El tackle de Moroni que cambió la historia de los Pumas vs. Gales: una imagen que va a quedar guardada para siempre

Puro coraje: Matías Moroni, tacklea a Louis Rees-Zammit
Puro coraje: Matías Moroni, tacklea a Louis Rees-Zammit - Créditos: @ap

Iban 73 minutos, 57 segundos de una batalla a todo o nada. Los Pumas ganan 19-17, pero se viene Gales. Se viene con todo. Corre a todo ritmo Louis Rees-Zammit, el número 14, por el sector izquierdo. No hay nada que hacer: será try para el equipo europeo: va a ganar el partido. De pronto, a todo vapor, aparece Matías Moroni. Alma, corazón y vida. Se juega, verdaderamente, la vida. La vida deportiva, claro está.

Se arroja contra el cuerpo de unas de las figuras del Mundial, lo derriba, lo baja, lo saca de la cancha. Es el tackle de la resurrección. Lo festeja como el triunfo en sí mismo. Al final, Nicolás Sánchez resuelve la historia con un try que se trata de oportunismo y orgullo.

Los Pumas ganan 29-17 y pasan a las semifinales de la Copa del Mundo. En un hecho histórico. La imagen recuerda, más allá de las distancias, a la salvada de Javier Mascherano contra Arjen Robben, en el Mundial 2014. Otro deporte, fútbol. La misma pasión.

Celebra Matías Moroni, bajo el calor de Marsella
Celebra Matías Moroni, bajo el calor de Marsella - Créditos: @Agencia AFP

“Fue virtud mía, porque Robben me dio una posibilidad más. Me hace ganar un segundo más a mí. Cuando él toca, pierde un segundo y yo lo gano. Lo que hice que yo lo habría hecho cualquiera. Para estar en una final necesitás esa pizca de suerte”, contó, en esa oportunidad, el antiguo Jefecito, hoy entrenador del seleccionado de fútbol Sub 20.

Esta vez, lo hizo Moroni. Qué momento: todos saben que es un instante que va a ser recordado toda la vida. Más allá de todo el partido, esa fotografía. “Para todos esos, que hablaban giladas...”, expresó, minutos después. “Vamos a jugar el partido más importante de los Pumas”, avisó. “Nos vamos a París, el esfuerzo que hizo este equipo, mucha gente que no confiaba... vamos a ir a la guerra a París”, advirtió.

“Voy a festejar con el club, con todos, con mi familia. Arrancamos dominando, por diferentes circunstancias -no voy a hablar del referí, pero bueno...- se nos fue escapando, pero volvimos. Juego al rugby por mi familia, por la camiseta, se viene el partido más importante de la historia de los Pumas. Nunca nadie lo ganó. Con quien sea, con quién toque...”, siguió hablando uno de los símbolos de la historia reciente del elenco nacional.

El seleccionado argentino, en una de las actuaciones más dramáticas de su historia, consiguió su clasificación a las semifinales del Mundial de rugby por tercera vez en la historia, tras vencer esta tarde a Gales por 29-17 en un partido de cuartos de final disputado en el Stade de Marsella.

El equipo dirigido por Michael Cheika revirtió un marcador desfavorable hasta el minuto 57 con dos tries de los ingresados Joel Sclavi y Nicolás Sánchez en el tramo final del juego, ambos convertidos por Emiliano Boffelli. El próximo rival será Nueva Zelanda o Irlanda.

“El equipo tuvo trabajo, humildad, sacrificio. Confianza en el de al lado, confianza en el sistema. Y mucho corazón. Jugamos por el país, por la camiseta, por nosotros mismos”, fue su mensaje.