Un hispano-brasileño en prisión preventiva en Londres por un mortal ataque con espada

La policía forense examina el lugar donde un hombre atacó a unos transeúntes con una espada, en Hainault, en el este de Londres, el 30 de abril de 2024 (Adrian Dennis)
La policía forense examina el lugar donde un hombre atacó a unos transeúntes con una espada, en Hainault, en el este de Londres, el 30 de abril de 2024 (Adrian Dennis)

Un hispano-brasileño fue puesto en prisión preventiva el jueves por un tribunal de primera instancia de Londres por asesinato y otros cargos, tras un ataque con espada en el que murió un chico de 14 años.

Marcus Arduini Monzo está acusado del ataque perpetrado el martes en un suburbio del noreste de la capital británica con una espada de tipo samurái, en el que murió el adolescente Daniel Anjorin y otras cuatro personas resultaron heridas.

Monzo, de 36 años, atacó presuntamente a Anjorin mientras el adolescente se dirigía a la escuela. También se le acusa de herir gravemente a dos agentes de policía, que tuvieron que ser operados y permanecen hospitalizados.

Uno de ellos, una mujer, estuvo a punto de perder una mano, según informó la policía metropolitana de Londres.

El jueves por la mañana Monzo compareció ante el tribunal de magistrados de Westminster, vestido con una remera y pantalones grises, y con el brazo izquierdo cruzado sobre el pecho.

El magistrado Paul Goldpsring le impuso prisión preventiva para que compareciera la semana próxima ante el tribunal londinense de Old Bailey.

El martes, poco antes de las 07H00 locales el acusado estrelló una furgoneta contra la valla de una casa, atropelló a un hombre de 33 años y lo apuñaló en el cuello.

A continuación presuntamente atacó a otro hombre de 35 años en el interior de una propiedad cercana, causándole laceraciones en el brazo, antes de matar a Anjorin.

La policía llegó al lugar 12 minutos después de la primera llamada e intentó neutralizar al sospechoso con un espray incapacitante y una pistola Taser, pero no surtieron efecto.

El hombre huyó de nuevo mientras los aterrorizados testigos se refugiaban en las casas antes de que la policía volviera a utilizar una pistola eléctrica, deteniéndolo 22 minutos después de la llamada inicial.

La policía declaró que el atentado no estaba relacionado con el terrorismo y no hizo comentarios sobre su motivación.

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