Guerra en Ucrania: EE.UU. reveló que un “grupo proucraniano” podría estar detrás del sabotaje a los gasoductos Nord Stream

Guerra en Ucrania: EE.UU. reveló quién podría estar detrás del sabotaje a los gasoductos Nord Stream y generó controversia
Guerra en Ucrania: EE.UU. reveló quién podría estar detrás del sabotaje a los gasoductos Nord Stream y generó controversia

Un “grupo proucraniano” está detrás del sabotaje del año pasado a los gasoductos Nord Stream 1 y 2 en el mar Báltico, aseguró este martes el diario The New York Times según fuentes de inteligencia estadounidense que no identifica.

Tal como precisaron funcionarios estadounidenses, no hay indicios de que el presidente ucraniano Volodimir Zelensky esté involucrado en el sabotaje que benefició a Ucrania al mermar la capacidad rusa de amasar millones mediante la venta de gas natural a Europa Occidental.

La versión difundida por los servicios de inteligencia de Estados Unidos sugiere que los autores eran “adversarios del presidente ruso Vladimir Putin”, probablemente ciudadanos ucranianos o rusos, según específica el diario norteamericano en su artículo. En principio, no revelaron el nombre del grupo.

El gasoducto Nord Stream 2, localizado en el Mar Báltico.
El gasoducto Nord Stream 2, localizado en el Mar Báltico.

Varios medios de comunicación alemanes –el semanario Die Zeit y los canales públicos ARD y SWR– señalaron sin fuentes identificadas que para la operación se usó un barco alquilado por una empresa con sede en Polonia y “aparentemente perteneciente a dos ucranianos”.

A bordo del barco subió un equipo de seis personas –cinco hombres y una mujer– para transportar y colocar los explosivos, añadieron. Los medios alemanes afirmaron haber obtenido la información de entrevistas “con fuentes en varios países”.

En respuesta, el asesor presidencial ucraniano, Mijailo Podoliak, escribió en Twitter este martes: “Ucrania no tiene nada que ver con el incidente del mar Báltico y no tiene información sobre ‘grupos de sabotaje proucranianos’”.

Al mensaje del asesor presidencial se sumaron las declaraciones del ministro ucraniano de Defensa, Oleksii Reznikov, quien aseguró el miércoles que su gobierno no estaba involucrado en las explosiones que dañaron los gasoductos Nord Stream 1 y 2.

Por su parte, el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, advirtió el miércoles del peligro de llegar a conclusiones prematuras sobre la autoría, sugiriendo que el ataque podría haber sido también una operación de “bandera falsa” para culpar a Ucrania.

“Tenemos que distinguir con claridad si se trata de un grupo ucraniano, si puede haber ocurrido por órdenes ucranianas, o de un grupo proucraniano (que actúa) sin conocimiento del gobierno. Pero advierto que no hay que sacar conclusiones precipitadas”, declaró Pistorius en los márgenes de una cumbre en Estocolmo.

Pistorius dijo con anterioridad que la probabilidad de que se tratara de una “operación de bandera falsa montada para culpar a Ucrania” era “igualmente alta”.

Rusia también rechazó este miércoles las informaciones de prensa según las cuales un “grupo proucraniano” sería responsable del sabotaje el año pasado de los gasoductos rusos Nord Stream 1 y 2, por considerar que se trata de un intento de “desviar la atención”.

“Está claro que los autores del ataque quieren desviar la atención. Está claro que se trata de un golpe mediático coordinado”, dijo el portavoz del presidente ruso Vladimir Putin, Dmitri Peskov, citado por la agencia de prensa rusa Ria Novosti.

”Este caso no es sólo extraño. Esto parece un crimen monstruoso”, continuó Peskov, pidiendo una “investigación transparente urgente”.

Peskov insistió en que Rusia debe participar en la investigación internacional sobre el sabotaje de estos dos importantes gasoductos construidos para transportar gas ruso a Europa.

”Seguimos sin poder participar en la investigación”, añadió Peskov.

Alemania, Dinamarca y Suecia llevan a cabo investigaciones judiciales sobre la destrucción de los gasoductos. Sin embargo, “no está clara la nacionalidad de los autores”, porque se utilizaron pasaportes falsos para alquilar el barco, afirmó Die Zeit.

Según investigadores, el comando zarpó desde Rostock el 6 de septiembre. En el barco se detectaron rastros de explosivos al ser devuelto “sin limpiar” a su propietario, escribió Die Zeit. “Aunque las pistas conducen a Ucrania, los investigadores aún pudieron determinar quién encargó” la operación, subrayó el semanario.

El New York Times indicó que la versión consultada por los servicios secretos de Estados Unidos no permite llegar a “conclusiones firmes” y “deja abierta la posibilidad de que la operación haya sido lanzada en secreto” por una fuerza con vínculos dentro del gobierno ucraniano o sus servicios de seguridad.

El 26 de septiembre se detectaron cuatro fugas de gas precedidas de explosiones submarinas en los gasoductos que unen Rusia con Alemania, todas ellas en aguas internacionales. Los países occidentales acusaron de las explosiones a Rusia, que en febrero de 2022 invadió Ucrania.

Moscú, por su parte, acusó a los “anglosajones” de estar detrás de este sabotaje.

En esta línea, el reconocido periodista Seymour Hersh, ganador del premio Pulitzer, publicó un extenso artículo en febrero de este año en el que aseguraba que Washington planificó el ataque.

El periodista aseguró que los responsables de este sabotaje eran buzos de la marina estadounidense que durante las maniobras de la OTAN Baltops 22 colocaron los explosivos. Según la teoría de Hersh el 26 de septiembre un avión de la Marina noruega lanzó una boya hidroacústica que detonó los artefactos explosivos. Esta decisión de estallar los artefactos se habría tomado 9 meses después tras un “debate secreto” de las agencias de seguridad nacional estadounidense.

La Casa Blanca salió al cruce del artículo, al cual calificó de “totalmente falso y de completa ficción”.

Desde la invasión de Ucrania por parte de Rusia, los dos gasoductos motivaron tensiones geopolíticas, alimentadas por la decisión de Moscú de cortar el suministro de gas a Europa en supuesta represalia por las sanciones occidentales. Los dos gasoductos estaban fuera de servicio pero contenían grandes cantidades de metano.

Agencia AFP