Fórmula 1 en Las Vegas: del espectáculo a las pérdidas millonarias y a una amenaza de huelga

Las fuentes de Bellagio, sobre el boulevard Las Vegas Strip, parte del escenario del circuito que visitará el próximo fin de semana la Fórmula 1
Las fuentes de Bellagio, sobre el boulevard Las Vegas Strip, parte del escenario del circuito que visitará el próximo fin de semana la Fórmula 1 - Créditos: @X

En la aridez del desierto de Mojave, en el estado de Nevada, de repente y como si se tratara de un espejismo se levanta Las Vegas. La Capital del Entretenimiento Mundial, la Ciudad del Pecado y el Patio de Recreo de América, algunos de los nombres con la que se la conoce a la urbe que sobre el boulevard Strip ofrece los mejores hoteles, casinos, restaurantes y el icónico cartel de neón que desde 1959 distingue a la metrópoli. El 19 de noviembre, y después de 41 años, será nuevamente sede de un Gran Premio de Fórmula 1, el tercero en el historial. El espectáculo está garantizado, aunque la avalancha de shows apabulla a la fecha asignada para el Gran Circo y se convirtió en un gran festival con una carrera dentro del programa. El renovado atractivo para una ciudad que se agita con el turismo como ninguna en el planeta también esconde sus grises: el gasto de 435 millones de dólares para la gestación del circuito supera en US$ 35.000.000 al presupuesto original, mientras que un conflicto con los trabajadores de los hoteles amenaza con una huelga que no pone en riesgo la carrera, según los organizadores, aunque podría derivar en un caos que perjudicaría la imagen y la proyección que realizó Liberty Media, puntal para la nueva aventura en los Estados Unidos.

La esfera de 120 metros de alto y 157 metros de ancho, considerada la estructura metálica más grande del planeta, está cubierta por 1.200.000 pantallas LED del tamaño de un disco de hockey sobre hielo; el costo de la construcción fue de 2.300 millones de dólares y fue inaugurada con un recital de la banda irlandesa U2, el reciente 29 de septiembre

La primera experiencia en Las Vegas fue un fiasco. La pista, entre muros de material en el estacionamiento del Caesars Palace, un dibujo que exprimía el físico. El calor, otra arista negativa, al extremo que Nelson Piquet vomitó en el auto mientras apuraba la marcha para vencer a Carlos Reutemann y consagrarse campeón en 1981. Eran otros tiempos, como le contó el suizo Marc Surer a GP Racing: “Salías del hotel y ya estabas en el paddock y hasta era posible ir de los boxes a la piscina. Después de un entrenamiento, si tenías calor hacías una pasada por el agua y volvías”, relató quien en el primer episodio abandonó –al manejo de un Theodore- y en la segunda visita –ganó Michele Alboreto (Tyrrell)- terminó séptimo, con un Arrows.

Ferrari, con decoración particular en Las Vegas

Poco más de cuatro décadas más tarde, el escenario será diferente: la pista tiene como eje central el boulevard de Las Vegas –el famoso Strip-, frente a las fuentes del Bellagio. Un auténtico circuito urbano con la firma de Hermann Tilke, que proyectó los trazados callejeros de Singapur y de Azerbaiyán. Y de los rayos de sol los pilotos pasarán a la luz artificial: será la primera carrera nocturna de F.1 en los Estados Unidos, que recibió al Gran Circo en Watkins Glen, Austin, Indianápolis, Detroit, Phoenix, Sebring, Riverside, Dallas, Long Beach y Miami. “Cuando Liberty Media compró la F.1 hace siete años, ésta era nuestra intención: llevar la fibra de la cultura estadounidense. Será un acontecimiento épico”, apuntó Renee Wilm, CEO del GP de Las Vegas, pero también director jurídico y administrativo de Liberty Media.

El antiguo circuito de Las Vegas, donde la Fórmula 1 corrió en 1981 y 1982, emplazado en el estacionamiento del Caesars Palace; del abrasivo sol a las luces artificiales, 41 años después la cita será nocturna
El antiguo circuito de Las Vegas, donde la Fórmula 1 corrió en 1981 y 1982, emplazado en el estacionamiento del Caesars Palace; del abrasivo sol a las luces artificiales, 41 años después la cita será nocturna - Créditos: @X

Los gastos de la compra de los terrenos donde se emplazan los boxes y el paddock, levantar los edificios permanentes -la torre de control-, tarea de promoción y difusión y la contratación de los espectáculos resultó una inversión que se salió de caja. El desembolso, hasta septiembre, ascendía a 435 millones de dólares, superando en US$ 35.000.000 la estimación original del proyecto. “En el primer año, el del lanzamiento, tuvimos gastos extraordinarios que incluyen las disposiciones adicionales en materia de seguridad, protección y planificación que exigen los organismos reguladores locales. También está la ceremonia de apertura, el diseño y lanzamiento de nuestra aplicación multiuso… La rentabilidad estará en el segundo año y los siguientes”, admitió Greg Maffei, CEO de Liberty Media. Las estimaciones indican que Las Vegas desea permanecer en el calendario de la F.1 al menos hasta 2032.

Pica, corazón, diamante y trébol: los cuatro símbolos de los naipes de póquer, recubrirán los pianos del trazado de Las Vegas
Pica, corazón, diamante y trébol: los cuatro símbolos de los naipes de póquer, recubrirán los pianos del trazado de Las Vegas - Créditos: @X

El Gran Premio empezará el miércoles y no el jueves, como es costumbre. Los 20 pilotos deberán estar presente el 15 de noviembre en la ceremonia de apertura de la que tomarán parte artistas como J. Balvin, Major Lazer, Mark Ronsonen, Andra Day, Bishos Briggs, Journey, Keith Urban, Steve Aoki, Swedish House Mafia, Thirty Seconds to Mars y will.i.am, que se repartirán en los seis escenarios distribuidos a lo largo de la recta principal, de 1,8 kilómetros. Blue Man Group y Cirque du Soleil –su fundador Guy La Liberte fue socio de Lawrence Stroll (Aston Martin)- también se unirán a la fiesta en Las Vegas. “Es importante crear una atmósfera única que fusione el espíritu de Las Vegas y la F.1″, comentó Wilm. Los shows estarán acompañados con espectáculos de luces y sonidos y también habrá fuegos artificiales.

La promoción de Red Bull Racing para el Gran Premio de Las Vegas

Autos con decoraciones especiales, cascos con diseños exclusivos, vestimenta particular para la carrera, una señal de que los equipos y los pilotos se preparan de modo singular para una fecha que se augura llena de magia y de colores. “Va a ser el mayor espectáculo del mundo”, lanzó Gunther Steiner, el jefe de Haas, el equipo con sede en los Estados Unidos. “Será el mayor reto, porque no tenemos datos: nunca estuvimos en esa pista. Creo que será un Mónaco de alta velocidad”, estimó. Menos altisonante fue el discurso del tricampeón Max Verstappen, quien especuló que la cita “tiene más de espectáculo que de carrera”. Y desestimó que resulte atractivo como el GP de Mónaco: “Es histórico. Todos los pilotos desean ganar una vez en esas calles. No se puede comparar”, atacó el neerlandés, que presentará un casco que lucirá unas fichas de póquer en la parte posterior.

El diseño singular del casco que utilizará el tricampeón Max Verstappen en el Gran Premio de Las Vegas: sobre una ficha de póquer, los años de los títulos del Mundial de Pilotos del neerlandés
El diseño singular del casco que utilizará el tricampeón Max Verstappen en el Gran Premio de Las Vegas: sobre una ficha de póquer, los años de los títulos del Mundial de Pilotos del neerlandés - Créditos: @X

Las próximas horas serán decisivas para una arista que podría empañar el desenvolvimiento natural de Las Vegas: 25 mil trabajadores de hoteles podrían comenzar una huelga si el sindicato no logra un acuerdo con MGM Resorts y Wynn Resorts; el Caesars Entertainment superó el conflicto y, tras el pacto, 10 mil empleados no tienen motivos para plegarse al reclamo. El último año, la ciudad recibió la visita de 38.800.000 turistas, un 20,5% más que en 2021, aunque todavía lejos del récord de 42,9 millones de personas de 2016.

La Fórmula 1 y una apuesta fuerte. Una movida para atrapar a nuevos jugadores en la Ciudad del Pecado.