Hombre demanda al Condado de Sacramento; alega brazo fracturado por agentes

Un hombre demandó al Condado de Sacramento alegando que unos agentes le fracturaron el brazo el año pasado mientras lo registraban en la cárcel.

La demanda, presentada la semana pasada ante un tribunal federal por Cristain Rodríguez, nombra al condado como demandado, así como a otras seis personas que, según se afirma, eran agentes en ese momento.

El 29 de septiembre, Rodríguez fue arrestado por una presunto incumlplimiento de su libertad condicional y trasladado a la Cárcel Principal del Condado de Sacramento para ser fichado, según la demanda.

Durante el proceso de registro, dos agentes lo desnudaron, lo “lanzaron” contra una pared y comenzaron a retorcerle los dedos, los codos y las muñecas sin que opusiera resistencia, según la demanda.

A continuación, los agentes lo arrastraron a una habitación contigua y lo tiraron al suelo boca abajo, donde lo esposaron a la espalda, aunque seguía sin oponer resistencia, según la demanda. Unos agentes desconocidos lo sujetaron por los tobillos.

El agente Jarrod Hopeck tomó luego el brazo izquierdo de Rodríguez y se lo retorció con fuerza por detrás de la espalda mientras estaba esposado, mientras Rodríguez decía repetidamente ‘me vas a romper el brazo’”, dice la demanda.

“(Hopeck) sabía que le había fracturado el brazo (a Rodríguez) cuando oyó que se fracturaba, y vio (a Rodríguez) reaccionar con agonía en el momento exacto en que ocurrió”, dice la demanda.

Hopeck no seguía siendo empleado del condado al 7 de diciembre, de acuerdo con una lista de empleados del condado que The Bee recibió por una solicitud en virtud de la Ley de Registros Públicos de California. No está claro si renunció o fue despedido. Hopeck no respondió de inmediato a un correo electrónico en busca de comentarios. Había estado involucrado en al menos otros seis usos de la fuerza o tiroteos con participación de agentes desde 2016, según una página web de la Oficina del Alguacil.

Cinco días después de la lesión, Rodríguez fue asignado a una celda y solicitó continuamente atención médica, pero nunca la recibió, señala la demanda. Tras ser liberado, profesionales médicos le diagnosticaron una fractura de codo junto con otras lesiones. Sus lesiones no han sanado.

El sargento Amar Gandhi, portavoz de la Oficina del Alguacil, declinó decir al Bee si las nueve personas nombradas como acusados seguían siendo empleados de la Oficina del Alguacil o a hacer comentarios sobre la demanda.

Al menos otros dos agentes nombrados en la demanda ya no eran empleados del condado al 7 de diciembre, según la lista de empleados del condado.

En la demanda se alegan confiscaciones irrazonables, uso excesivo de la fuerza, responsabilidad del supervisor, infracciones de la Ley Bane de California, negligencia, agresión y violencia.

El incidente ocurrió en septiembre, y el condado aún no ha publicado videos o registros al respecto.

En 2019, legisladores estatales aprobaron el Proyecto de Ley del Senado 1421, que requería que las dependencias del orden divulgaran documentos sobre tiroteos con participación de agentes y otros usos de la fuerza que causaron las llamadas “lesiones corporales graves”.

Una fractura de codo probablemente calificaría como una lesión corporal grave bajo el SB 1421, dijo David Loy, abogado de la First Amendment Coalition.

“No puedo garantizar lo que haría un tribunal, pero creo que una fractura de codo debería contar, especialmente si se tiene en cuenta que, en virtud de la Constitución de California, términos como ‘lesiones corporales graves’ en las leyes de transparencia deben interpretarse ampliamente a favor de la divulgación”, dijo Loy.

La Oficina del Alguacil del Condado de Sacramento y el Departamento de Policía de Sacramento aún no han hecho públicos decenas de expedientes disciplinarios que entran dentro del ámbito de aplicación de la ley, según una investigación del Sacramento Bee.

Los incidentes ocurridos en las cárceles del Condado de Sacramento están especialmente bajo escrutinio en estos momentos. Desde el 5 de mayo, cuatro hombres han muerto mientras estaban internos en una de las dos cárceles del condado.