En duro golpe al caso de hackeo de computadora de modelo de OnlyFans, jueza desestima evidencia del estado

Una jueza de Miami-Dade desestimó el miércoles evidencia clave en un caso de hackeo de computadora contra la modelo de OnlyFans y acusada de homicidio Courtney Clenney y sus padres, al fallar que los fiscales habían infringido un principio legal establecido al obtenerla.

En un duro golpe al caso del estado, la jueza del Tribunal de Circuito Laura Shearon Cruz escribió en una opinión de dos párrafos que el Estado infringió el privilegio abogado-cliente cuando los fiscales recolectaron textos y correos electrónicos entre Deborah Lyn Clenney y Kim DeWayne Clenney y sus abogados, aunque los fiscales no eran conscientes en ese momento de que los padres de la modelo habían contratado representación legal.

“El remedio adecuado para esta infracción del privilegio es la exclusión de la comunicación para su uso en este caso como evidencia”, escribió Shearon Cruz.

Al aceptar la moción de excluir la evidencia, la jueza se puso de parte de una de las dos peticiones de los Clenney y sus abogados. El caso no fue desestimado, como pedían los demandados. La jueza dijo que entraría en más detalles sobre su decisión durante una audiencia el viernes.

Los fiscales estatales Kathleen Hoague y Khalil Quinan abandonaron la sala rápidamente y sin hacer comentarios tras el fallo. No estuvo claro de inmediato si la orden de la jueza era un golpe fatal para el caso, o si el estado tenía la intención de retirar los cargos en los próximos días. Jude Faccidomo, que representa a los Clenney, exhortó al estado a hacerlo lo antes posible.

“Es un principio básico de privacidad que el estado nunca debería haber violado. Entraron en el campo de la defensa”, dijo Faccidomo. “Todo eso mancha su acusación. Apuntaron a nuestros clientes Kim y Deborah, sin ninguna razón”.

No está claro si la decisión del miércoles afectará el sensacional juicio por homicidio que ha acaparado la atención internacional. Clenney —una modelo de OnlyFans que llegó a tener más de dos millones de seguidores— ha estado en la cárcel desde agosto de 2022, acusada de matar a puñaladas a su novio Christian Obumseli en un momento de ira en su condominio de Miami frente a la bahía.

Los cargos de hackeo, sin embargo, fueron un giro inesperado en un caso que ha dado varios giros en los últimos dos años. Sin apenas avisar, las fuerzas del orden irrumpieron en enero en la casa de Kim y Deborah en Austin, Texas, después que un juez firmó una orden que daba acceso a las fuerzas del orden a las cuentas de iCloud que almacenaban las comunicaciones entre los Clenney y sus abogados, Frank Prieto y Sabrina Puglisi.

Los investigadores estaban frustrados porque los Clenney tenían lo que creían que era la laptop personal de Obumseli. Las órdenes de arresto dicen que, una vez obtenido el acceso a las cuentas de iCloud, los investigadores descubrieron más de 4,000 mensajes, incluidas conversaciones entre Clenney, sus padres y Prieto y Puglisi.

El principal tema de conversación entre los acusados y sus abogados fue cómo desbloquear la computadora de Obumseli, lo que finalmente consiguieron. Se desconoce si el estado tuvo acceso a información en la computadora de Obumseli o si se encontró algo que pueda o vaya a ser usado durante el juicio por homicidio de Courtney Clenney.

Kim, Deborah y Courtney Clenney fueron acusadas de un único cargo de acceso ilegal a la computadora de Obumseli.

Después que los Clenney presentaron la moción para suprimir la evidencia, el estado argumentó que no podían haber violado el privilegio abogado-cliente porque los padres de Courtney Clenney no habían sido acusados de un delito y aún no habían contratado representación legal. Prieto y Puglisi dijeron lo contrario, argumentando que habían sido contratados para representar a Kim y Deborah Clenney desde el arresto de su hija en agosto de 2022.

Caso de alto perfil

Clenney, quien ahora tiene 30 años, fue acusada de asesinato en segundo grado por la muerte a puñaladas de Obumseli tras una acalorada discusión en su apartamento frente a la bahía en abril de 2022. La noticia de las disputas domésticas entre la joven pareja de trotamundos —él era comerciante de criptomonedas, ella popular influencer en las redes sociales— llevó la historia a los titulares internacionales. Ella fue arrestada dos meses después y extraditada a Miami desde Hawai.

La fricción entre los fiscales y los abogados defensores fue casi inmediata. Prieto colaboró con Court TV en un reportaje sobre su cliente. Cuando la fiscalía no estuvo de acuerdo con eso e informó al juez, los abogados defensores pasaron al ataque, acusando al estado de filtrar información a reporteros. Las partes lidiaron con la idea de una orden de silencio, que nunca fue abordada formalmente por el tribunal.

¿Falta de ética de la acusación?

Con el fallo del miércoles de la jueza Shearon Cruz, algunos abogados defensores sugirieron que se trataba de otro caso de fiscales de la Fiscalía Estatal de Miami-Dade dispuestos a sobrepasar los límites para ganar un caso. Faccidomo quiere que el caso de hackeo sea abandonado por completo, refiriéndose a él en una moción como una persecución vengativa por parte de Quinan.

A principios de este año, la jueza Andrea Wolfson del Tribunal de Circuito de Miami-Dade, se indignó lo suficiente con las tácticas de los fiscales Michael Von Zamft y Stephen Mitchell durante la nueva sentencia en el juicio por homicidio del gangster convicto Corey Smith, como para ordenar que fueran apartados del caso. A la jueza le molestó especialmente una llamada telefónica en la cárcel entre Von Zamft y un soplón convicto y la defensa que Mitchell hizo de Von Zamft.

Su destitución provocó, en parte, una reunión entre la Asociación de Abogados Penalistas Defensores de la Florida y la Fiscal Estatal Katherine Fernández Rundle, en la que los abogados defensores se refirieron a la “cultura tóxica” de la oficina y a su actitud de “ganar a toda costa”. Pidieron reformas, incluida una revisión independiente de los casos y más supervisión.

Prieto, tras el fallo de la jueza el miércoles, dijo que su cliente Courtney Clenney simplemente actuó en defensa propia cuando apuñaló mortalmente a su novio con el que llevaba dos años. Pidió la destitución de los fiscales y dijo que otra fiscalía debería llevar el caso.

“Deberían recusarse”, dijo.