Desconfianza y dudas de la oposición tras reabrir el diálogo con el Gobierno

"Hay que ver si esta foto después se da en los hechos", dijo el senador Luis Naidenoff (Juntos por el Cambio)

Escepticismo y desconfianza ante los mensajes de diálogo de un gobierno con fuertes disidencias internas podría ser el resumen que para los principales referentes legislativos de Juntos por el Cambio dejó la videoconferencia que sostuvieron ayer con el presidente Alberto Fernández y algunos de los líderes parlamentarios del oficialismo.

"Hay que ver si esta foto después se da en los hechos. Soy muy cauto, el tiempo dirá si la voluntad de diálogo es real", afirmó el jefe del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, Luis Naidenoff (UCR-Formosa), en diálogo con LA NACION una vez concluido el encuentro virtual.

La frase de Naidenoff no es ingenua. Es en el Senado donde el principal bloque opositor viene sufriendo el estilo de conducción de Cristina Kirchner y su decisión de violentar la decisión de limitar a temas relacionados con la pandemia que se incluyó en el protocolo de sesiones virtuales cuya aprobación fue impulsada por la propia vicepresidenta.

El tema de la tensión política en el Senado sobrevoló el encuentro, pero fue introducido por los referentes de la oposición de manera muy elíptica. "El primer paso para el diálogo es tener un funcionamiento armónico del Congreso, porque no puede haber esquemas diferentes en diputados y senadores", fue la fórmula que utilizó Naidenoff para introducir el tema.

Escoltado por Máximo Kirchner y con las autoridades del bloque de senadores kirchneristas, José Mayans (Formosa) y Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), participando de la videoconferencia, el Presidente no tomó el guante opositor.

Por el contrario, contraatacó quejándose por el duro comunicado contra el Gobierno que Juntos por el Cambio emitió pocas horas después de que se conociera la noticia del asesinato de Fabián Gutiérrez, exsecretario de Cristina Kirchner.

Según las fuentes consultadas por la nacion, en la reunión casi no se abordó ningún tema de los que inicialmente se habían incluido como parte de la convocatoria de la videoconferencia con la oposición.

En ese sentido, destacaron que no se habló del proyecto de moratoria que impulsa el Gobierno y que de la agenda pospandemia Fernández solo hizo mención a que enviará al Congreso una serie de proyectos, pero sin dar mayores precisiones.

"Fue una reunión muy light", opinó un veterano diputado de Juntos por el Cambio, que no terminaba de entender el motivo de la convocatoria.

La intervención de Cristina Kirchner

La única certeza que tenían en Juntos por el Cambio tras la entrevista es que consideraban un logro político que Fernández accediera a recibirlos por separado, luego de que en la noche del domingo la coalición opositora reclamara que se lo diferenciara de los otros bloques legislativos bajo amenaza de rechazar el convite presidencial.

Según pudo saber LA NACION de fuentes parlamentarias, la decisión de Fernández de ceder al pedido opositor generó malestar en el kirchnerismo. De hecho, la presencia de Mayans y Fernández Sagasti en la videoconferencia se concretó a pedido de la vicepresidenta.

No fue la única intervención de Cristina Kirchner en el armado del encuentro. Fue por su decisión que se excluyó de la videoconferencia al senador Juan Carlos Romero, peronista disidente que preside el denominado interbloque Federal.

"La presidenta del Senado no puede decidir en qué 'sector de la oposición' me ubica porque sabe perfectamente que fui elegido por Juntos por el Cambio. Pretende que participe de la reunión con bloques diversos y no junto a los bloques de la verdadera oposición", se quejó Romero ante la decisión de no invitarlo a la videoconferencia con el principal conglomerado opositor.