Los Marlins de Miami sufren por partida doble al caer dos veces ante los Dodgers por su pésima ofensiva

Los Dodgers enfrentaron el viernes al actual Cy Young de la Liga Nacional. Quizá se midieron el sábado a un futuro ganador del prestigioso premio, porque Eury Pérez lució inmenso en el montículo en uno de los más grandes escenarios del béisbol en Los Angeles.

A pesar de contar con un pálido apoyo ofensivo, el dominicano lanzó una pelota de altura a lo largo de seis episodios e impuso una nueva marca personal de ponches ante una alineación temible, pero no pudo llevarse la victoria ante un desplome su equipo en la octava entrada.

Dave Robertson vino a colgar los últimos dos ceros para Miami, pero permitió tres tres carreras y tres hits para que los Dodgers se impusieran el sábado en la tarde 3-1 y resucitaran de la paliza sufrida el viernes, cuando los peces les conectaron cinco cuadrangulares.

Este fue el primer desafío de una doble jornada, ya que que todos los partidos programados originalmente para jugarse el domingo en el sur de California se efectuaban este sábado debido al inminente impacto del huracán Hilary en grandes partes de esa región del país.

El segundo choque vio otra pálida actuación ofensiva de Miami que cayó por marcador idéntico 3-1 al primer encuentro y donde los locales se beneficiaron de dos cuadrangulares de Mookie Betts, mientras que los visitantes solo tenían para mostrar un bambinazo de Josh Bell.

A los Marlins históricamente no les ha ido nada bien en Los Angeles al presentar balance de 46-62 y donde no han ganado un enfrentamiento particular desde abril del 2018, cuando vencieron en dos de tres partidos.

Pérez, a quien no le había ido bien en su salida anterior contra los Yankees en casa al permitir cuatro carreras en apenas cuatro episodios, en esta ocasión se presentó con un dominio absoluto de sus lanzamientos secundarios para destruir cualquier intento de rebelión local.

Entre sliders, cambios y curvas, más una recta de cuatro costuras, Pérez ponchó a 10 bateadores para superar su record personal de nueve y convertirse en el cuarto pitcher en las Mayores que ha lanzado al menos seis entradas sin permitir carreras y con nueve estrucados contra los Dodgers antes de cumplir su cumpleaños 21, uniéndose a Dwight Gooden (2x) en 1984-85 y Johnny Lush en 1906.

Con 20 años y 126 días de edad, Pérez es el lanzador más joven en conseguir un partido de 10 ponches desde que el venezolano Félix Hernández ponchó a 11 bateadores para los Marineros de Seattle el 15 de agosto del 2005, con 19 años y 129 días.

Como si fuera poco, el dominicano mantuvo a los Dodgers en sólo dos hits, no regaló ningún pasaporte y ponchó a la mitad de los 20 bateadores a los que se enfrentó, porque los angelinos fallaron en 22 de sus 47 lanzamientos contra Pérez.

Después de que abandonara el montículo, Andrew Nardi lanzó una séptima sin problemas, pero en la octava Robertson se complicó en demasía antes de que Austin Barnes empatara las acciones con un toque de sacrificio y un sencillo de Mookie Betts remolcara las dos de la ventaja.

Si bien Pérez lució magnífico, lo msimo se puede decir del pitcheo de los Dodgers, especialmente de Ryan Pepiot, quien lanzo cinco entradas de una solitaria carera nacida de un doble de Bryan De La Cruz en el cuarto episodio, porque fuera de eso Miami no pudo hacer nada.