Elecciones: Bolivia se encamina a un duelo polarizado entre el delfín de Evo y el expresidente Mesa

LA PAZ.- Bolivia avanza hacia un polarizado duelo electoral el próximo 18 de octubre entre el candidato izquierdista Luis Arce, delfín de Evo Morales , y el expresidente Carlos Mesa, luego de que la mandataria derechista, Jeanine Áñez , abandonara ayer la contienda.

Una encuesta difundida esta semana por la fundación católica Jubileo, con el apoyo de una red de universidades públicas y privadas, que daba a Áñez apenas un 7% de intención de voto en el escenario de una oposición al Movimiento al Socialismo (MAS) diseminada en varios partidos, precipitó la salida de la presidenta de la carrera electoral, para impedir la victoria de Arce (29,2%).

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La mandataria explicó que decidió retirar su postulación "ante el riesgo de que se divida el voto democrático entre varios candidatos y que a consecuencia de esa división el MAS acabe ganando la elección".

Sin embargo, el candidato del MAS minimizó hoy el efecto que pueda tener en los comicios el retiro de la candidatura de la presidenta.

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"Nos tiene sin ninguna motivación y sin ningún cuidado" la retirada de Áñez, dijo Arce. "Estamos simplemente trabajando con lo nuestro", dijo el ministro de Economía durante los 14 años de gobierno de Evo (2006-2019).

Áñez asumió el mando en noviembre de 2019, tras la renuncia de Evo por una fuerte convulsión social, luego de unos cuestionados comicios.

Al asumir prometió encabezar un gobierno de transición con el único fin de garantizar nuevas elecciones en 2020, pero en enero anunció su postulación.

Por ello su decisión de lanzarse a la carrera electoral en busca de un mandato de cinco años fue muy criticada por sus adversarios y algunos aliados.

Desde entonces se complicó su gestión de gobierno, incluido el manejo de la pandemia del coronavirus y fue blanco de acusaciones de que usaba fondos públicos para financiar su campaña.

Arce encabeza la intención de voto con el 29,2%, según Jubileo. Le sigue Mesa, con 19%, y más atrás el derechista líder cívico regional Luis Fernando Camacho, con 10,4%. Áñez tenía apenas 7%.

La Constitución estipula que un candidato gana en primera vuelta si obtiene el 50% más un voto, o alcanza al menos el 40% con diez puntos de distancia sobre el segundo.

Si no se da alguno de estos casos, el 29 de noviembre habrá una segunda vuelta entre los dos postulantes con más votos.

Bolivia "va a llegar a una elección ante un escenario polarizado entre Luis Arce y Carlos Mesa", indica la académica y politóloga María Teresa Zegada.

"Lo que nos muestran estas encuestas es que estas elecciones serán de final abierto, que se van a definir posiblemente el mismo día de la elección", explica por su parte Daniel Valverde, profesor de ciencias políticas y derecho de la estatal Universidad Gabriel René Moreno.

Las elecciones presidenciales y legislativas de este año, que fueron postergadas tres veces por la pandemia, reemplazan a los comicios de octubre de 2019, que derivaron en protestas que condujeron a la renuncia del líder cocalero y que luego fueron anulados.

En esa votación, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), acusado de estar al servicio de Evo, lo declaró vencedor en primera vuelta para un cuarto mandato consecutivo (2020-2025).

Pero su triunfo generó denuncias de fraude y una ola de protestas que condujo a su dimisión 20 días después. Evo se asiló en México y luego en la Argentina, y fue reemplazado por la derechista Áñez, quien era senadora.

Las protestas, antes y después de su renuncia, dejaron al menos 35 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).

Los analistas advierten que los comicios no terminarán con las divisiones ni resolverán los problemas del país andino.

"Ese es el riesgo más grande en este momento electoral", afirma Zegada sobre la polarización y los hechos de violencia registrados a fines de 2019, cuando el país parecía al borde de una guerra civil.

Valverde destaca además que en Bolivia "hay dos bloques" y que gane Arce o Mesa, seguramente sus adversarios no aceptarán los resultados de las urnas.

"Gane el MAS o no gane el MAS, gane Mesa o no" continuarán los conflictos políticos, agrega el académico.

Agencia AFP