Así es como el estado de los intestinos influye en el estrés

CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 9 (EL UNIVERSAL).- La investigación científica ha demostrado que los microbios intestinales tienen un papel central en la regulación de los ritmos circadianos, afectando directamente la respuesta al estrés. Un estudio del University College Cork y APC Microbiome Ireland reveló que la microbiota influye en las oscilaciones diurnas de las hormonas del estrés, y que una reducción en su diversidad puede alterar el sistema circadiano del cerebro, impactando las áreas responsables de gestionar situaciones estresantes.

El estudio mostró que la microbiota regula el eje hipotálamo-hipofisario-adrenal (HPA), esencial para enfrentar eventos de estrés. Los resultados indicaron que la falta de microbiota provoca una hiperactivación de este eje en ciertos momentos del día, lo que genera una respuesta alterada al estrés. Cepas bacterianas específicas, como Limosilactobacillus reuteri, fueron identificadas por su capacidad de influir en la secreción de glucocorticoides, hormonas clave en la gestión del estrés, mostrando cómo la microbiota y las oscilaciones diurnas están interconectadas.

El profesor John Cryan, líder del estudio, destacó que la microbiota no solo participa en procesos digestivos y metabólicos, sino que también juega un papel crucial en la forma en que el cerebro responde al estrés, siguiendo un ritmo circadiano específico. Mantener un microbioma saludable es vital, especialmente en contextos de vida modernos caracterizados por un entorno estresante y acelerado.

El doctor Gabriel Tofani, coautor de la investigación, señaló que no solo la composición de la microbiota es importante, sino también sus cambios a lo largo del día. Estos cambios influyen en la manera en que el cuerpo maneja el estrés, permitiendo comprender cómo la microbiota modela nuestras respuestas al entorno. Este conocimiento abre puertas al desarrollo de terapias basadas en el control de la microbiota para manejar trastornos relacionados con el estrés.

El estudio resalta el potencial de terapias psicobióticas que mejoren la salud mental al enfocarse en las bacterias intestinales que regulan el estrés. Esta estrategia podría ayudar a manejar la ansiedad, la depresión y otros trastornos relacionados con alteraciones en los ciclos de sueño y el estrés. Según los investigadores, este avance representa un paso importante hacia nuevas formas de tratamiento basadas en el microbioma.

La investigación utilizó el método de trasplante de microbios para confirmar que las oscilaciones diurnas de la microbiota son fundamentales en la regulación de los glucocorticoides. Esto subraya que las variaciones en la microbiota a lo largo del día tienen un impacto directo en cómo se maneja el estrés. Los hallazgos ponen en evidencia la necesidad de mantener un microbioma saludable para preservar la salud emocional y mental, especialmente en tiempos de altos niveles de estrés y hábitos de vida desordenados.