Donald Trump descalifica a sus oponentes republicanos en mitin en Hialeah

El favorito en las primarias presidenciales republicanas no se presentó en el escenario del debate celebrado el miércoles en el downtown de Miami.

“Nadie está hablando de esto. Todos nos están mirando”, dijo el ex presidente Donald Trump en el escenario de Hialeah, una ciudad de clase trabajadora al otro lado del condado donde continuó reivindicando su candidatura en medio de fervientes vítores de sus partidarios durante un mitin en el Milander Park.

Hizo un guiño desdeñoso a los otros candidatos del Partido Republicano con una crítica al gobernador Ron DeSantis, que ganó a lo grande en su reelección como gobernador en 2022. Pero Trump se centró en el marcador.

“Recuerden que obtuvimos 1.2 millones de votos más que Ron DeSanctimonious”, dijo Trump, usando su típico apodo para el gobernador mientras prometía ganar la Florida una vez más. La cifra de Trump es unos 100,000 votantes mayor que los cálculos que ha usado antes.

En lugar de enfrentar a un campo republicano que está muy por detrás de él en las encuestas, Trump arrasó en un bastión MAGA donde fue recibido en un ambiente de carnaval en un campo de football rodeado de gradas, camiones de comida y vendedores ambulantes de recuerdos de Trump. En esta franja de Miami-Dade, Trump obtuvo fuertes resultados en las elecciones de 2020 y sigue teniendo un amplio atractivo para la comunidad mayoritariamente cubanoamericana de Hialeah.

Aunque el gobernador Ron DeSantis es admirado aquí, Trump es adorado.

“Nos sentimos muy humildes de que haya elegido Hialeah para hacer este mitin, porque Hialeah ama a Donald Trump”, dijo el alcalde de Hialeah, Esteban Bovo, unas dos horas antes que Trump subiera al escenario.

Trump jugó con su público, reprendiendo a la administración del presidente Joe Biden por su política hacia Cuba.

“Joe Biden y los demócratas de izquierda radical están convirtiendo a Estados Unidos en la Cuba comunista”, dijo Trump, sin citar ningún detalle específico.

Cuando no estaba abordando muchos de sus temas de conversación habituales –falsas afirmaciones de fraude electoral en las elecciones de 2020, ataques a los medios y afirmaciones de que los encausamientos penales contra él son persecuciones políticas– se comprometió a cancelar los visados de estudiante de todos los “simpatizantes de Hamas” en los campus universitarios, prometió evitar una tercera guerra mundial y dijo que construiría un escudo antimisiles para Estados Unidos.

Trump se quejó de ser víctima de ataques de motivación política por parte del sistema judicial pocos días después de que The Washington Post informara que el ex presidente y sus aliados están conspirando para ejercer control sobre el Departamento de Justicia y vengarse de ex funcionarios de la administración.

Trump también recibió un reconocimiento local cuando Bovo reveló su plan de nombrar una calle en Hialeah “President Donald J. Trump Avenue”. Cerca del escenario, un marcador del Ted Hendricks Stadium mostraba los números 45, 2024 y 47; Trump fue el 45º presidente, y si es elegido el próximo año, Trump sería el 47º presidente de Estados Unidos.

Subió al escenario dos días después de sentarse en el banquillo de testigos de un tribunal de Nueva York para responder a las preguntas de una demanda civil que lo acusa de inflar valores inmobiliarios en su beneficio. Allí, un juez frustrado pidió a los abogados de Trump que le impidieran divagar en sus respuestas.

El miércoles, Trump tuvo libertad para dejar fluir su sinuosa oratoria, incluyendo inusuales tangentes y algunos momentos incómodos.

Defendió a las personas mayores de 80 años, incluido Biden, señalando que un amigo suyo hizo fortuna entre los 80 y los 90 años. En sus comentarios sobre las instituciones mentales, mencionó al azar a Hannibal Lecter, personaje principal caníbal de la novela y película “The Silence of the Lambs”. Se quejó de los malos anuncios de televisión que emitían las cadenas de medios de “noticias falsas”.

En un momento dado, agradeció públicamente a una serie de políticos de Miami-Dade por su apoyo y dio las gracias al representante federal Carlos Giménez, ex alcalde del Condado Miami-Dade, por su respaldo. La mención provocó abucheos del público,

“Oh, ¿no les gusta Carlos?”, preguntó Trump. “Vamos, Carlos, tienes que aclarar eso. De verdad. Vaya”.

El momento reflejó los abucheos lanzados contra Giménez en 2020 cuando un mitin de Trump infringió las normas de distanciamiento social y de mascarillas del condado por el COVID-19 y se prolongó más allá del toque de queda de medianoche que Giménez había ordenado.

También apuntó contra las elecciones que permiten a los votantes emitir votos por correo, un método ampliamente usado en Miami-Dade que a menudo tiene un papel importante en las elecciones locales, estatales y federales.

“Cuando hay votos por correo, hay elecciones corruptas”, dijo Trump, provocando poca reacción de la multitud. “Cualquiera que lo quiera, es corrupto. Y eso incluye a los republicanos, por cierto”.

El martes, en las elecciones generales de la ciudad de Miami para tres escaños de la comisión se emitieron más de 8,900 votos por correo, o más de la mitad de la participación electoral. En Hialeah, más de 5,300 personas votaron en las elecciones municipales por correo, o más de 60% del total de votos emitidos.

Fanáticos de Trump

Los partidarios de Trump se reunieron a primera hora del miércoles frente al Ted Hendricks Stadium para hacer fila y conseguir un buen asiento y, esencialmente, reunirse antes del mitin. Estallaban esporádicos cánticos de “Trump”, los aficionados ondeaban banderas gigantes con el lema “Save America” y vestían camisetas con la leyenda “SuperTrump” con una capa como la de un superhéroe de cómic.

Muchos expresaron su inquebrantable adoración por el 45to presidente. Aunque enfrenta 91 cargos penales en cuatro encausamientos, entre los fieles, Trump es víctima de una persecución política orquestada por instituciones gubernamentales en las que no se puede confiar.

“Están malgastando el dinero de todos los contribuyentes en juicios sin sentido”, dijo Nidia Law, una peluquera que condujo desde Naples para asistir a la manifestación. Dijo que gran parte de la cobertura mediática de Trump está contaminada. Otros asistentes al mitin preguntaron a los reporteros si eran “noticias falsas” o “noticias reales” mientras entraban en el recinto.

La fanfarronería del ex presidente resonó entre sus partidarios.

“Si Trump lidera todas las encuestas, ¿para qué necesita ir a un debate?”, preguntó Santiago Torrán Barnet, que llegó a Estados Unidos desde Cuba hace 23 años. Vestido como un mambí, un combatiente cubano del siglo XIX por la independencia de España, este hombre de 61 años dijo que Trump “es la única opción para Estados Unidos”.

“Hay una frase en español ‘lo que se sabe no se pregunta’”, dijo. “No tiene ningún sentido que Trump participe en ningún debate. Va a ganar”.

Algunos incondicionales viajaron lejos para asistir al acto. Micki Larson-Olson, de 54 años, llegó a Hialeah desde Abilene, Texas. La veterana retirada de la Fuerza Aérea estaba en el Capitolio de Estados Unidos durante la insurrección del 6 de enero de 2021, y fue encarcelada 180 días por allanamiento.

“Pagué mi deuda con la sociedad, pero esperaré un gran reembolso cuando se sepa la verdad”, dijo. “Me negué a bajar de la escalinata del Capitolio porque estaba luchando por el pueblo estadounidense”.

Dijo que cree que Trump no necesita asistir a ningún debate republicano porque el Partido Republicano no le ayudó a demostrar que le robaron las elecciones.

“Trump está aquí para nosotros. Tenemos que estar aquí para él, dijo. “Hoy mostrará su fuerza. ¿Cuánta gente estaría viendo ese debate?”.