Gobierno despliega 1.800 militares en el noroeste de México tras secuestros masivos

CIUDAD DE MÉXICO (AP) — El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, dijo el lunes que 1.800 efectivos de las Fuerzas Armadas fueron desplegados en el estado noroccidental de Sinaloa para participar en los operativos que se activaron tras los secuestros masivos ocurridos hace tres días.

López Obrador confirmó en su conferencia matutina que de las 66 personas que fueron raptadas el pasado viernes en algunas comunidades de la ciudad de Culiacán, capital de Sinaloa, ya fueron liberadas 58, de las cuales 36 son adultos y 22 niños.

Las autoridades localizaron el sábado a 42 secuestrados y otros 16 el domingo.

El mandatario dijo que aún se mantienen las operaciones en Sinaloa para encontrar a las personas que permanece desaparecidas.

Al ser preguntado sobre quienes estarían detrás de los secuestros masivos, López Obrador descartó que los hechos respondan a una acción contra la población y dijo que los raptos se dieron por una “confrontación de bandas”, pero no ofreció detalles.

Los incidentes se dan en medio de una ola de violencia que golpea a varias regiones del país y que el lunes dejó 18 muertos en hechos separados en cuatro estados.

En medio de los operativos de búsqueda, en los que están participando agentes policiales y militares, fue asesinado el domingo en Culiacán un soldado y otro resultó herido durante un enfrentamiento armado. En ese incidente fueron detenidos tres presuntos delincuentes, informó el presidente.

Las investigaciones de los secuestros masivos se han desarrollado en medio de gran hermetismo y las autoridades no han aportado hasta el momento información sobre los posibles autores de los raptos en Culiacán, una región controlada por el poderoso Cártel de Sinaloa.

La Fiscalía de Sinaloa indicó el domingo en un comunicado que abrió nueve carpetas de investigación por los eventos ocurridos entre el viernes y sábado en los que se reportó la desaparición de varias familias.

Los secuestros se registraron un día después del asesinato de tres personas, que fueron calcinadas y dos de ellas degolladas, en la sierra de Badiraguato, en Sinaloa, presuntamente por integrantes de grupos criminales.

Por otra parte, en los estados de San Luis Potosí, Jalisco, Tabasco y Chiapas, en el centro, occidente y sur del país, se vivió el lunes una violenta jornada.

La Fiscalía de San Luis Potosí informó el lunes que fueron localizados cinco cadáveres frente a la entrada de la alcaldía de la localidad central de Cárdenas. La escena quedó registrada en un vídeo que se difundió en las redes sociales en el que se ve los cuerpos en las escaleras y la acera del edificio.

Los cuerpos tiroteados de seis hombres fueron hallados en un terreno baldío del municipio sureño de Paraíso, en Tabasco, confirmó la Fiscalía estatal. Según reportes de medios locales los hombres tenían las manos atadas y una de las víctimas fue degollada.

Otro asesinato múltiple tuvo lugar en el estado occidental de Jalisco donde las autoridades localizaron el lunes los cuerpos de cuatro hombres y una mujer en una carretera entre las localidades de Encarnación de Díaz y Lagos de Moreno, dijo en un comunicado la Fiscalía estatal.

En el estado sureño de Chiapas se registró la madrugada del lunes un enfrentamiento entre grupos armados que dejó dos muertos y un herido y varios vehículos incendiados en la vía, indicó la Fiscalía estatal. El incidente tuvo lugar en un tramo conocido como el “cruce de la muerte” de la carretera que comunica la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, capital del estado, con la localidad de Ocozocoautla.

En las redes sociales se difundieron imágenes de al menos seis vehículos tiroteados e incendiados en medio de la carretera y un cuerpo tendido en el pavimento.