Un hombre comió tocino crudo durante años, luego médicos de Florida encontraron gusanos en su cerebro

Un hombre llegó a un hospital de Orlando desesperado después que el medicamento que usaba para la migraña dejó de ser efectivo para los atroces dolores de cabeza que padecía.

El hombre de 52 años llevaba sufriendo de migrañas desde hacía años y había podido controlarlas con medicinas, según el reporte de un caso que se publicó en la revista American Journal of Case Reports fechado el 7 de marzo. Pero en los últimos cuatro meses, los dolores empeoraron.

Sin embargo, nada parecía ayudarlo, le dijo a los médicos.

Los médicos comenzaron a estudiar su historia clínica.

Además de los dolores de cabeza, el hombre tenía diabetes Tipo 2, complicada por daños nerviosos, colesterol alto y estaba obeso, según el reporte del caso.

Los dolores de cabeza aumentaron, pero el hombre no reportó ningún otro síntoma neurológico como convulsiones, entumecimiento, debilidad muscular ni cambios en la cara, de acuerdo con los médicos.

Apenas había viajado en los últimos tiempos, salvo un crucero a las Bahamas dos años antes, y dijo que no comió nada fuera de lo común durante el viaje, según el reporte del caso.

Sin embargo, le dijo a los médicos que había pasado la mayor parte de su vida comiendo tocino “ligeramente cocinado” o “casi crudo, sin estar crujiente”.

El hombre fue sometido a una tomografía cerebral, donde los médicos hallaron varios pequeños quistes dentro del tejido cerebral, reveló el reporte del caso.

Los quistes estaban localizados en ambas partes del cerebro, de modo que el paciente fue enviado “de urgencia” a un neurólogo para un examen más minucioso.

Había una inflamación alrededor de los quistes, observó el equipo de neurología, de modo que los médicos pensaron que las inflamaciones venían de una fuente externa, y entonces buscaron la ayuda de un experto en enfermedades infecciosas.

Un panel de expertos descartó la presencia de sida y de RPR, sífilis, y también descartó la presencia de criptococo, una infección fúngica y de toxoplasmosis, un parásito que contraen los humanos a través de las heces fecales del gato.

Se llevó a cabo un último examen en busca de cisticercosis, y arrojó positivo.

El hombre tenía lombrices solitarias en el cerebro.

“La cisticercosis es una enfermedad que ha dejado un gran impacto en la humanidad a lo largo de la historia, desde fechas tan remotas como la antigua Grecia”, escribieron los médicos en el reporte del caso. “Para ellos, la conexión entre la cisticercosis y el consumo de puerco era indudable, y los cerdos se consideraban impuros o sucios durante la antigüedad”.

La cisticercosis ocurre cuando la larva del parásito taenia solium entra al cuerpo, habitualmente cuando la persona consume “agua o comida contaminada con lombrices solitarias”, dijeron los médicos.

Por lo general, el parásito vive en cerdos, lo que quiere decir que la mayoría de las personas se infecta bebiendo agua donde los puercos han defecado, o comiendo tocino crudo.

El caso del hombre de la Florida, sin embargo, era diferente.

“La preferencia durante mucho tiempo del paciente por comer tocino sin cocinar pudo haber provocado la enfermedad, y a su vez, haberle causado taeniasis, una lombriz solitaria intestinal, y no cisticercosis”, dijeron los médicos.

Comoquiera que los parásitos viajaron desde los intestinos hasta el cerebro, los médicos sospechan que el hombre se infectó cuando no se lavó apropiadamente las manos tras haber usado el baño.

“Resulta muy raro que los pacientes contraigan neurocisticercosis fuera de la exposición clásica o durante un viaje, y este tipo de casos en Estados Unidos se acabaron o simplemente no existen”, dijeron los médicos. “Es muy poco probable encontrar puerco infectado en Estados Unidos, y el paciente de este caso pudo haber tenido implicaciones de salud pública”.

El hombre fue atendido de forma exitosa con los fármacos adecuados, con el tiempo los quistes disminuyeron de tamaño y las migrañas desaparecieron, según el reporte del caso.

Traducción de Jorge Posada