Escándalo en Bolivia: Evo Morales se rehusó declarar ante la fiscalía por el presunto abuso de una menor
LA PAZ.- El expresidente boliviano Evo Morales decidió no comparecer ante la fiscalía, que lo había citado para la tarde de este jueves para que diera su testimonio en la investigación que enfrenta por el presunto abuso de una menor durante su mandato, anunció su defensa, lo que podría desencadenar en una orden de arresto en su contra.
Morales “no se va a presentar entre tanto no se regularice” el proceso, señaló a la prensa el abogado Nelson Cox. Según la defensa del expresidente -convertido en el mayor opositor del gobierno de su exministro Luis Arce-, la causa contra su cliente es “ilegal” por cuanto la Justicia ya investigó y archivó la misma denuncia en 2020.
El exmandatario, quien gobernó Bolivia entre 2006 y 2019, recibió una citación el martes para que declarara ante una fiscal del departamento de Tarija que lo investiga por los delitos de “estupro, trata y tráfico de personas” tras el abuso a una adolescente de 15 años entre 2014 y 2016, fruto del cual existe descendencia acreditada legalmente, según Guido Melgar, quien se desempeñaba como viceministro de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción, cuando se recibió la denuncia en 2020.
“La menor existe, la madre existe y la menor tiene como padre registrado a Juan Evo Morales Ayma”, dijo Melgar.
También fueron citados por este caso, los padres de la víctima. ”Están volviendo a activar un proceso de forma ilegal y le hemos hecho saber” de esa irregularidad al ministerio público, subrayó Cox.
La fiscal de Tarija Sandra Gutiérrez ordenó la aprehensión de Morales el 26 de septiembre, pero la orden fue anulada por una jueza que aceptó un recurso del exjefe de Estado.
Gutiérrez, quien fue removida y restituida en su cargo, reabrió la causa contra Morales no solo por “estupro” -que implica acceso carnal con menores de 14 a 18 años-, sino que añadió al expediente la presunción de trata y tráfico de personas. Según el escrito que sustentó la orden de aprehensión anulada por la Justicia, los padres de la menor la inscribieron en la “guardia juvenil” de Morales “con la única finalidad de escalar políticamente y obtener beneficios [...] a cambio de su hija menor”, lo que configuraría el delito de trata de personas.
Convertido en un enconado opositor del gobierno que antes apoyaba, Morales niega los señalamientos y los atribuye a una persecución judicial de Arce, con quien se disputa la nominación del oficialismo para las elecciones de 2025.
”El gobierno traidor ha desatado una guerra judicial, la criminalización de la protesta social y la persecución a la oposición política para pretender proscribirnos”, añadió.
El asambleísta departamental José Yucra Paredes de la facción evista del MAS, aseguró que “no hay garantías” para el expresidente. “El objetivo es detener a Evo Morales. El presidente tenía la intención grande de venir a declarar, pero corre riesgo su vida. Ha recibido amenazas de muerte; ha recibido amenazas de hacer volar su auto”, declaró.
El jueves, el ministro de Justicia, César Siles, advirtió que Morales podría ser detenido si rehusaba cumplir con la convocatoria de la fiscalía. ”Cualquier orden de citación señala en su texto que, en caso de incomparecencia, se expedirá el mandamiento de aprehensión”, sostuvo.
El escándalo que podría poner tras las rejas al influyente líder cocalero se remonta a 2015, cuando -según la denuncia que investiga la fiscalía- Morales se involucró con una menor de 15 años con quien tuvo una hija en 2016.
Agencias AFP y AP