Grupo de Puebla rechaza "golpe de Estado" en Bolivia y se solidariza con Evo

Buenos Aires, 10 nov (EFE).- El Grupo de Puebla, foro de líderes progresistas latinoamericanos que se reunió este fin de semana en Buenos Aires, rechazó este domingo lo que consideraron un "golpe de Estado" en Bolivia y se solidarizaron con Evo Morales, de quien dijeron que su renuncia a la Presidencia fue forzada.

"Fuerzas de la oposición desencadenaron movilizaciones políticas acompañadas de actos de violencia (...), para llevar a cabo un golpe de Estado y forzar la renuncia del presidente Evo Morales y su vicepresidente Álvaro García-Linera, legal y democráticamente elegidos", indicaron en un comunicado horas después su encuentro en Buenos Aires.

Lamentaron que "una vez más, la constitución y el Estado de derecho de Bolivia fueron violados interrumpiendo un mandato constitucional" y denunciaron "humillación de autoridades, invasión, saqueo y quema de casas, secuestro y amenazas de familiares" en el país andino contra el Gobierno de Morales.

El foro progresista expresó su "solidaridad con el pueblo boliviano" y con Morales y elogió su figura como un impulsor de "políticas públicas de inclusión social, reducción de la pobreza y la desigualdad y de participación ciudadana".

Asimismo, exigió a los organismos internacionales de derechos humanos que garanticen "el esclarecimiento de los actos de violencia cometidos, el juicio y castigo a los responsables y el restablecimiento del orden, la paz, la convivencia social y la democracia en Bolivia".

En la tarde del domingo, el Grupo de Puebla finalizó la segunda reunión desde su creación y, en rueda de prensa, uno de sus miembros, el exministro de Educación brasileño Aloizio Mercadante, afirmó que seguían la situación en Bolivia.

Mercadante se mostró, como sus colegas, a favor de la repetición electoral que había recomendado la Organización de Estados Americanos (OEA), que detectó irregularidades graves en el cómputo de votos, y había aceptado Morales, pero los principales líderes opositores, como Carlos Mesa, no estaban de acuerdo con que el líder indígena se pudiera presentar a esos nuevos comicios.

Poco después de la clausura de la reunión, Morales anunció su renuncia en medio de las violentas protestas del país que se produjeron desde el 20 de octubre por el supuesto fraude electoral.

"Todas las iniciativas de diálogo y negociación ofrecidas por el Gobierno del presidente Evo Morales fueron rechazadas", dijeron desde el Grupo de Puebla.

En el comunicado se destaca que Morales había accedido a la renovación de los órganos electorales y "la posibilidad de contar con nuevas candidaturas".

"Pero la oposición optó por la intransigencia, la radicalización y la ruptura democrática, abriendo un grave antecedente de un nuevo golpe de Estado en la larga historia de interrupciones democráticas en el país", aseveraron.

Con el lema "El cambio es el progresismo", un hotel del centro de la capital argentina acogió durante el sábado y el domingo un encuentro que llegaba precedido del realizado en julio pasado en la ciudad mexicana de Puebla, en el que quedó constituido el grupo como "espacio de reflexión y de intercambio político en Latinoamérica".

En la cita del Grupo de Puebla en Argentina también participaron el presidente electo argentino, Alberto Fernández, los expresidentes de Panamá, Martín Torrijos; de Paraguay, Fernando Lugo; el excanciller de Brasil Celso Amorim; uno de los fundadores del Partido de los Trabajadores brasileño, Aloizio Mercadante; el excandidato presidencial chileno, Marco Antonio Enríquez-Ominami y su padre, el exministro de Economía y exsenador, Carlos Ominami, entre otros.

(c) Agencia EFE