Los familiares de víctimas de los atentados en Bali piden justicia en Guantánamo

Fort Meade (Maryland, EE.UU.), 24 ene (EFE).- Una representación de familiares de las víctimas de los atentados de la isla indonesia de Bali de 2002 pidieron este miércoles justicia al panel (jurado) del proceso militar que debe dictar sentencia contra dos acusados malasios en la base naval estadounidense de Guantánamo (Cuba).

En los ataques perpetrados en locales de ocio nocturno de Bali ese 12 de octubre de 2022 murieron 202 personas de una veintena de nacionalidades, entre ellas 88 australianos, 38 indonesios, 23 británicos y 7 estadounidenses.

"Cada vez que escucho la palabra Bali el olor del lugar de la bomba y el olor de la carne humana vuelve a mí, lo siento como si llevase años en mis fosas nasales", afirmó Susanna Miller, cuyo hermano, el británico Dan, falleció a los 31 años en los atentados.

Su testimonio y el del resto de familiares ocurrió durante la primera jornada de la fase de sentencia del proceso penal contra Mohammed Farik bin Amin y Mohammed Nazir bin Lep, que se declararon culpables la semana pasada tras firmar acuerdos con la Fiscalía militar.

El panel, que fue elegido este martes y que está formado por cinco militares, dedicó gran parte de la sesión de este miércoles a estudiar las declaraciones hasta ahora secretas que Farik y Nazir presentaron ante la Fiscalía, antes de empezar a escuchar a los familiares bien entrada la tarde.

"No puedo decir que mi matrimonio fracasase debido a mi determinación de buscar venganza, pero ciertamente contribuyó", confesó Matthew Arnold, hermano del también británico asesinado en los atentados Tim Arnold, cuando tenía 43 años.

Arnold describió al jurado un relato de "devastación" familiar que ha afectado durante más de dos décadas a tres generaciones.

Chris Snodgrass, que perdió a su hija Deborah, estadounidense de 33 años, reconoció que su asesinato en los atentados yihadistas le despertó un sentimiento de "odio" hacia los musulmanes, con el que lleva lidiando desde 2002.

"Lo único bueno de hacerme mayor es saber que estaré pronto con ella", afirmó.

Farik y Nazir enfrentan penas de entre 20 y 25 años de cárcel al haber acordado declarar en contra del indonesio Encep Nurjaman 'Hambali', considerado un ideólogo del grupo Jemaah Islamiya -filial de Al Qaeda en el sudesete asiático- y también detenido en Guantánamo a la espera de juicio.

Los tres fueron detenidos en Tailandia en 2003 y pasaron cerca de tres años en cárceles secretas de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, en inglés) antes de ser trasladados a Guantánamo.

En 2021, 18 años después de su detención, fueron imputados en la misma causa, pero el año pasado las autoridades separaron sus procesos durante la negociación con Farik y Nazir, que han reconocido haber conspirado con 'Hambali', considerado como uno de los responsables de los hechos.

Casi no se conocen detalles del acuerdo secreto de culpabilidad, pero durante la negociación los acusados pidieron su traslado a Malasia una vez condenados para participar en un programa de rehabilitación para yihadistas.

"En el futuro quedarán en libertad -dijo Miller dirigiéndose a los acusados-. Es posible que tengan hijos propios y crezcan con ellos mientras disfrutan del precioso lujo de la vida. Recuerden entonces a los que mataron y les pido que trabajen para evitar que otros sigan su vicioso camino".

Su eventual traslado serviría para reducir a 28 el número de reos en la base naval de Guantánamo -de los 780 que llegó a haber en su punto álgido- con el objetivo del Gobierno de Joe Biden de cerrar esa cárcel en la isla.

(c) Agencia EFE