Peña Nieto y su último golpe a México con el yerno de Trump

A menos de 5 días de que termine el sexenio de Enrique Peña Nieto como presidente de México, su administración decidió cerrar con broche de oro, con los bajos estándares a los que ya nos había acostumbrado, anunciando que el máximo reconocimiento que el país otorga a un extranjero, la Orden Mexicana del Águila Azteca, será para Jared Kushner, asesor senior de la Casa Blanca, mejor conocido como el yerno del presidente de EEUU, Donald Trump.

A estas alturas al gobierno de Peña Nieto le viene muy bien la frase acuñada por Dewey Wilkerson, el personaje de la serie de TV ‘Malcolm el de en medio’, cuando le dice a su familia “Nunca espero nada de ustedes y aún así logran decepcionarme”, una imagen que ahora es bien conocida por un meme que circula cada que la ocasión lo amerita.

No es que la decisión sobre el Águila Azteca haya estado libre de polémica en años anteriores, pero esta acción del gobierno saliente emula a la familia que se muda de una casa, desalojada por no pagar la renta y que de puro coraje pinta las paredes como último recurso de un berrinche.

¿Por qué otorgarle esa distinción al yerno del presidente que llegó al poder con un discurso donde a los mexicanos (porque para él, del Río Bravo para abajo todos somos mexicanos) nos tachó de violentos, violadores, criminales y lo que se acumuló esta semana?

La versión oficial, la de la Secretaría de Relaciones Exteriores, es por las “significativas contribuciones” del señor Kushner para lograr la negociación del nuevo Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).

“La participación del Sr. Kushner fue determinante para dar inicio al proceso de renegociación del TLCAN, evitando una salida unilateral de Estados Unidos de dicho tratado, y su constante y eficaz involucramiento fue clave para lograr un cierre exitoso de las negociaciones”, señala la dependencia en un comunicado.

Lo que no se sabe es porque una distinción similar no se le dio nunca a Peña Nieto o Luis Videgaray en sentido inverso, es decir, por parte del gobierno de Trump, pues no hay que olvidar que con su invitación a Los Pinos apuntalaron su candidatura presidencial sin lograr que le bajara rayitas a su demanda de construir un muro en la frontera, que como recientemente vimos en Tijuana, ya existe y funciona muy bien.

Esa máxima distinción mexicana que se le ha otorgado a personajes como Walt Disney, los reyes de España e Inglaterra, al Nobel Mario Vargas Llosa, Nelson Mandela, Plácido Domingo, Bill Gates y muchos más; esta vez estará en manos del único personaje que sabían que a los mexicanos les causaría escozor. Y no les importó, como casi en todo lo que hicieron durante seis años. Y no son pocos los que opinan así.

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