Emiten nuevo pronóstico para ‘hiperactiva’ temporada de huracanes en el Atlántico. ¿Cómo influyó Beryl?

Beryl se convirtió en un monstruo de categoría 5 arrasando zonas en el Caribe, México y EEUU y ello incidió, en parte, que aumentara un nuevo pronóstico para la “hiperactiva” temporada de huracanes en el Atlántico de 2024.

Ahora se pronostican 25 tormentas con nombre y 12 huracanes de los que seis serían de categoría mayor (3,4 y 5 en la escala Saffir-Simpson), según el pronóstico del equipo de meteorólogos del Departamento de Ciencia Atmosférica de la Universidad Estatal de Colorado (CSU).

En su pronostico de abril preveían 23 tormentas con nombre, 11 huracanes y de estos cinco de categoría mayor.

“Hemos aumentado nuestra previsión general ligeramente, debido en parte al huracán Beryl”, se indicó en el pronóstico y agregó “el huracán Beryl, un huracán tropical intenso de categoría 5, también es un probable presagio de una temporada hiperactiva”.

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Explicaron que aunque la actividad de tormentas a principios de temporada en el Atlántico occidental suele tener poca relación con la actividad general de toda la cuenca, la actividad de huracanes tropicales intensos en el Atlántico tropical y el Caribe oriental, como se observó con Beryl, es a “menudo asociado con temporadas hiperactivas”.

Los nuevos números de tormentas y huracanes incluyen a las tormentas Alberto y Chris y al huracán Beryl.

Los factores para una extremadamente activa temporada son las altas temperaturas casi récord de las aguas del Atlántico y el Caribe y la ausencia de una fuerte cizalladura del viento que ayude a moderar el desarrollo de los huracanes, precisaron los expertos.

Esas temperaturas proporcionan un ambiente dinámico y termodinámico propicio para la formación de huracanes y su intensificación, indicaron.

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Las temperaturas superficiales en el Atlántico tropical y el Caribe son mucho más cálidas que lo normal, con temperaturas promedio en toda la región de desarrollo principal de sistemas tropicales en 1°C por encima del promedio de 1991-2020.

El fenómeno de La Niña también incide en la temporada.

“Una de las razones por las que CSU pronostica una temporada muy activa de huracanes en el Atlántico es el importante potencial para el desarrollo del fenómeno de La Niña que normalmente aumenta la actividad de los huracanes en el Atlántico a través de disminuciones en la cizalladura vertical del viento en el Caribe y el Atlántico tropical”, explicó Philip Klotzbach, líder del equipo de meteorología de CSU.

En cuanto a tocar tierra, CSU sigue anticipando una “probabilidad muy superior a la media de que huracanes importantes lleguen a tierra a lo largo de la costa continental de Estados Unidos y en el Caribe”.

Pero la proyección de que toquen tierra en Estados Unidos ha disminuido ligeramente de 62% a 57%, para la costa incluyendo Florida bajó de 34% a 31%.

La oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) pronosticó una temporada de huracanes superior a la normal con entre 17 y 25 tormentas, de 8 a 13 huracanes y estos 4 a 7 serían de categoría mayor con vientos superiores a 111 mph.

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