Grupo católico Sodalicio de Perú acepta expulsión de 10 miembros por orden del papa en caso de abuso
LIMA (AP) — El grupo católico peruano Sodalicio de Vida Cristiana aceptó el lunes “con humildad” la decisión del papa Francisco, quien cinco días antes expulsó a 10 de sus miembros, incluidos un obispo, sacerdotes y laicos, tras una investigación del Vaticano que descubrió abusos de poder, autoridad y espiritualidad.
La medida que sacudió la cúpula del grupo conservador llegó tras la expulsión en agosto de su fundador, Luis Figari, de 77 años, luego de que se revelara que abusó sexualmente de sus seguidores. En un comunicado, el Sodalicio de Vida Cristiana, fundado en 1971, afirmó que acepta la decisión con “humildad y obediencia”.
“Seguiremos colaborando con las diversas instancias de orientación y acompañamiento que la Santa Sede nos señale” indicó el documento. “Continuaremos comprometidos con la escucha y atención a las víctimas, y con los procesos de reparación a través de la justicia y la verdad”, añadió.
Una investigación externa ordenada por el Sodalicio determinó en 2017 que Figari era “un hombre narcisista, paranoico, degradante, vulgar, vengativo, manipulador, racista, sexista, elitista y obsesionado con temas sexuales y con la orientación sexual" de sus integrantes. La misma investigación descubrió que Figari sodomizaba a sus reclutas y los obligaba a acariciarlo a él y a acariciarse entre sí.
Las víctimas de Figari se quejaron ante la arquidiócesis de Lima en 2011, aunque otras denuncias en su contra datan del año 2000. Pero ni la Iglesia local ni la Santa Sede tomaron medidas hasta que una de las víctimas, Pedro Salinas, ya convertido en periodista, escribió, junto con su colega Paola Ugaz, “Mitad monjes, mitad soldados”, un libro en el que detalla las prácticas del Sodalicio en 2015.
La reciente expulsión de los 10 miembros, anunciada por la Conferencia Episcopal Peruana, enumeró los abusos descubiertos por la investigación del Vaticano que rara vez son castigados canónicamente –como el hackeo de las comunicaciones de alguien–, y citó a las personas que el papa hizo responsables.
La investigación fue llevada a cabo por los principales investigadores de delitos sexuales del Vaticano, el arzobispo de Malta, Charles Scicluna, y monseñor Jordi Bertomeu, del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, quienes viajaron a Lima el año pasado para tomar testimonio de las víctimas.
Los investigadores del Vaticano descubrieron abusos físicos “incluso con sadismo y violencia”, abusos de conciencia sectarios, espirituales, de autoridad y económicos en la administración del dinero de la Iglesia y el “abuso en el ejercicio del apostolado del periodismo”.
Pero según los hallazgos de la más reciente investigación del Vaticano, los abusos fueron más allá de Figari, pues involucraron a otros miembros del Sodalicio e incluyeron actos como acoso e intervención de las comunicaciones de sus víctimas, al tiempo que encubrían los delitos cometidos como parte de sus deberes oficiales.
A inicios de septiembre la fiscalía archivó una investigación abierta en 2016 por los delitos de secuestro, lesiones mentales graves y asociación ilícita en contra de seis integrantes del Sodalicio, incluido Luis Figari y otros dos de los expulsados por el Papa, porque, según la resolución fiscal a la que tuvo acceso la AP, los delitos habían prescrito.
Hay otra investigación fiscal que inició en agosto de 2023 y sigue abierta por presuntos delitos de lavado de activos contra dos integrantes del Sodalicio y un tercero que es familiar de un miembro importante de la organización católica. La fiscalía presume que usan empresas de fachada en Islas Vírgenes y Panamá para ocultar ingresos del sector minero, lo cual es negado por el Sodalicio.