KIEV.– Hace tres semanas, cuando cayó la ciudad de Avdiivka, bastión oriental de Ucrania, Kiev y sus aliados temieron que Moscú ganara impulso y avanzara rápidamente hacia centros poblacionales y polos militares estratégicos.

Pero tras lograr varias victorias relámpago en los días posteriores, el embate ruso se estancó alrededor de tres pueblos aledaños. Los expertos militares lo atribuyen a varios factores, como el terreno, que no facilita las operaciones ofensivas, el agotamiento de las tropas rusas luego de meses de combate, y también al Ejército de Ucrania, que asignó una parte significativa de sus fuerzas para defender la zona.

De todos modos, la iniciativa en el campo de batalla la sigue teniendo Rusia, y los analistas militares dicen que sus fuerzas todavía pueden quebrar las líneas ucranianas en un futuro cercano, sobre todo porque los esfuerzos defensivos de Kiev son cada vez más limitados debido a la falta de un nuevo paquete de ayuda militar norteamericana.

Pero por ahora, dicen los analistas, el combate parece haber vuelto a esas batallas de ida y vuelta con final abierto que caracterizaron la guerra durante el año pasado.

“La captura de Avdiivka todavía no derivó en el colapso de las líneas ucranianas, como tampoco en la posibilidad de que los rusos se puedan mover en campo abierto ni que logren capturar localidades importantes”, dice Thibault Fouillet, vicedirector del Instituto de Estudios de Estrategia y de Defensa, un centro de investigación francés. “No hay ningún avance ni acción decisiva”.

La situación es diferente de lo que se esperaba a mediados de febrero tras la caída de Avdiivka. En ese momento, las fuerzas ucranianas se retiraron y Rusia avanzó rápidamente, en parte debido a la falta de posiciones defensivas fuertes en el bando ucraniano. Según mapas de código abierto del campo de batalla, las tropas rusas capturaron tres asentamientos y tomaron el control de más de 20 km2 de territorio.

Pero también según esos mapas en los últimos diez días, Moscú solo capturó poco más de dos kilómetros cuadrados, y sus soldados quedaron enredados en combates dentro y alrededor de los pueblos de Berdychi, Orlivka y Tonenke.

Grupos de asalto

Las fuerzas rusas “parecen intentar avanzar utilizando pequeños grupos de asalto de infantería, pero están siendo diezmadas al oeste de Avdiivka, un terreno que es relativamente abierto”, dice Pasi Paroinen, analista del Black Bird Group, una comunidad de código abierto con sede en Finlandia que analiza las imágenes satelitales y los contenidos del campo de batalla difundidos en las redes sociales.

Los recientes combates también tuvieron su costo para las fuerzas ucranianas, que parecen haber destinado algunas de sus mejores tropas y armas a los combates al oeste de Avdiivka.

Su 47ª brigada, que Estados Unidos entrenó y equipó el año pasado, defiende Berdychi. El ministro de Defensa ucraniano publicó un video donde se veía a la brigada usando un tanque Abrams fabricado por Estados Unidos, uno de sus blindados más avanzados.

Según Serhii Kuzan, presidente del Centro de Seguridad y Cooperación de Ucrania, un grupo de investigación no gubernamental, el Ejército ucraniano “está destinando todas las armas posibles” al combate fuera de Avdiivka.

Pero en las últimas dos semanas allí fueron destruidos o resultaron averiados tres tanques Abrams ucranianos, según datos de Oryx, un sitio web de análisis militar.

Las fuerzas ucranianas también sufrieron fuertes bajas durante los meses que pasaron resistiendo en Avdiivka. Pero el asalto a esa ciudad también causó graves bajas a las fuerzas rusas. La inteligencia militar británica dice que en febrero, cuando Moscú destinó gran cantidad de fuerzas al combate por Avdiivka, la cantidad diaria de muertos y heridos alcanzó un promedio de 983, “el índice más alto desde el comienzo de la guerra”.

Paroinen y Kuzan añaden que las condiciones del terreno benefician a las fuerzas ucranianas. Mientras que las tropas rusas atacan Berdychi, Orlivka y Tonenke a campo abierto y sin dónde cubrirse, las unidades ucranianas ocupan los terrenos altos de los pueblos y les resulta más fácil defenderse.

Nadie sabe cuáles serían los próximos pasos de las tropas rusas si logran capturar esos tres poblados, ya que el terreno luego es montañoso y con corrientes de agua y los bañados.

Según Kuzan, para sondear a las defensas ucranianas, el Ejército ruso está atacando múltiples lugares a lo largo de los mil kilómetros que componen toda la línea de frente. “Donde puedan avanzar, desplegarán reservas adicionales para apuntalar su conquista. La estrategia de los rusos es esa”, concluyó.

Constant Méheut

Traducción de Jaime Arrambide