El músico que sacó a 200 hombres del Ku Klux Klan

Además de músico de blues y de haber trabajado con Chuck Berry y Jerry Lee Lewis, Daryl Davis ha tenido un empeño mucho más grande y peligroso.

Daryl Davis. Foto tomada de su página de Facebook
Daryl Davis. Foto tomada de su página de Facebook

Este hombre corpulento de 58 años lleva muchos años “en la carretera”, de ciudad en ciudad, hablando con mucha gente, haciéndose de muchos amigos y, entre estos, demostrándole a no pocos de los supremacistas blancos qué hay en realidad debajo de su piel negra.

De acuerdo con sus propias palabras, tan fuerte ha sido la relación entre él y quienes lo ven como un enemigo, que a estas alturas ya ha convencido a cerca de 200 extremistas para que abandonen las filas secretas y las teorías racistas del KKK.

Foto tomada de la página de Facebook: Accidental Courtesy: Daryl Davis, Race & America - 2016
Foto tomada de la página de Facebook: Accidental Courtesy: Daryl Davis, Race & America – 2016

Como premio a su actitud, algunos de estos disidentes le han regalado a Davis los atuendos, túnicas y capuchas con los que participaban en sus ceremonias nocturnas alrededor de una cruz en llamas.

Foto tomada de la página de Facebook de Daryl Davis
Foto tomada de la página de Facebook de Daryl Davis

“Nunca me propuse sacar a nadie del Klan -asegura este músico en el diario The Independent-; más bien hice que respondieran a mi pregunta ‘¿Cómo puedes odiarme cuando ni siquiera me conoces?’”

“Simplemente les di una oportunidad de conocerme y los traté de la manera que quiero que me traten -prosigue-, Ellos llegaron a su propia conclusión de que esta ideología ya no es para ellos”.

Ahora su experiencia y sus 200 ‘conversiones’ son relatadas en su libro Klan-destine Relationships: A Black’s Man Odyssey in the Ku Klux Klan (Relaciones Klan-destinas: la odisea de un hombre negro en el Ku Klux Klan).

El relato de su trayectoria también aparece en el reciente documental “Accidental Courtesy”, que será difundido en enero próximo.

“Algunos simplemente quieren lastimarme -relata Davis para The Daily Mail-. Hubo incidentes en los cuales fui amenazado y tuve que pelear un par de veces. Afortunadamente gané en ambas”.

Sin embargo, los esfuerzos de Davis han generado cierta polémica. Algunos de los activistas de Black Lives Matter han cuestionado su decisión de entablar relaciones de amistad con los supremacistas blancos.

“Había un miembro de una rama de NAACP (National Association for the Advancement of Colored People) que me dijo ‘hemos trabajado duro para conseguir avanzar diez pasos hacia delante, mientras tú cenas con el enemigo y das veinte pasos atrás’; entonces saco las vestimentas y las capuchas y le digo ‘mira, esto es lo que he hecho para ponerle freno al racismo. Tengo en mi armario ropas y capuchas de personas que han renunciado al KKK después de nuestras conversaciones mientras cenamos. ¿Cuántas ropas y capuchas has recogido tú?’”.