanceata, el hongo del que se extrae la psilocibina


Dos trabajos científicos publicados este mes en la revista Journal of Psychopharmacology, muestran que una sola dosis de un alcaloide llamado psilocibina (presente en los hongos alucinógenos consumidos tradicionalmente por los chamanes en México), puede mejorar radicalmente el bienestar y el positivismo de los enfermos de cáncer en estado terminal.

La investigación, se completó en las universidades de Nueva York y John Hopkins, dando a los participantes, diagnosticados con cáncer en fase avanzada, una sola dosis de psilocibina, entre moderada y alta, la cual se les suministró en un entorno controlado con asistencia psicológica de guías áltamente cualificados. Los buenos resultados se mostraron de inmediato, con marcadas reducciones en los niveles de ansiedad y depresión. Curiosamente, estos efectos persistieron en el 80% de los participantes incluso seis meses después de que se les administrase el alcaloide.

En la actualidad, a las personas que se enfrentan a una muerte próxima se les trata con apoyo psicológico y antidepresivos. Sin embargo, ambos enfoques pueden tardar meses en comenzar a dar resultados y no son efectivos en todos los pacientes. Por si fuera poco, algunos de los fámarcos que se les prescribe, como las benzodiacepinas, pueden ser adictivas y en ocasiones presentan efectos secundarios poco recomendables.

Es por eso que la inmediata respuestra mostrada en los trabajos publicados este mes sobre la psilocibina (o si lo preferís los efectos de la “psicoterapia psicodélica asistida”, que así se llama a este tratamiento experimental), están despertando mucho interés entre los psiquiatras y especialistas de las unidades de cuidados paliativos de medio mundo.

Y las aplicaciones de este enfoque médico no solo son de interés para los pacientes de cáncer en fase terminal. A comienzos de este año, un trabajo británico sobre psilocibina y depresión, mostró qe dos dosis entre bajas y medianas de este alcoloide, redujeron los síntomas de la depresión en el 67% de los participantes en el estudio, de los cuales un 42% acabó librándose de la depresión tres meses más tarde. Los participantes en este estudio había sufrido de depresión durante al menos 18 años, y no habían mostrado ningún tipo de mejora con los tratamientos anteriores.

¿Entonces lanzamos ya las campanas al vuelo? ¿Tenemos la cura de la depresión al alcance de la mano? Prudencia, el año que viene se hará un estudio a mayor escala, en el que participarán grupos de control a los que se les suministrará placebos, para verificar los óptimos resultados de la experiencia de este año.

¿Te parece todo demasiado optimista? Pues eso no es todo, un estudio piloto realizado en estos momentos por la Universidad Johns Hopkings sobre adicción al tabaco, muestra que el 80% de los fumadores a los que se les trató con psilocibina siguen sin coger un cigarrillo seis meses después.

Los dos trabajos sobre psilocibina publicados en el número de diciembre de 2016 de Journal of Psychopharmacology son:

* Psilocybin produces substantial and sustained decreases in depression and anxiety in patients with life-threatening cancer: A randomized double-blind trial

* Rapid and sustained symptom reduction following psilocybin treatment for anxiety and depression in patients with life-threatening cancer: a randomized controlled trial

Me enteré leyendo The Independent.