Expertos en salud critican que Nueva Zelanda elimine la primera prohibición al tabaco en el mundo
LONDRES, 27 nov (Reuters) - Activistas de la salud afirmaron el lunes que el plan de Nueva Zelanda de derogar las leyes que prohibirían la venta de tabaco a las generaciones futuras pone en peligro vidas humanas y pone en riesgo los esfuerzos internacionales para frenar el tabaquismo.
La nueva coalición de centro-derecha del país derogará las leyes introducidas por el anterior gobierno laborista, según los acuerdos de coalición publicados el viernes.
El paquete de medidas prohibía la venta de tabaco a los nacidos después del 1 de enero de 2009, reducía la cantidad de nicotina permitida en los productos de tabaco para fumar y recortaba en más de un 90% el número de minoristas que podían vender tabaco.
Fueron algunas de las normas antitabaco más duras del mundo. Posteriormente se propuso en el Reino Unido la prohibición de fumar para las generaciones futuras, y otros países también están estudiando normas similares.
"Es una gran pérdida para la salud pública y una enorme victoria para la industria tabacalera, cuyas ganancias aumentarán a costa de las vidas de los neozelandeses", declaró Boyd Swinburn, copresidente de la Coalición de Salud Aotearoa (HCA, por su sigla en inglés) de Nueva Zelanda.
La HCA se remitió a un estudio académico según el cual las leyes podrían haber ahorrado unos 1.300 millones de dólares en costos del sistema sanitario en 20 años, y haber reducido las tasas de mortalidad.
El Departamento del primer ministro y Gabinete de Nueva Zelanda no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios fuera del horario laboral habitual en el país.
Sarah Jackson, investigadora principal del Grupo de Investigación sobre Tabaco y Alcohol del University College de Londres, afirmó que la decisión podría amenazar los planes de otros países.
"Existe el riesgo de que el giro de Nueva Zelanda lleve a las autoridades de Inglaterra a reconsiderar su postura", afirmó.
Según los documentos, el gobierno de coalición también gravará únicamente los productos para fumar y reformará la normativa sobre alternativas como los vaporizadores, incluida la prohibición de los vaporizadores desechables y el endurecimiento de las penas para quienes vendan a menores de edad.
La ministra de Economía entrante, Nicola Willis, declaró al Newshub Nation de Nueva Zelanda que las medidas del gobierno anterior habrían reducido significativamente los ingresos fiscales.
Deborah Arnott, directora ejecutiva de la organización benéfica británica ASH, afirmó que el tabaquismo cuesta a las finanzas públicas casi el doble que los ingresos fiscales por tabaco.
(Reporte de Emma Rumney, Editado en Español por Ricardo Figueroa)