“Estábamos listos”: Comité Organizador revela cómo los partidos pidieron cancelar la elección del Frente Amplio

Luego de anunciar la cancelación de la jornada electoral en la que la ciudadanía elegiría entre Xóchitl Gálvez y Beatriz Paredes, los ex funcionarios electorales que integraban el Comité Organizador del Frente Amplio por México se llevaron los blocks de boletas que minutos antes habían exhibido ante la prensa.

Como “recuerdo” de la elección primaria que no fue, las boletas comenzaron a pasar de mano en mano entre los ex consejeros Arturo Sánchez, Marco Baños, Alejandra Latapí, y los enviados de los partidos que los acompañaron en el anuncio: Cecilia Soto, Guadalupe Acosta Naranjo, Verónica Juárez, Ángel Ávila.

En la tarima en la que el comité ofreció su última conferencia de prensa, fueron colocadas las urnas, las actas, los blocks de boletas, los aplicadores de tinta indeleble y hasta los crayones, como prueba de que, logísticamente, todo estaba dispuesto para la jornada electoral.

Los integrantes del comité revelaron los pasos que los llevaron a cancelar todo: primero, la solicitud de las dirigencias de los partidos de adelantar la publicación de los resultados del último sondeo de opinión con un careo entre Xóchitl Gálvez y Beatriz Paredes ―la tarde del miércoles―; después, las manifestaciones públicas de los priistas “bajando” a su candidata y, finalmente, una carta enviada la mañana del jueves al comité ―firmada por los dirigentes― en la que pedían cancelar la jornada prevista para el domingo 3 de septiembre.

Durante más de un mes, el comité se dedicó a organizar la consulta, crear una estructura en las 32 entidades del país, imprimir más de 2 millones de boletas y capacitar a 7 mil 320 funcionarios para operar mil 160 centros de consulta y 2 mil 500 mesas receptoras de votos.

“Estábamos listos”, dijo con resignación Patricia MacCarthy, otra de las integrantes del comité que, según aseguraron, pronto dará a conocer lo costos de dichos preparativos.

El exconsejero Marco Baños defendió lo realizado, y argumentó que la estructura y el material electoral estaban preparados para el desarrollo de la jornada que sería el último ejercicio cívico programado como parte del proceso interno del Frente Amplio.

“Estábamos a tiempo con los centros de consulta, con la ubicación de las mesas, con la integración de las personas que de manera voluntaria iban a recibir las simpatías en favor de las senadoras Xóchitl Gálvez y Beatriz Paredes”, afirmó.

Para las elecciones primarias, se crearon 32 comités estatales conformados por siete integrantes cada uno, que emulaban las tareas del Instituto Nacional Electoral (INE) y eran una extensión de “los brazos operativos” del Comité Organizador a nivel estatal. En total, se había creado un “ejército” de 224 especialistas electorales y ciudadanos.

Baños precisó el tamaño real de los materiales que, ahí, eran representados por una pequeña muestra: 2 millones 297 mil 529 boletas impresas, 3 mil 660 urnas, actas, crayones y materiales para 2 mil 500 mesas receptoras de votos.

La construcción del padrón se extendió durante 38 días consecutivos, en el que los partidos políticos y los entonces 13 aspirantes presidenciales emprendieron campañas de promoción para solicitar a los ciudadanos su registro en la plataforma digital frenteampliopormexico.org.mx (que tuvo recurrentes problemas de conexión a internet), con lo que asegurarían su participación en la jornada electoral.

Además, la validación de los datos registrados por los ciudadanos en dicha plataforma se extendió también por al menos nueve días más, en la que la empresa proveedora se dedicó a revisar la autenticidad de la información y filtrar que no hubiera militantes de los partidos opositores, de Morena, PT, PVEM y Movimiento Ciudadano.

A la par de la organización de la estructura y el material electoral, el Comité Organizador también conformó un observatorio ciudadano que nombró Misión de Acompañamiento Cívico, que fue integrado por 26 especialistas en asuntos políticos-electorales y ciudadanos, incluso algunos de ellos de origen extranjero.

La principal misión de los observadores, que era vigilar el desarrollo de la organización de la consulta ciudadana y la jornada de votación que fue anulada. Y los integrantes de la “misión de observación” brillaron por su ausencia.

En su discurso de conclusión del proceso interno del Frente Amplio, en el cual resultó vencedora Xóchitl Gálvez, Baños rechazó la detección de riesgos logísticos que impidieran el desarrollo de la jornada electoral.

“Estuvimos platicando con los comités locales todos los días de los estados complejos y no tuvimos una amenaza de que nos fueran a interrumpir. Sí nos preparamos para una situación de esa naturaleza (de inseguridad o sabotaje), porque sería ingenuo ir a consulta de esas características, sin tener medidas que pudieran proteger el desahogo de la consulta”, aclaró.

El exconsejero del INE rechazó que la cancelación de la consulta ciudadana, en el que se preveía la participación de más de dos millones de personas, le reste legitimidad al proceso interno y al triunfo de Xóchitl Gálvez, “es un proceso absolutamente legal, un proceso absolutamente legítimo, con el respaldo de la ciudadanía”, defendió.

“No quedamos a deber absolutamente nada. Porque la participación ciudadana no está circunscrita a la votación. La expresión ciudadana se ha dado en varios frentes y varias actividades de este ejercicio que es inédito y no es tema donde haya un desencanto generalizado… Es un hecho concreto que las expresiones que estamos recibiendo de las organizaciones ciudadanos es muy fuerte todavía”, justificó.

Operación cicatriz en el Frente Amplio

Mientras el comité organizador anunciaba ―y justificaba― la cancelación de la jornada de votación, en la sede nacional del PRI Beatriz Paredes y Xóchitl Gálvez se tomaban la foto que durante horas mantuvo tenso el ambiente en la coalición opositora.

Ambas vestidas de huipil, posaron a lado de los dirigentes nacionales de sus partidos y otros funcionarios de las cúpulas partidistas, en donde se negociaron las declinaciones que, en las últimas semanas, le allanaron el camino a Xóchitl.

En la reunión privada, estuvieron presentes los dirigentes nacionales del PAN, Marko Cortés; del PRI, Alejandro Moreno, del PRD, Jesús Zambrano, así como Santiago Creel, quien será el coordinador de campaña de Gálvez.

También estuvieron los senadores Manuel Añorve y Mario Zamora; el diputado federal, Rubén Moreira; y la secretaria general del PAN, Cecilia Patrón.

En lugar de elecciones primarias, el domingo se prevé que el Comité Organizador le entregue la constancia de victoria a Xóchitl Gálvez en un evento masivo previsto a realizarse en las inmediaciones del monumento del Ángel de la Independencia.

La jornada electoral será sustituida por una fotografía en un lugar simbólico para el panismo, donde sus antiguos candidatos presidenciales ―Luis H. Álvarez, Manuel J. Clouthier ‘Maquío’, Diego Fernández de Cevallos y Vicente Fox― encabezaron mítines en contra del PRI, su actual aliado de cara a 2024.