Feria educativa. Por qué crece el interés por estudiar posgrados en Europa
El sol sobre las columnas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA) fue el marco ideal para reunir a las principales universidades europeas con los argentinos que quieren hacer un master o posgrado en el Viejo Continente. Con más de 32 stands y más de 1.000 asistentes esta jornada superó las expectativas de los organizadores, quienes esperaban menor concurrencia porque esta edición estaba dirigida, fundamentalmente, a personas que ya tienen título universitario y desean continuar perfeccionándose en Europa.
“Nos honra poder recibir en Francia estudiantes del mundo entero. Hoy es un día de encuentro con la juventud argentina que viene a hacer preguntas sobre las formaciones en Francia y nos alegramos de poder presentar nuestra diversa oferta de enseñanza superior. Los argentinos son estudiantes muy abiertos al mundo, que tienen esa dimensión universal también en su espíritu, lo cual nos alegra porque es una característica que también tiene la juventud francesa”, asegura Romain Nadal, embajador de Francia, en una entrevista con LA NACION.
Antes de retirarse, el embajador aclara que dentro de su plan de acción tiene como uno de sus principales objetivos fomentar los intercambios universitarios: “Tenemos más de 800 acuerdos entre universidades francesas y argentinas. Son muchos, pero debemos actualizarlos y renovarlos constantemente. Por último, quiero decirles a los argentinos que decidan estudiar en Francia, que somos muy abiertos y se sentirán en familia”.
Los más concurridos
Aunque en todos los stands había personas haciendo consultas, el de la Consejería de Educación de la embajada de España en la Argentina era el más concurrido. Dentro de la gran fila estaba Milena Palacín, de 28 años egresada de la carrera de Comunicación Social, que tiene planeado estudiar en el exterior. “Busco no solo sumar conocimiento sino también realizar la experiencia que te da intercambiar con personas de distintos países, de otras culturas y vivir por un tiempo en otra nación. Vine a la feria, justamente, para ver si me podrían brindar información sobre las becas o conseguir más datos de los que encuentro en Internet”, cuenta. ¿Por qué España? “Más que nada por el tema del idioma y porque conozco gente que está estudiando o viviendo allá y siento que no estaré completamente sola”, dice Milena.
Tomás Juglies (23 años) es ingeniero industrial y llegó a la exposición con el objetivo de averiguar qué puede estudiar para perfeccionarse dentro de su carrera. “Estoy pensando en ir a estudiar a España o Italia. Pero primero quería ver si tengo que rendir alguna equivalencia o hay diferencias con respecto al título que tengo de la Argentina”, agrega.
“Me levanté a las 6 para llegar. Vengo de La Plata”, dice con cierto orgullo Ignacio García Suárez, de 24 años. Aunque todavía está cursando Psicología en la Universidad Nacional de La Plata, llegó con la intención de comenzar a averiguar para poder estudiar en Europa. “Conocí esta exposición por unos españoles que el año pasado vinieron a mi facultad como intercambio. Así fue que empecé a seguir las redes sociales de la Unión Europea y me enteré de esta actividad. A priori quiero estudiar en España, pero no descarto hacerlo en otro país. Aunque mi idea es estudiar y volver a la Argentina creo que también es interesante para generar vínculos laborales para trabajar, en el futuro, a distancia”, revela el estudiante.
Desde el stand español, Juan Cruz Aragoneses, consejero de Educación de la Embajada de España en el Cono Sur destaca el éxito total de la exposición. “Nuestro stand es el que está más demandado no solo por la lengua en común sino también por la gran afinidad que tienen nuestros pueblos. Han venido a consultar desde varias áreas profesionales y muchos preguntan, también, por las becas. La idea es que primero elijan qué quieren estudiar y en qué universidad la quieren hacer. Luego deberían remitirse a esa universidad o a través de nuestra web para ver a qué becas pueden aplicar”, recomienda.
El otro stand que también tenía una larga fila para consultas era Italia. Entre quienes estaban esperando se encontraba Guadalupe Moreno, de 42 años. Ella es abogada, pero quiere perfeccionarse internacionalmente. “Tengo la ciudadanía italiana y vine a averiguar cómo puedo hacer para presentarme en becas. Hoy es complicado pagar cursos internacionales pero quiero hacerlos porque creo que me pueden servir mucho y, además, me permitirán fortalecer el idioma italiano”, cuenta.
Patrick Eser, representante del servicio alemán de intercambio académico (Daad, por sus siglas en alemán) señala que las universidades de su país ofrecen becas para realizar investigaciones allá por tres meses, seis o, incluso, más tiempo y pueden llegar a cubrir el costo total de los estudios y la vida. “También hay becas para estudiar alemán. De todas maneras, hay másteres internacionales que se dictan en inglés, dependiendo de la disciplina. Hoy muchas personas nos preguntaron para hacer su carrera de grado en Alemania, pero eso es más complicado porque los estudiantes durante el primer año deben hacer una especie de CBC, como tiene la UBA, que se dicta solo en alemán y es el que los habilita a estudiar en cualquier universidad alemana. Sin embargo, aquellos que ya terminaron una carrera de grado no deberán hacerlo para estudiar un máster o posgrado”, aclara.
La voz de la experiencia
El evento contó también con la presencia de graduados argentinos que ya pasaron por la experiencia de estudiar en Europa, quienes compartieron consejos y recomendaciones. Entre ellos estuvo Alejandro Iriarte. Este abogado de 40 años realizó un máster en Francia en 2016. “La experiencia fue excelente. Creo que quien se anime tendrá la oportunidad de conocer otro sistema universitario, nuevas ideas, una gran experiencia a nivel social y humano. Me asombró descubrir que, aunque no somos iguales a los franceses nos parecemos en muchas cosas como en la admiración por la cultura, en el amor por el tango, en la nostalgia y hasta en las protestas constantes”, dice entre risas.
Cuando se le pregunta a Iriarte sobre cómo ese perfeccionamiento lo ayudó profesionalmente es contundente: “Es como hablar dos o tres idiomas. Te abre más posibilidades, pero hay que acompañarlo con el resto de las habilidades y conocimientos”.
Becas de la Unión Europea
Además de las propuestas y becas de cada una de las universidades extranjeras, la Unión Europea cuenta con el programa Erasmus. Ofrece un catálogo muy variado. Los interesados pueden consultar en la web los Masters Conjuntos Erasmus Mundos, cuya característica principal es que incluye una rotación obligatoria en dos, tres o cuatro universidades de países diferentes en un lapso de uno a dos años de estadía y, entonces, el título del máster también es conjunto, del grupo de universidades que conforman el consorcio. Hay más de 100 opciones disponibles para elegir. El catálogo se renueva en mayo y generalmente se abre la inscripción en septiembre-octubre. La beca cubre el traslado aéreo, las mudanzas internacionales que impone la rotación y un monto mensual en concepto de gastos de alojamiento y alimentación.
Desde la Unión Europea recomiendan presentarse en el primer llamado, que es en septiembre-octubre; postularse en países que no conocen tanto porque la mayoría aspira a estudiar en España, Portugal e Italia y eso reduce la posibilidad de recibir una beca; presentarse en hasta tres becas; y calificar como argentino porque hay más chances de ser seleccionado ya que los europeos tienen otros programas.
¿Una puerta para migrar a Europa?
Aunque los argentinos consultados aseguraron que su idea es ir a hacer la especialización y volver al país, muchos de los responsables de los stands observaron la intención, de algunos participantes, de poder quedarse a vivir en Europa, por las preguntas que hacían.
Tampoco faltaron las preguntas relacionadas con la ciudadanía. “No pudimos ayudarlos mucho porque es un tema consular. También observamos que, aunque no lo decían abiertamente, algunos venían con intenciones de irse a vivir a Italia porque nos preguntaron sobre los puestos laborales. Pero debemos trabajar para que eso no ocurra. Queremos fortalecer a las universidades argentinas estableciendo enlaces entre instituciones europeas, italianas y argentina”, agrega Salvador Barba, agregado científico de la Eembajada de Italia en nuestro país.
En el stand español, los asistentes también hicieron varias preguntas consulares pero recibieron como respuesta que ingresen en la página web del consulado porque ahí está toda la información. “Respondimos lo que podíamos, pero allí encontrarán los requisitos y que documentación completa que tiene que solicitar para los visados. Vemos que últimamente está aumentando la demanda de información para ir a estudiar y a vivir a España, como pasaba hace 60 años, pero al revés, eran los españoles y los italianos quienes venían a la Argentina”, confiesa Aragoneses.
Por último, el consejero de Educación de la embajada de España sugiere realizar esta experiencia. “Hace a las personas inteligentes, abre caminos, abre el corazón y, obviamente, sumarán conocimientos. ¿Por qué España? Porque tenemos una gran afinidad entre nuestros pueblos”, destaca.
Antes de concluir, Barba confiesa que de todas las ediciones de esta exposición ésta fue la más interesante. “Estoy convencido de que la educación superior en la Argentina es muy buena y no tiene sentido promover los estudios de grado europeo. Sí, por el contrario, es interesante ofrecer una oportunidad de investigación en Europa, en el marco de una carrera de posgrado. Por otro lado, notamos que hoy el público vino con ideas más definidas de lo que querían”, finaliza.