Dinamarca aprueba proyecto de ley para detener la quema del Corán

La pantalla del Parlamento danés, Folketinget, muestra el resultado tras la votación de una nueva ley contra el tratamiento inapropiado de escritos de importancia para las comunidades religiosas, en Copenhague

Por Louise Rasmussen

COPENHAGUE, 7 dic (Reuters) - El Parlamento de Dinamarca aprobó el jueves un proyecto de ley que hace ilegal quemar copias del Corán en lugares públicos, después de que las protestas en naciones musulmanas por la profanación del libro sagrado del Islam generaron preocupaciones sobre la seguridad en el país.

Dinamarca y Suecia fueron escenario de varias protestas públicas este año en las que activistas antiislámicos quemaron o dañaron copias del Corán, lo que provocó tensiones con los musulmanes y provocó demandas de que los gobiernos nórdicos prohibieran la práctica.

Dinamarca buscó lograr un equilibrio entre la libertad de expresión protegida constitucionalmente, incluido el derecho a criticar una religión, y la seguridad nacional, en medio del temor a que la quema del Corán desencadenara ataques de islamistas.

Los críticos internos en Suecia y Dinamarca han argumentado que cualquier limitación a la crítica religiosa, incluida la quema de coranes, socava las libertades liberales por las que tanto se ha luchado en la región.

"La historia nos juzgará duramente por esto, y con razón (...) Todo se reduce a si la restricción de la libertad de expresión la determinamos nosotros o si la dictaron desde fuera", afirmó Inger Stojberg, líder del partido antiinmigración Demócratas de Dinamarca, que se opuso a la prohibición.

El gobierno de coalición centrista de Dinamarca ha argumentado que las nuevas reglas tendrán sólo un impacto marginal en la libertad de expresión y que criticar la religión de otras maneras sigue siendo legal.

La infracción de la nueva ley se castigaría con multas o hasta dos años de prisión, señaló el gobierno.

Suecia también está considerando formas de limitar legalmente las profanaciones del Corán, pero está adoptando un enfoque diferente al de Dinamarca. Está investigando si la policía debería tener en cuenta la seguridad nacional al decidir sobre las solicitudes de protestas públicas.

(Reporte de Louise Breusch Rasmussen y Anna Ringstrom; editado en español por Carlos Serrano)