Hindley asalta el liderato del Tour tras ganar etapa en los Pirineos. Vingegaard se aleja de Pogačar

LARUNS, Francia (AP) — La primera etapa de montaña en el Tour de Francia agitó la carrera el miércoles al estrenar un nuevo líder y confirmar que el campeón vigente Jonas Vingegaard lleva las de ganar en su duelo con el dos veces campeón Tadej Pogačar.

En su bautizo en un Tour, Jai Hindley, un ex campeón del Giro de Italia, se apoderó de la casaca amarilla de líder general tras llevarse el triunfo en la quinta etapa, una recorrido 162,7 kilómetros (100,9 millas) que incluyó un brutal ascenso de 15,2 kilómetros (9,4 millas) al Col de Soudet.

Vingegaard se hizo fuerte en otro exigente ascenso, el Marie-Blanque, el tercero y último del día, para lanzar un fulminante ataque ante un Pogačar sin respuestas.

“Atacó y no pude seguirle: simplemente, él ha sido hoy más fuerte que yo”, dijo Pogačar. “No he podido hacer mucho más. Espero tener mejores piernas mañana”.

Hindley, del equipo Bora-Hansgrohe, formó parte de un grupo de fuga al comienzo de la quinta etapa y se convirtió en el primer australiano que se enfunda el ‘maillot’ amarillo desde Rohan Dennis en 2015.

“Estar en la escapada no formaba parte del plan”, dijo Hindley. "Simplemente he improvisado, tratando de disfrutar de la carrera. Una vez me filtré en ese grupo, quise disfrutar el día al máximo. Ganar el máximo tiempo posible para la general y buscar la victoria de etapa si era posible.

“Al final he conseguido las dos cosas, y de un plumazo estoy aquí vestido con el maillot amarillo”, añadió. “Es increíble. No tengo palabras”.

El danés Vingegaard (Jumbo-Visma) lanzó su ataque en el momento justo, luego que su compañero estadounidense Sepp Kuss se encargó de un rápido y agotador ritmo que le pasó factura a Pogačar (UAE Team Emirates), quien tras llegar a la meta se enteró que su novia se cayó en el Giro de Italia femenino y pudo haber sufrido una conmoción cerebral

“Eso sí que son malas noticias, mucho más tristes que perder 50 segundos o un minuto con Jonas”, dijo el esloveno.

Vingegaard quedó como escolta de Hindley en la general, 47 segundos atrás, según los resultados provisionales. Pogačar marcha sexto, 1:40 detrás. El británico Adam Yates (UAE Team Emirates) retrocedió del primer lugar al quinto, rezagado a 1:34. Y el colombiano Egan Bernal (Ineos Grenadiers) es el mejor latinoamericano en la general, situado 20mo y 4 minutos detrás.

Pese a su excelente primer día en las montañas, Vingegaard no quiso celebrar por adelante. Sabe perfectamente bien que el Tour es una carrera de tres semanas en la que algo inesperado puede pasar.

“Conozco bien a Tadej, nunca se rinde”, dijo Vingegaard. “Vamos a pelear hasta el final en París”.

Vingegaard destronó a Pogačar el año pasado y llegó a tope para defender el título.

Pogačar empezó el año en gran forma, pero sufrió una caída hace dos meses y tuvo que operarse por una fractura de la muñeca, complicando su preparación para el Tour.

“La alta montaña habló con la verdad", declaró Mauro Gianetti, el jefe del UAE. “Vingegaard quedó primero y Tadej aún no alcanza su mejor versión. Es apenas la quinta etapa, ojalá pueda mejorar. Hay mucho por hacer".

Pogacar necesitará recuperarse bien pronto, pues la sexta etapa el jueves será mucho más feroz. Cubrirá 145 kilómetros entre Tarbes y Cauterets-Cambasque. Se ascenderá a los picos de Aspin y Tourmalet, además de tener el primero de los cuatro finales en las alturas, uno de primera categoría en Cauterets.