Estrellas de "Anastasia" revelan la profundidad de sus personajes

CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 22 (EL UNIVERSAL).- La Emperatriz viuda y Gleb son dos personajes clave dentro de la trama de la obra musical de Broadway: "Anastasia", la cual busca hacer reflexionar al público sobre temas como el amor, familia, lealtad y la moral, que tiene detrás un contexto histórico y que ha sido presentado en diversos países.

Este par de personajes son encarnados por los actores Irasema Terrazas y Carlos Quezada, respectivamente, quienes en entrevista con EL UNIVERSAL tras bambalinas reflexionan sobre cómo es trabajar en este montaje que fue nominado a dos premios Tony y que existe una versión animada del año 1997.

Terrazas describió a su papel como alguien entrañable, quien representa la figura materna de Anastasia y cuidadora de la familia Romanov; nunca pierde las esperanzas por hallar a su nieta, a pesar de que recibe muchas decepciones y de que se pone una capa protectora para no ser lastimada.

"Es la que cuida los valores, la que ha estado al pendiente de lo que resta de su familia aniquilada, por llamarlo de la mejor manera, se dedica a buscar a Anastasia por cielo, mar y tierra", declaró.

Indicó que las abuelas siempre están llenas de sabiduría, así que en esta puesta en escena que se presenta en el Teatro Telcel también será la encargada de dar muchos consejos al resto de personajes.

"Hay una aportación de amor en ida y de retorno por parte de Anastasia por la familia y un anhelo de la emperatriz de por fin hallarla", dijo quien espera que mucha gente se identifique con su papel.

Respecto a la música opinó que la composición del tema de la emperatriz refleja un emocionante viaje emocional desde la esperanza y la protección, además se incluyen todas las melodías que suenan en el largometraje.

En la versión animada no existe el personaje de Gleb, por lo que fue escrita exclusivamente para la obra de teatro, en lugar de Rasputín, con la finalidad de hacerlo con una personalidad más humana y darle un enfoque sociohistórico al musical.

Él es el hijo del asesino de la familia Romanov, quien inevitablemente se enfrenta a un conflicto interno entre los sentimientos que tiene por Anastasia y tener que cuidar del legado de su padre.

Aunque se trata del villano de la historia en realidad Quezada no lo considera un antagonista tradicional, sino un personaje complejo. "Tiene una filosofía y estándares políticos muy marcados".

Indicó que este rol puede ayudar a que el público reflexione sobre sus propias decisiones y valores morales que hay en la actualidad dentro de la sociedad, por lo que podría ser fácil identificarse con él.

"Las personas tienen que darse la oportunidad de reflexionar sobre su propia vida, de tomar sus propias decisiones y tomar conciencia de lo que está bien y de lo que está mal, defender sus ideales desde su moral".

El histrión reveló que trabajó de forma estrecha con la directora para humanizar a Greb y crear una representación auténtica de un comisario de esa época, igualmente se inspiró en diferentes fuentes para ir construyéndolo.

"Desde el inicio me dijo: quiero que representes a Gled como tú crees que debe ser, así que empecé a trabajar desde mi trinchera, tuve que observar fragmentos de clips, de películas, algunas ideas de libros y ahí empecé a crear mi propia conciencia sobre el personaje".