Divina comida: la frustrada historia de amor entre Floppy Tesouro y Grego Rosello

Durante toda la semana de Divina comida, Grego Rosello dedicó buena parte del tiempo a intentar seducir a Floppy Tesouro. Si bien ella volvió con su marido después de cuatro meses de separación, y él está comenzando una nueva relación, cada tema, cada situación y cada contingencia fue aprovechada por el standapero para intentar acercarse a la modelo.

El juego del "amigo invisible", que propuso Coco Sily la primera jornada y que se develó recién este viernes, también le sumó a Grego en su camino a la conquista. Quiso la suerte que le tocara Floppy y por eso apostó de lleno a un enorme buda, figura que Tesouro adora.

Pero, ¿fue en esta semana de reality el momento en que se despertaron en el humorista sentimientos especiales hacia su compañera? Aunque todos en el grupo creían que sí, una charla en la casa de Boy Olmi demostró otra cosa. A pesar de que en jornadas anteriores, Grego se había lamentado por no haber contactado a la modelo durante sus meses de soltería ("No se puede creer cómo dormí", llegó a decir), esto no fue realmente cierto. Y Floppy se encargó de contar la verdad.

"Me acabo de acordar de algo, Grego, a ver si lo querés compartir en la mesa -lo apuró Floppy-. Porque no dijiste nada". Acorralado, Rosello decidió confesar: "A Floppy la tenía previamente agendada y no me acordaba. Cuando voy al chat veo que había un mensaje que le había mandado hace tiempo, a las 2:47 de la mañana que decía 'Hola' y la cara de un monito tapándose los ojos".

La modelo sumó datos a la historia. El mensaje en cuestión había sucedido luego de que se cruzaran en un boliche, donde Grego le había pedido el número con una excusa para nada creativa: "Yo estaba en mi mesa con mis amigas, y él pasaba una y otra vez. Le di el teléfono porque me vino a decir que tenía un laburo para ofrecerme".

Entre risas, Boy Olmi y Coco Sily coincidieron en la ineficacia del método. El segundo de ellos graficó: "De lo peor, de lo más bajo, eso y preguntarle si es 0 positivo para que le de sangre a un abuelo es más o menos lo mismo".

Frente a la desaprobación general, Rosello se defendió a duras penas: "Pónganse en mi lugar, yo estaba enamorado y medio copeteado. ¿Ustedes creían que en esos cuatro meses dormí?, no dormí: reboté bien rebotado".