Se diluye la chance de una interna abierta entre Morales y Manes para definir el candidato a presidente de la UCR

Morales y Manes se vieron el martes
Morales y Manes se vieron el martes - Créditos: @UCR

Corría la tarde del martes, cuando en medio del caos de tránsito por el clima de éxtasis y efervescencia que atravesó las calles porteñas por la bienvenida que le brindaron millones de argentinos a los campeones del mundo, el médico Facundo Manes caminaba por el centro de la ciudad para reunirse con el jefe de la UCR, Gerardo Morales . La sede de la cumbre secreta que mantuvieron los dos referentes del radicalismo que aspiran a pelear por la presidencia en 2023 fue la Casa de Jujuy, ubicada en Santa Fe 967, a pocos metros de la avenida 9 de Julio, donde una marea humana aguardaba saludar al equipo liderado por Lionel Messi.

Después de los últimos cortocircuitos, Morales y Manes se juntaban con la intención de consensuar reglas de competencia con miras a los comicios del año próximo y discutir una estrategia unificada para enfrentar a Pro. El jujeño, sobre todo, aspiraba a pulir la idea de organizar una interna abierta para definir el candidato a presidente que subirá al ring el radicalismo en la contienda electoral de 2023. Ambos habían debatido esa posibilidad cuando se vieron hace unas tres semanas en Formosa, donde ungieron como postulante a gobernador de la UCR a Fernando Carbajal.

Allí, mientras tomaba cerveza en un encuentro con unos treinta dirigentes del radicalismo, Morales esbozó su plan de armar una interna abierta en marzo . En esa elección, justificó el jujeño, podrían participar aquellas personas que estén afiliadas a la UCR e independientes -quedarían excluidos los afiliados a otros partidos, como el Pro o PJ-, para decidir quién sería el candidato a presidente de los radicales para las PASO del año próximo. La iniciativa de Morales sorprendió a Manes, quien se mostró de acuerdo con definir un mecanismo y, ante todo, con la idea de que la UCR cierre filas para dirimir sus diferencias con el Pro en las primarias. Eso sí: puso como condición básica que haya consenso entre las distintas ramas internas del radicalismo.

“En Formosa, Facundo le dio la mano a Gerardo y le dijo: ‘hoy, estoy más de acuerdo con vos que con mi mujer’. Ahora cambiaron la conversación, pero había mucha gente”, braman cerca del jujeño. En la cúpula de la UCR apuntan contra los Manes por sus idas y venidas.

Gerardo Morales, Fernando Carbajal y Facundo Manes en Formosa
Gerardo Morales, Fernando Carbajal y Facundo Manes en Formosa

Con el correr de los días, la chance de que el centenario partido organice una competencia abierta perdió fuerza . El martes, Manes le expresó sus dudas a Morales. En particular, le manifestó que, después de haber sondeado a referentes nacionales de la UCR, comprobó que no había una posición unificada en torno a la iniciativa. En el equipo de Manes aseguran que ni Corrientes, que lidera Gustavo Valdés, ni Mendoza, donde mandan el gobernador Rodolfo Suarez y el senador Alfredo Cornejo, ni la Ciudad, con Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti como jerarcas, ni la provincia de Buenos Aires, comandada por Maximiliano Abad, avalaban la propuesta de Morales.

“Carece de sentido la idea si no hay consenso” , comentaron fuentes del círculo de confianza del neurólogo, quien definió que continuará adelante con su proyecto presidencial después del tembladeral que generaron en Juntos por el Cambio sus críticas a Mauricio Macri, a quien no solo acusó de haber hecho “populismo institucional”, sino que lo vinculó con el espionaje ilegal y los operadores judiciales.

Con todos los astros en contra

En el campamento de Manes argumentan que no se justificaría organizar una interna previa a las PASO si aún Juntos por el Cambio o la UCR no definieron la estrategia electoral. El esquema de competencia aún es una incógnita: ¿habrá fórmulas mixtas con el Pro o el radicalismo se encolumnará detrás de un solo binomio? Además, remarcan, hacer una interna abierta tendría un alto costo económico y sería un desafío logístico para las autoridades partidarias organizar una elección nacional en dos meses. A la vez, indican en la mesa chica del médico, la condición básica es que los radicales se comprometan apoyar en las PASO al candidato ganador. Un problema de legitimidad. “¿Qué pasa si el perdedor después quiere negociar una fórmula con el Pro? Además, nunca hubo un acuerdo con Morales porque Facundo todavía no anunció que es candidato a presidente”, apuntan cerca de Manes.

Horas después de que Manes y Morales se vieran a solas, los popes del radicalismo se reunieron en un sector privado de un bar porteño. Allí, el jujeño, Gastón Manes, principal estratega del médico, Lousteau, Ernesto Sanz, Mario Negri y Julio Cobos, entre otros, evaluaron la chance de la interna abierta. Tampoco hubo consenso. “La mayoría no estuvo de acuerdo”, indican en el entorno de Manes. Aún no hay fecha para la reunión de la Convención Nacional, pero en el partido especulan que será antes del cierre de listas. ¿La cúpula radical tendrá que ratificar una vez más su pertenencia a JxC?

Días antes de juntarse con Morales, el neurocientífico se vio con su consigliere en las sombras: Sanz. Manes y el co-fundador de Cambiemos cenaron el jueves pasado en Pizza Cero, sede habitual de las reuniones de rosca del larretismo.

En la cumbre del martes, Morales entendió los argumentos del médico. Según comentan allegados al jujeño, el titular del radicalismo abogó por consensuar un “método de trabajo” y una “estrategia común” de la UCR de cara a la disputa electoral de 2023.

Gerardo Morales, en La Plata, durante la asunción de autoridades de la junta local
Gerardo Morales, en La Plata, durante la asunción de autoridades de la junta local

La intención de Morales, quien recompuso su vínculo con Lousteau y tiene estrechos lazos con Larreta y Bullrich en el universo macrista, es fortalecer y darle musculatura al centenario partido para llegar con poder de fuego a junio, cuando se iniciará la instancia de definiciones electorales.

A sabiendas de que el Pro podría llegar a la elección con su oferta dividida, pero con dos candidatos competitivos, busca aglutinar a las distintas vertientes del radicalismo detrás de un postulante para no perder terreno en el tablero opositor. Manes coincide en ese punto. De hecho, está decidido a ser candidato a presidente y pulsear con el Pro bajo el paraguas de JxC con su propio manual: quiere surfear la grieta con un discurso de unidad nacional y generar un cambio desde abajo hacia arriba. Es más, sus asesores evalúan que la autoexclusión de Cristina Kirchner de la grilla de 2023 podría restarles posibilidades electorales a Mauricio Macri, líder de Pro.

Hasta hace unos meses, quienes lo frecuentaban percibían que el médico no descartaba una fractura de JxC ante una eventual fragmentación del sistema político por la crisis. Aún no tiene una fecha para un eventual lanzamiento: lo evaluará más cerca del cierre de listas, dicen quienes lo aconsejan.

“Fue una buena charla”, coinciden fuentes ligadas a Manes y cercanas a Morales tras la cumbre en la Casa de Jujuy. Ambos acordaron que continuarán por caminos separados: cada uno construirá su proyecto presidencial e intentará mejorar su posicionamiento. A principios del año próximo, buscarán una herramienta para decidir quién será el postulante de la UCR. “Aún no sabemos qué mecanismo vamos a usar”, apuntan allegados al médico.

En la reunión del martes también pactaron que intentarán montar una mesa política, en paralelo a los órganos partidarios, para llegar a consensos previos.

Ojo, Leo, que nos podés dejar sin elecciones

Por lo pronto, Morales planea lanzarse a mediados de febrero . El mes próximo -sería el 9 de enero- tiene previsto participar de una cumbre radical en Mar del Plata. Ayer, el comité nacional repasó los avances del diseño del plan de gobierno y políticas públicas con miras a 2023 que encabeza la Fundación Alem, think tank del radicalismo, nexo con el resto de las usinas de ideas de JxC, y oficializó la convocatoria a un encuentro programático en Córdoba.

Ayer, tras participar de la asunción de autoridades de la junta local de la UCR en La Plata celebró el fallo de la Corte que ratificó la condena a Milagro Sala, líder de la Tupac Amaru. “Los últimos fueron grandes días con Cristina condenada, la ratificación de la pena de Milagro Sala y para colmo, campeones del mundo”, exclamó.

Además, dijo que la UCR intenta imprimirle al perfil ideológico de JxC “una mirada productivista, que ponga de pie a las pymes y a las economías regionales”. “No somos retrógrados ni populistas. La transformación de la matriz productiva es el camino, reafirmar el campo, la energía y la minería. Hay que poner en marcha lo que el mundo demanda”, sostuvo.

Gerardo Morales, en La Plata
Gerardo Morales, en La Plata