Estudiantes de primaria ganan una demanda millonaria contra California porque no saben leer

Por primera vez un grupo de estudiantes y maestros de la enseñanza primaria en Estados Unidos acaban de ganar una demanda por 53 millones de dólares contra el estado de California... por no saber leer.

Entrada de la escuela primaria Evelyn Thurman Gratts en el centro de Los Ángeles. Según un estudio en la Universidad de Stanford, entre los 26 distritos escolares de todo el país con bajo rendimiento de lectura, 11 se encuentran en California. ( Foto: AP/Richard Vogel)
Entrada de la escuela primaria Evelyn Thurman Gratts en el centro de Los Ángeles. Según un estudio en la Universidad de Stanford, entre los 26 distritos escolares de todo el país con bajo rendimiento de lectura, 11 se encuentran en California. ( Foto: AP/Richard Vogel)

Estudiantes y maestros de las escuelas primarias de bajo rendimiento La Salle Avenue Elementary, de Los Ángeles; Van Buren Elementary, de Stockton; y la escuela preparatoria Children of Promise Preparatory Academy, de Inglewood, ganaron la demanda que presentaron en 2017 contra el estado, su Junta de Educación, el Superintendente de Instrucción Pública y el Departamento de Educación por no haber hecho lo suficiente para garantizar que sus estudiantes aprendieran a leer.

El dinero acordado deberá utilizarse durante tres años en 75 escuelas primarias con bajos rendimientos, donde igual se deberá trabajar para identificar las causas de sus malos resultados académicos, además de desarrollar programas de alfabetización de alta calidad, según un reporte del Washington Post.

Dentro de esas 75 escuelas se incluyen las llamadas chárter, que son financiadas con fondos públicos pero operadas de forma privada. El dinero del acuerdo no estará disponible hasta junio, cuando la legislatura apruebe el presupuesto 2020-2021.

El acuerdo Ella T vs Estado de California fue aceptado por el juez de la Corte Superior del condado de Los Ángeles, Rupert A. Byrdsong, quien dictaminó que los funcionarios estatales deberán presentar una legislación con un programa de subvención en bloque.

La subvención en bloque proporcionará recursos para programas de alfabetización y apoyos necesarios que incluyen entrenadores de alfabetización, ayudantes, especialistas en lectura bilingües, cursos de estudios culturalmente receptivos, y desarrollo profesional basado en evidencia en la entrega de instrucción de alfabetización, entre otros seis programas más.

Leer, piedra angular de la democracia

Entre lo trascendente de este caso, que podría replicarse en otros estados del país, destaca que es el primero de derechos civiles presentado en virtud de una constitución estatal para establecer un derecho de acceso a la alfabetización, aseguró el abogado Mark Rosenbaum, del bufete Public Counsel.

Rosenbaum fue quien llevó adelante esta demanda, basada en el mandato de la constitución de California de que todos los estudiantes deben recibir por igual una educación de calidad.

"El acceso a la alfabetización no es solo la piedra angular de la educación", dijo. "Es la piedra angular de nuestra democracia", argumentó.

Mark Rosenbaum, abogado de larga data en defensa de minorías, considera que "el acceso a la alfabetización no es solo la piedra angular de la educación", dijo. "Es la piedra angular de nuestra democracia". (Foto: Mark Boster/Los Angeles Times via Getty Images)
Mark Rosenbaum, abogado de larga data en defensa de minorías, considera que "el acceso a la alfabetización no es solo la piedra angular de la educación", dijo. "Es la piedra angular de nuestra democracia". (Foto: Mark Boster/Los Angeles Times via Getty Images)

California se ubica por detrás del promedio nacional en las competencias de lecturas. Un estudio en la Universidad de Stanford encontró que de los 26 distritos escolares de todo el país con bajo rendimiento de lectura, 11 son californianos, de acuerdo con un análisis del diario Los Angeles Times.

En una de las escuelas que participó en esta demanda, La Salle Elementary, solo 10 de sus 180 estudiantes cumplían con los estándares de inglés del estado en las evaluaciones de 2017.

Rosenbaum considera que esas deficiencias son tan graves que obstaculizan las posibilidades de los jóvenes de obtener trabajos con salarios mínimos, y que ocurren tanto entre los hablantes de inglés fluido como entre los que deben aprenderlo, sobre todo los inmigrantes.

Al reunirse también con un grupo de estudiantes de preparatoria en el sur de Los Ángeles, Rosenbaum pudo comprobar que carecían de las habilidades de lectura necesarias, incluso, para completar una solicitud de empleo para una cadena de hamburguesas.

Cinco años antes de que se hiciera esta demanda, ya un informe de un panel de expertos en educación exigía una acción rápida y decisiva para ayudar a las escuelas y maestros de California a hacer un mejor trabajo con la enseñanza de la lectura, según Los Angeles Times.

“La necesidad esencial de abordar el desarrollo de la lectoescritura de los niños y estudiantes de California no puede subestimarse”, decía el informe, donde se alertaba además que “muchos alumnos estarán en riesgo académico si no mejora el enfoque de la alfabetización, que debe convertirse en un foco central e inmediato del sistema educativo”.

Si cada Estado cumpliera con su elemental deber de garantizar la educación básica, sin pretender que todos los ciudadanos sean académicos con varios postdoctorados, nadie tendría que irse a los tribunales para exigir que les enseñen a leer. Aunque bien por quienes se atreven a reclamar justamente sus derechos.