Fallece a los 91 años el músico Quincy Jones, que trabajó con Sinatra y Jackson
Por Bill Trott
4 nov (Reuters) - Quincy Jones, el hombre conocido simplemente como "Q" que ejerció una enorme influencia en la música estadounidense mediante su trabajo con artistas como Count Basie y Frank Sinatra y remodeló la música pop en sus colaboraciones con Michael Jackson, falleció a la edad de 91 años el domingo, según su publicista.
Con una carrera musical de más de 65 años a sus espaldas, Jones fue trompetista, director de banda, arreglista, compositor y productor, y consiguió 27 premios Grammy.
Adicto al trabajo de estudio y virtuoso en el manejo de egos delicados, dio forma a grabaciones de grandes del jazz como Miles Davis, produjo a Sinatra y reunió al conjunto de superestrellas que grabó en 1985 la canción benéfica "We Are the World", el mayor éxito de su época.
Jones también fue un prolífico escritor de partituras cinematográficas y coprodujo la película "El color púrpura", así como el programa de televisión de los años 90 "The Fresh Prince of Bel-Air", que lanzó la carrera de Will Smith.
El círculo de amistades de Jones incluía a algunas de las figuras más conocidas del siglo XX. Cenó con Pablo Picasso, conoció al Papa Juan Pablo II, ayudó a Nelson Mandela a celebrar su 90 cumpleaños y una vez se retiró a la isla de Marlon Brando en el Pacífico Sur para recuperarse de una crisis nerviosa.
Los logros más duraderos de Jones fueron en colaboración con Jackson. Produjeron tres álbumes históricos —"Off the Wall" en 1979, "Thriller" en 1982 y "Bad" en 1987— que cambiaron el panorama de la música popular estadounidense. "Thriller" vendió 70 millones de copias, y seis de las nueve canciones del álbum se convirtieron en sencillos que entraron en el Top 10.
IRRUPCIÓN MUSICAL
Quincy Delight Jones Jr. nació el 14 de marzo de 1933 en Chicago. De niño, aspiraba a ser un gángster como los que veía en su barrio. Tenía 7 años cuando ingresaron a su madre en un psiquiátrico. Su padre, carpintero, se volvió a casar y trasladó a la familia a Bremerton, en el estado de Washington, donde el joven Quincy se dedicó a la delincuencia.
Jones dice que su interés por la música floreció en Bremerton, cuando él y unos amigos encontraron un piano después de colarse en el centro comunitario del proyecto de viviendas segregadas en tiempos de guerra donde vivían.
Experimentó con distintos instrumentos en la banda del colegio antes de decidirse por la trompeta y, a los 13 años, ya tocaba jazz, música popular y rhythm-and-blues en clubes nocturnos. En Seattle, a los 14 años, Jones conoció a Ray Charles, un joven de 16 años que aún no era famoso y que le enseñó a arreglar y componer música.
Jones ganó una beca en lo que se convertiría en la Berklee School of Music de Boston, pero renunció a ella para salir de gira con la banda de Lionel Hampton como trompetista adolescente a principios de la década de 1950.
"La música era lo único que podía controlar", escribió Jones en su autobiografía. "Era el único mundo que me ofrecía libertad [...]. No tenía que buscar respuestas. Las respuestas no estaban más allá de la campana de mi trompeta y mis partituras garabateadas a lápiz. La música me hizo pleno, fuerte, popular, autosuficiente y genial".
A finales de la década de 1950 realizó giras por todo el mundo patrocinadas por el Gobierno estadounidense con una banda organizada por el pionero del jazz bebop Dizzy Gillespie. Jones dirigió después su propia banda por Europa. Estaba muy endeudado a principios de la década de 1960 cuando aceptó un trabajo en Mercury Records de Nueva York, gracias al que se convirtió en uno de los primeros ejecutivos negros de una discográfica de propiedad blanca.
Los puristas del jazz le tacharon de vendido por hacer música pop, pero Jones dijo más tarde a la revista Rolling Stone que "la motivación subyacente de cualquier artista, ya sea Stravinski o Miles Davis, es hacer el tipo de música que quiere y que todo el mundo la compre".
Jones también arregló el éxito de Sinatra "Fly Me to the Moon", que el astronauta Buzz Aldrin reprodujo en una grabación de casete durante el primer alunizaje en 1969. Años más tarde, Sinatra le llamó "como un niño pequeño", según dijo Jones a la revista GQ. "¡Tenemos la primera música en la luna, tío!", le dijo Sinatra.
(Información de Bill Trott; redactado por Bill Trott; editado por David Gregorio y Angus MacSwan; editado en español por Javi West Larrañaga)