En gobierno de la 4T ha recobrado valor el magisterio: Delfina Gómez

CIUDAD DE MÉXICO, agosto 12 (EL UNIVERSAL).- La educación de niñas, niños, adolescentes y jóvenes es una gran responsabilidad, por lo que, en esta administración, la labor magisterial recobró la importancia que jamás debió perder, dijo la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Delfina Gómez Álvarez.

"Hoy se enaltece la profesión docente como una de las más valiosas en el devenir histórico del país", expresó.

Al encabezar este viernes la cancelación del primer día de emisión de la estampilla postal conmemorativa del Día de la Maestra y del Maestro, en el Patio Carteros del Palacio Postal, la funcionaria dijo que es tiempo de una educación sin exclusivismos y que privilegie los valores humanistas por encima de la ambición, de un aprendizaje que estimule la solidaridad y deseche el egoísmo; una educación que sea un espacio abierto a las ideas, la participación y el encuentro.

Añadió que en la ruta de renovación que emprende la SEP participan todas y todos los miembros del Sistema Educativo Nacional.

"Nos oponemos a la idea de una educación para las élites, para el éxito personal y para la construcción de una nación sin justicia social", dijo.

Reiteró su reconocimiento al compromiso de las y los maestros del país; a los gobiernos y autoridades educativas estatales que han colaborado en esta tarea.

En su mensaje de bienvenida a la Quinta Casa de Correos, la directora general del Sepomex, Rocío Bárcena Molina, mencionó que para la institución que dirige es un honor realizar la cancelación de la estampilla postal con la imagen del periodista, poeta, dramaturgo, historiador, traductor, ensayista, bibliógrafo y profesor mexicano, José María Vigil, un hombre apasionado por la literatura, tapatío de origen y liberal por convicción, un imprescindible de la cultura del siglo XIX.

Ante servidores públicos de ambas instituciones, agregó que "su pluma sirvió para describir y explicar el proceso que culmina con el triunfo de la República en 1867; tanto él como otros escritores relevantes de la época como José María Roa Bárcena, Eufemio Mendoza, Guillermo Prieto y Justo Sierra fueron piezas fundamentales para el desarrollo de la historia de la patria, en un momento en el que se luchaba por enfatizar e incluso hacer obligatoria la enseñanza de historia nacional en todos los niveles".

"Además, su estudio de diversas lenguas como el inglés, portugués, italiano, alemán, griego, francés y latín, le permitió hacer la traducción de diversas obras literarias, como Las sátiras de Persio", comentó Bárcena Molina.