Un enfermero describe los estragos del ataque israelí a un convoy de ambulancias en Gaza

Foto de archivo de un grupo de palestinos viendo los daños tras un ataque israelí a un convoy de ambulancias a la entrada del hospital Shifa en Gaza

Por Nidal al-Mughrabi

GAZA, 6 nov (Reuters) - El enfermero palestino Abdelsalam Barakat estaba dentro de una ambulancia intentando transportar a pacientes con fracturas de cráneo y tórax fuera del norte de Gaza cuando sintió varias explosiones en distintos momentos.

"La ambulancia temblaba muchísimo", dijo refiriéndose a los aterradores ataques aéreos israelíes del viernes que cayeron a su alrededor y de quienes estaban a su cargo en el hospital Al Shifa. "Nos colocó entre la vida y la muerte, pero no podíamos hacer nada".

Uno de los ataques, de los muchos que ha sufrido la Franja de Gaza en el último mes, tuvo como objetivo una ambulancia que transportaba combatientes del grupo islamista militante Hamás, según Israel, que acusa a su enemigo de escudarse en las instalaciones médicas.

Sin embargo, el Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, el director del hospital y la Media Luna Roja palestina afirmaron que el convoy de cinco ambulancias estaba evacuando heridos al sur de Gaza, que supuestamente era más seguro, antes de cruzar la frontera con Egipto.

El primer ataque, en una rotonda a pocos minutos de salir del hospital, hirió a un paramédico y a un pasajero de una de las ambulancias, dijo Barakat.

El segundo, cerca de la puerta del hospital cuando el convoy regresaba tras haber abandonado el intento de ir al sur, alcanzó una ambulancia que iba delante de la suya, matando a un paramédico y a otras personas que se encontraban cerca, añadió.

Con los cuerpos tendidos en charcos de sangre, el vehículo de Barakat huyó del caos y se dirigió a la estación central de ambulancias, a unos 1,2 kilómetros de distancia, aunque otros impactos les sacudieron en el camino.

Finalmente, llevaron a los pacientes de vuelta a Al Shifa, ya sin evacuación cercana y en peor estado que antes.

El director del hospital, Mohammad Abu Selmeyah, dijo que 15 personas habían muerto y 60 habían resultado heridas en el ataque a las puertas del hospital.

El secretario general de la ONU y las organizaciones humanitarias que trabajan en Gaza condenaron el ataque. "Se trata de un nuevo mínimo en una corriente interminable de violencia desmedida", dijo Médicos Sin Fronteras.

Hamás ha invitado a la comunidad internacional a verificar las acusaciones israelíes de que usa hospitales.

Barakat volvió al trabajo el lunes, tratando a pacientes gravemente heridos sin electricidad y con escasos recursos.

"Hay una enorme falta de equipos médicos y de electricidad, y mucha humedad en el edificio", dijo, poco después de desinfectar la larga herida abdominal cosida de un hombre con lo que parecía una pequeña toallita antiséptica.

(Reporte de Nidal al-Mughrabi y Reuters TV; edición en español de Javier López de Lérida)