‘La herida sigue abierta’: Familias se unen seis años después del trágico tiroteo de Parkland

Justo después de encender una vela para conmemorar el sexto aniversario de la muerte de su hijo Luke, de 14 años, Gena Hoyer se tocó el pecho.

“Siempre me toco el corazón cuando pienso en Luke y en los otros 16. Es lo primero que toco cuando pienso en ellos; me toco el corazón”, dijo más tarde sobre el momento, mientras una lágrima rodaba de su ojo derecho.

“Lo echo mucho, mucho de menos”, añadió, tocándose de nuevo el corazón.

El miércoles, seis años después de que un ex alumno disparara y matara a 17 personas en el campus de la Secundaria Marjory Stoneman Douglas en Parkland el 14 de febrero de 2018, las familias en duelo y otros miembros de la comunidad se reunieron en la cercana Ciudad de Coral Springs para recordar a los 14 estudiantes y tres empleados.

Alrededor de 200 personas asistieron a la ceremonia “Forever in Our Hearts” en Eagles’ Haven, un centro de bienestar inaugurado en marzo de 2019 para fomentar la sanación. El evento, una tradición anual, contó con la liberación de 17 palomas y el encendido de 17 velas, y otras actividades que reflejaron las pasiones individuales de cada una de las víctimas, como ver un baile irlandés en honor al amor por la cultura de Cara Loughran, y hacer ejercicio en honor al amor por el fitness de Scott Beigel.

Gena Hoyer, quien llegó con su esposo, Tom Hoyer, dijo que a medida que pasa el tiempo y el entumecimiento inicial desaparece paulatinamente, el dolor empeora. Pero ver a las otras familias ayuda.

“Nos apoyamos los unos en los otros para recibir apoyo y cariño”, dijo. “Siempre estamos ahí los unos para los otros”.

Esas relaciones entre los miembros de la familia fueron evidentes cuando todos se abrazaron después de encender cada vela dentro de un jarrón de cristal con el nombre de cada víctima en rojo. Encendieron las llamas una a una, mientras sonaba de fondo “Forever” de Kenny Loggins. El público sorbía por la nariz y suspiraba, acompañándoles.

Sarah Franco, directora ejecutiva de Eagles’ Haven, dirigió al grupo en tres respiraciones profundas, mientras algunos cerraban los ojos.

“Hace seis años, el 14/2, para nuestra comunidad, pero especialmente para las familias de las víctimas, el mundo se paró, y nuestros corazones se rompieron en mil pedazos, y sentimos que habíamos perdido la capacidad de respirar. Y de nuevo hoy nuestros corazones duelen literalmente por las familias porque su dolor nunca terminará, y sus corazones están y estarán siempre rotos”, dijo Franco.

“Sin embargo, durante seis años, amándonos y apoyándonos los unos a los otros, hemos encontrado de alguna manera la forma de llegar a este día y seguir respirando a través del dolor”, continuó. “A veces necesitamos un recordatorio para respirar, y creo que hoy es uno de esos días, así que vamos a respirar profundamente tres veces juntos como una comunidad para enviarnos fuerza unos a otros”.

El grupo inspiró y espiró, y luego caminó unos metros hacia las dos jaulas de madera con 17 aves blancas en su interior. Mientras algunos familiares las abrían, Lori Alhadeff abrazó a su esposo, Ilan Alhadeff. Ellos perdieron a su hija Alyssa en la tragedia.

“Es un día triste para mí. Es un día muy difícil para mí”, dijo Lori Alhadeff sobre el aniversario. “La herida sigue abierta”.

Alhadeff, que se tatuó un 8 en la muñeca para simbolizar la camiseta de fútbol de su hija, dijo que quiere que todos sepan que seguirá intentando que las escuelas sean más seguras. La ex maestra fue elegida miembro de la Junta Escolar del Condado Broward después del tiroteo y actualmente ocupa el cargo de presidenta de la junta.

El superintendente de las Escuelas Públicas de Broward, Peter Licata, que el miércoles por la mañana visitó el campus de Stoneman Douglas para entregar una corona de flores y la Escuela Intermedia Coral Springs después para pintar rocas con los niños, se hizo eco del sentimiento de Alhadeff.

“Tenemos que encontrar la manera de cambiar eso”, dijo. “Esta no era mi realidad cuando yo iba a la escuela, pero es la realidad de los niños de hoy en día. Así que tenemos que averiguar dónde nos equivocamos y cómo arreglarlo”.

También elogió a la comunidad por unirse.

“Es impresionante cómo la comunidad sigue haciendo esto, y es algo que tiene que continuar”, dijo.

Mientras los asistentes se paseaban por el evento, comiendo los platillos favoritos de los 17, como los nuggets de pollo de Chick-Fil-A de Luke Hoyer y las crepes de nutella de Alexander Schachter, Ellen Enoch-Marx acariciaba un poni, en homenaje a la afición de Meadow Pollack por los caballos.

Enoch-Marx, vecina de Coral Springs de 67 años, dijo que visitó Eagles’ Haven el miércoles para consolar a las familias afectadas.

“Estas personas han perdido a sus seres queridos en un crimen horrible”, dijo la jubilada del Memorial Hospital. “Necesitan nuestro apoyo”.