‘Solo enseñamos hechos’: Estudiantes y profesores de FIU protestan contra tácticas de DeSantis en la educación superior
Sosteniendo carteles con frases como “Solo enseñamos hechos” y coreando “DeSantis, no somos tontos, no te dejaremos dirigir nuestras escuelas”, al menos 100 estudiantes, profesores y otros marcharon alrededor del campus principal de la Universidad Internacional de la Florida (FIU) el jueves por la tarde para protestar contra la agenda educativa del gobernador Ron DeSantis.
En el último mes, DeSantis ha intensificado su lucha contra la llamada “izquierda progresista” en la educación superior en la Florida. Dijo que quiere retirar los fondos y eliminar los programas de diversidad, equidad e inclusión en los campus universitarios del estado. Ha exigido a las universidades que presenten información detallada sobre los servicios que prestan a las personas transexuales que buscan tratamiento de reafirmación de género. También reorganizó el liderazgo del New College of Florida, una pequeña universidad pública de Sarasota, y nombró presidente interino a Richard Corcoran, ex presidente de la Cámara de Representantes de la Florida, cuyo salario es de $699,000, casi $400,000 más que su predecesor.
En respuesta, los estudiantes en FIU y la Universidad de la Florida, la Universidad de la Florida Central, el New College of Florida y otras universidades se han movilizado, organizando paros y protestas. Algunos también viajarán a la capital del estado, Tallahassee, cuando comience el período de sesiones legislativas el 7 de marzo.
La oficina del gobernador no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios del Herald.
En New College, DeSantis instaló recientemente una nueva y controversial junta de gobierno. Dos de los seis nombrados por De Santis para la junta del New College son Christopher Rufo, que convirtió la teoría crítica de la raza en un grito de guerra conservador, y Matthew Spalding, profesor de Gobierno en el Hillsdale College, una pequeña universidad cristiana conservadora de Michigan.
DeSantis dijo que $15 millones del presupuesto se destinarán a reorganizar el New College y a financiar nuevos puestos en el profesorado.
¿Las juntas directivas bajo ataque?
Antes y después de su marcha de casi 45 minutos alrededor del campus de FIU, la multitud se reunió frente al Graham Center, una de las zonas más concurridas del campus. La Junta Directiva de FIU se reunió en el centro para una sesión ordinaria.
Kaily LaChappelle, uno de los organizadores de la protesta y presidente de FIU Pride Student Union —una organización que incluye todos los clubes relacionados con la comunidad LGBTQ en el campus y representa a unos 500 miembros— dijo que teme que DeSantis manipule al liderazgo de FIU como lo hizo en el New College. Los manifestantes eligieron el jueves debido a la reunión de la junta.
“Queríamos hacer visible nuestro movimiento”, dijo. “Estamos pidiendo a nuestra junta directiva y a las juntas directivas de las 12 universidades públicas que se opongan a DeSantis y se pongan del lado de los estudiantes, que defiendan la libertad académica, que defiendan los derechos de los transexuales, que defiendan los derechos de los queer. Tienen un deber con nuestros estudiantes. Sin mencionar que están dejando ganar a DeSantis si caen en sus tácticas de miedo”.
Dean Colson, presidente de la junta de FIU, entregó una declaración por correo electrónico a través de una portavoz de la universidad que, en parte, agradeció “a todos por todo su arduo trabajo durante estos tiempos interesantes”.
“Me gustaría decir que FIU ha estado y seguirá estando centrada en convertirse en un instituto público de investigación de primer nivel. Si recibimos nuevas directrices de la Junta de Gobernadores (BOG), responderemos igual que hicimos cuando se implantaron las métricas de rendimiento o igual que hicimos cuando se nos indicó que pusiéramos un énfasis renovado en la diversidad, equidad e inclusión (DEI) hace unos años”, dijo. “Si hemos cometido errores, los corregiremos. Si las prioridades del BOG han cambiado, reaccionaremos. Pero creo que hemos servido y seguiremos sirviendo a nuestra muy diversa comunidad de un modo que refleje lo mejor que puede ofrecer una educación superior pública”.
También añadió: “Las protestas pacíficas forman parte de los cimientos de la maravillosa democracia en la que vivimos. Es apropiado que estas protestas pacíficas tengan lugar en un campus universitario: los campus universitarios están diseñados para fomentar el libre intercambio de ideas”.
“No se trata de ‘adoctrinar’ ’‘
En su declaración, Colson dijo que “FIU no se dedica a ‘adoctrinar’ a sus estudiantes”.
Y aunque admitió que pudiera ser “difícil a veces”, consideró posible “proporcionar las protecciones que preocupan hoy a ciertos líderes sin comprometer la libertad académica que es la base de nuestras universidades”.
También dijo que FIU no proporciona tratamiento de reasignación sexual y no reveló ningún registro de salud del paciente al responder a la reciente solicitud del gobernador.
Besiki Kutateladze, profesor adjunto de Justicia Penal en FIU, dijo que asistió a la marcha porque se sentía responsable de sus alumnos. Con su esposo, Kutateladze está criando a tres niños que asisten a Pinecrest Elementary. También quería abogar por su aprendizaje en la educación básica.
“Estoy aquí para decir a estos niños que hay gente detrás de ellos que comparte sus puntos de vista, que no sataniza a los niños trans o la historia de los afroamericanos o los estudiantes inmigrantes”, dijo.
Kutateladze dijo que el estado perderá intelectuales que se trasladarán a otros lugares, en particular los de comunidades minoritarias debido a la retórica de DeSantis.
También le preocupa que las nuevas políticas disuadan a los estudiantes de asistir a las universidades públicas de la Florida.
‘No quiero ir a la escuela aquí’
Una de esas estudiantes desencantadas es Natalie Saladrigas, que estudiando en el Miami Dade College (MDC), pero planea terminar su licenciatura en otro lugar, probablemente Boston.
“Como alguien que está interesada en aprender sobre los sistemas de opresión y racismo... No quiero ir a la escuela aquí porque sé que gran parte de mi educación va a ser blanqueada o me la van a quitar por lo que está pasando en la Florida”, dijo. “No quiero estudiar aquí por eso”.
Saladrigas, de 20 años, fundó Queer Collective, el primer club LGBTQ en el campus de MDC Padrón y asistió a la protesta de FIU.
Dijo que quiere convertirse en una activista profesional y que quiere adquirir conocimientos fuera del estado y luego regresar a la Florida para abogar por todos los estudiantes.
Sin embargo, otros estudiantes siguen siendo más optimistas.
Natalia Sánchez, que está obteniendo una maestría en administración de educación superior en FIU, dijo que quiere enseñar después de graduarse y que las políticas del gobernador han sido “desalentadoras”.
Sánchez, hija de inmigrantes de El Salvador y estudiante universitaria de primera generación, obtuvo su licenciatura en Justicia Penal en FIU y le encantó. Si desaparece la financiación de la DEI, cree que FIU ya no acogerá tanto a estudiantes de diversos orígenes socioeconómicos y raciales.
Sánchez, de 21 años, protestó el jueves porque quiere proteger esa experiencia para futuros estudiantes como ella.
“Y viendo esta protesta, viendo a la gente ponerse de pie, tengo la esperanza de que la educación superior no será destruida”, dijo.