"No temo a Trump ni a Biden; no me impondrán nada"
Víctor Gamboa, enviado
TIJUANA, BC., marzo 14 (EL UNIVERSAL).- En esta ciudad, a unos cuantos kilómetros de la línea fronteriza, la candidata presidencial del PAN, PRD y PRI, Xóchitl Gálvez Ruiz, aseguró que no le preocupa quién resulte ganador en la elección de noviembre próximo en Estados Unidos, porque —de ganar los comicios—, como presidenta de México no aceptará que Joe Biden o Donald Trump amenacen con imponer aranceles.
En el foro Frontera de Siglo XXI: Seguridad y Desarrollo, dijo que no le teme a ninguno de los aspirantes a la Presidencia de Estados Unidos, por lo que, como presidenta, establecería relaciones de cooperación, pero no permitiría que nos quieran imponer una agenda contraria a los derechos humanos.
"Hoy, México debe tener una negociación mucho más clara con Estados Unidos. A mí no me dan miedo ni Trump ni Biden, se los digo sinceramente, al que me pongan va a haber una relación franca, directa, clara; sus amenazas de aranceles, aquí tengo al mejor negociador del Tratado de Libre Comercio [Ildefonso Guajardo]. Lo que sí es que no vamos a aceptar que nos impongan una agenda que viole derechos humanos", aclaró.
Gálvez Ruiz sostuvo un encuentro con especialistas en temas fronterizos, ante quienes indicó que la migración no debe verse como un problema, sino como una oportunidad y criticó la postura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador de aceptar que México sea "tercer país seguro" sin solicitar al gobierno de Estados Unidos nada a cambio.
"El ser de facto tercer país seguro sin haber peleado nada a cambio fue un error garrafal del gobierno actual. ¿Por qué?, porque de entrada debimos haber peleado el que pusieran en regla los documentos de muchos millones de mexicanos que están dentro de Estados Unidos. No dijimos nada, no peleamos ni hemos peleado por los mexicanos que residen en Estados Unidos.
"Una organización nos dijo que, si hubiera abogados, un millón de mexicanos podrían estarse regularizando, simplemente con tener abogados, un millón de mexicanos en Estados Unidos tendrían derecho a la residencia, a la ciudadanía, fíjense nada más, cosas como esas podríamos pelearlas a cambio de ser tercer país seguro", recalcó.
Expuso que México también debió haber peleado los recursos para atender a los migrantes que están en espera de la visa humanitaria y están hacinados en los parques públicos o en la calle, y dependen de la atención de la sociedad civil, de la Iglesia, de organizaciones de Estados Unidos y de México en condiciones poco humanas.
Xóchitl Gálvez destacó que para que sean más eficientes, en su proyecto contempla la modernización de todos los cruces fronterizos del norte del país.
También denunció que la presencia de marinos en las aduanas y cruces fronterizos no ha funcionado, porque a México siguen entrando armas y drogas, como el fentanilo: "Me comprometo, no sólo con Tijuana, con todas las ciudades fronterizas que le generan una enorme riqueza a nuestro país, a modernizar, a invertir en los cruces fronterizos para que no tengan que estar tres horas ahí", resaltó.
La candidata presidencial de Fuerza y Corazón por México afirmó que vivimos en un país de funcionarios ineptos que no entienden lo que significa para los ciudadanos entrar y salir a trabajar al otro lado de la frontera: "Ahora resulta que es más complicado entrar a México que a Estados Unidos", cuestionó.
Explicó que otro de sus proyectos es regresar a la profesionalización del Servicio Exterior Mexicano, al arremeter en contra de expriistas que han sido premiados con un cargo en alguna embajada o consulado: "Ya basta de tener a gente que simplemente le dan el cargo de cónsul, como la exgobernadora de Sonora, para pagarle un favor político de su corrupción a favor de Morena", recalcó.
Precisó que los cónsules tienen que ser "gente de servicio, de carrera, gente comprometida, capaz y que sí quiera atender a los migrantes".
Gálvez Ruiz negó que con su propuesta de cerrar dos refinerías pretenda privatizar Pemex, como lo aseguró su contrincante Claudia Sheinbaum.
Aclaró que lo que busca no es privatizar a la petrolera, sino eficientarla, que deje de perder dinero y que no sea utilizada para que los hijos del presidente Andrés Manuel López Obrador se sigan enriqueciendo.
"Yo lo que quiero es que Pemex deje de contaminar, de dañar al medio ambiente, de perder el dinero, pero sobre todo que los hijos del presidente dejen de beneficiarse de Pemex. Claudia lo que quiere es que los hijos del Presidente se sigan robando el dinero de Pemex, porque está demostrado que recibieron casi 20 mil millones de pesos en contratos de esa petrolera", expresó la opositora.