Guerra en Medio Oriente: el número dos de Hamas murió en un bombardeo en Beirut atribuido a Israel
BEIRUT.- El número dos del grupo terrorista Hamas, Saleh al Arouri, murió este martes en un bombardeo atribuido a Israel en el sur de Beirut, la capital del Líbano, informaron dos funcionarios de seguridad libaneses.
Mark Regev, asesor del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo a MSNBC que Israel no había asumido la responsabilidad de este ataque, pero “quienquiera que lo haya hecho, debe tener claro: que no se trata de un ataque contra el Estado libanés”.
“Quienquiera que haya hecho esto, ha realizado un ataque quirúrgico contra los dirigentes de Hamas”, añadió Regev.
Según una de las fuentes de seguridad libanesas, Al-Arouri murió junto a sus guardaespaldas en un ataque con aviones no tripulados contra la oficina de Hamas en el suburbio sur de Beirut, bastión del movimiento Hezbollah, respaldado por Irán.
El sitio de noticias Al-Mayadeen, vinculado a Hezbollah, informó que el recuento de muertos por el presunto ataque israelí aumentó de cuatro a seis. Hezbollah confirmó a medios libaneses que Al-Arouri está entre las víctimas mortales del ataque, que además dejó varios heridos.
Además de ser el número dos del brazo político de Hamas, Al-Arouri era también uno de los comandantes de la rama militar, las Brigadas Ezzedine al-Qassam. Netanyahu había amenazado con matarlo incluso antes de que comenzara la guerra entre Israel y Hamas, el 7 de octubre, con el asalto múltiple del grupo terrorista.
La televisión del grupo islamista palestino, por su parte, informó del “asesinato” de uno de sus dirigentes.
“Los cobardes asesinatos llevados a cabo por la ocupación sionista contra los líderes y símbolos de nuestro pueblo palestino dentro y fuera de Palestina no lograrán quebrar la voluntad y la firmeza de nuestro pueblo ni socavar la continuación de su valiente resistencia”, dijo Izzat al-Rishq, alto funcionario de Hamas, en un comunicado, en el que consideró el ataque como una demostración del “abyecto fracaso del enemigo a la hora de lograr cualquiera de sus objetivos agresivos en la Franja de Gaza”.
Si Israel estuvo detrás del ataque, podría marcar una escalada importante en el conflicto de Medio Oriente. El líder de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah, había prometido anteriormente tomar represalias contra cualquier ataque israelí contra funcionarios palestinos en el Líbano.
El primer ministro interino de el Líbano, Najib Mikati, condenó el “nuevo crimen israelí” y advirtió que Jerusalén pretende arrastrar a El Líbano a una nueva fase de confrontaciones.
Ahsan Attia, miembro de la oficina política de la Yihad Islámica, dijo que Israel “pagará el precio de sus crímenes, incluido el asesinato de Saleh al-Arouri”, informó el medio libanés Al-Mayadeen.
El sitio de noticias israelí Walla informaron que “Israel se está preparando para una respuesta muy significativa, que podría incluir el despido de misiles de largo alcance de Hezbollah”.
Según los informes, junto a Al-Arouri, otro alto miembro del ala militar de Hamas, Hazam Akre, habría sido asesinado.
La explosión sacudió Musharafieh, uno de los suburbios del sur de la capital libanesa, que es un bastión de Hezbollah. La explosión provocó un incendio en la calle Hadi Nasrallah.
Al-Arouri, acusado por Israel de ser el cerebro de múltiples atentados, fue elegido adjunto del jefe del buró político de Hamas, Ismail Haniyeh, en 2017. Tras ser encarcelado por Israel cerca de 20 años, fue liberado en 2010 bajo condición de exiliarse.
Desde que comenzaron los últimos enfrentamientos, la lucha ha estado concentrada a unos pocos kilómetros de distancia de la frontera, pero en varias ocasiones la fuerza aérea israelí impactó objetivos de Hezbollah en el interior del Líbano.
Horas antes, Hezbollah dijo que sus combatientes habían perpetrado varios ataques en la frontera entre el Líbano e Israel, impactando puestos militares israelíes.
“Estamos en máxima alerta ante cualquier novedad”, advirtió el vocero militar de Israel, Daniel Hagari.
Agencias AFP, AP, ANSA y Reuters