Disidentes explican el apoyo de los rusos a la invasión: “Diez años atrás no hubieran apoyado la guerra con Ucrania”

El presidente ruso, Vladimir Putin, habla con miembros del Frente Popular y de los Movimientos Nacionales de Jóvenes Cadetes del Ejército después de asistir a una ceremonia en el monumento de la Catedral de San Basilio detrás de la Plaza Roja en Moscú, el viernes 11 de noviembre. 4, 2022. (Mikhail Metzel/Pool Photo via AP)

La información resulta difícil de comprender fuera de Rusia, pero las últimas encuestas independientes muestran que una mayoría de los rusos apoyan la “operación militar especial” en Ucrania. De visita en Buenos Aires el disidente ruso Pavel Andreyev, miembro de la Junta Directiva de la ONG rusa Memorial, ganadora del Premio Nobel de la Paz 2022 por su defensa de los derechos humanos, reconoció que la guerra tiene realmente apoyo mayoritario entre los rusos, “pero básicamente, la gente respalda lo que el gobierno decida, en una atmósfera de persecución y mucho miedo”.

Pavel Andreyev
Pavel Andreyev

Como parte de su ciclo “Diálogos con ganadores del Premio Nobel de la Paz”, la Unión Europea organizó una gira por la Argentina, Uruguay, Brasil y Chile de Andreyev junto a dos periodistas rusos opositores, Kirill Martynov, exeditor jefe adjunto del diario ruso Novaya Gazeta –cuyo editor en jefe Dmitry Muratov fue galardonado con el Nobel de la Paz 2021– y el analista político Konstantin Eggert.

En Buenos Aires, los visitantes tuvieron reuniones con académicos y autoridades, y hablaron con la prensa en la delegación local de la UE en Retiro.

Kirill Martynov
Kirill Martynov

Luego de las afirmaciones de Andreyev sobre el apoyo mayoritario que tiene la guerra, según las últimas encuestas, Martynov matizó: “Miles de rusos salieron a las calles a manifestarse en contra de la guerra en protestas que fueron reprimidas, pero nunca la gente salió a pedir ‘Ataquemos a Ucrania’. Diez años atrás hubiera sido impensable que los rusos apoyaran esta guerra. Pero eso cambió. El gobierno preparó todo esto y luego hicieron lo que quisieron”, denunció Martynov.

Para el periodista de Novaya Gazeta, “el Mundial de fútbol de 2018 marcó el último punto en que Rusia se mostró al mundo como un país normal, abierto a los extranjeros. Y luego en pocos años todo cambió”.

Martynov detalló cómo fue el proceso de transformación de la Federación. “Si uno mira para atrás, todo esto sirvió para destruir a la sociedad rusa y prepararla para la guerra”, afirmó.

Entre los hitos de esos cambios, el periodista mencionó varias medidas del gobierno de Vladimir Putin.

“En 2021 cambió la Constitución para ser presidente eterno y poder ser reelegido hasta 2036. Al mismo tiempo se lanzó en una campaña de destrucción de la oposición política con el asesinato o encarcelamiento de líderes, como Alexey Navalny. Además comenzó la catalogación de medios, actores y hasta docentes como ‘agentes extranjeros’. Basta que cualquier opinión o actividad sea considerada favorable a otro país, para entrar en esa categoría. En mi caso es obligatorio que cada una de la publicaciones que yo haga lleve un texto de 24 palabras que advierte que soy un ‘agente extranjero’. Puede resultar hasta gracioso, pero en el caso de los docentes implica la pérdida del trabajo. Esto implicó que se acallaran muchas opiniones independientes”, explicó Martynov.

El efecto de las sanciones

Pavel Andreyev profundizó también sobre el efecto económico del conflicto en la vida cotidiana de los rusos.

La guerra cambió todo. Se calcula que un millón de rusos emigraron del país, muchas familias quedaron separadas por los que se fueron y los que se quedaron. Pero la economía se ajustó, hubo algunas bajas en los salarios, y esto afectó especialmente en la clase media. Pero la mayoría de la población es pobre y no la afectó demasiado las sanciones”, reconoció Andreyev.

Konstantin Eggert
Konstantin Eggert

En ese sentido, Eggert agregó que “normalmente las sanciones funcionan más en el largo plazo, no es cuestión de uno o dos años. Además, el principal ingreso del régimen de Putin son el petróleo y el gas, y tres países que integran el grupo Brics -China, la India y Sudáfrica- aumentaron las compras a Rusia y le aliviaron a Putin el peso de las sanciones occidentales”.

El analista político hizo luego un recorrido por el historial de guerra y muerte que marcó al pueblo ruso en el último siglo, lo que limita el impacto emocional de la guerra con Ucrania en la población.

“Entre 10 y 17 millones de personas murieron durante la guerra civil rusa [1917-1923]. Luego hubo un número similar de muertes durante la hambruna. Stalin puso un mínimo de 5,5 millones de personas en los gulags, y 27 millones murieron en la Segunda Guerra Mundial. Estos son números gigantescos y la gente está acostumbrada a la violencia”, reconoció.

Respecto de las perspectivas de una rebelión de la sociedad rusa, Eggert concluyó: “A menos que el número de víctimas rusas se dispare enormemente, la gente no va a reaccionar, porque desgraciadamente somos una sociedad que nos hemos acostumbrado a esto”.