Sarina Wiegman, el as bajo la manga en el banquillo de Inglaterra

Sídney, 18 ago (EFE).- La neerlandesa Sarina Wiegman ha sumado un sinfín de éxitos en un historial envidiable. Doble campeona europea, con dos selecciones diferentes, y responsable de llevar a dos países distintos a una final de un Mundial, espera agregar un escalón más este domingo, cuando liderará a Inglaterra en la final mundialista frente a España.

Nacida en La Haya, hace 53 años, Wiegman ha cosechado una laureada carrera a la que, año tras año, añade nuevas marcas. En cada ocasión que tomó las riendas de algún combinado nacional, logró llegar a la final de los grandes torneos internacionales en los que participó.

Su más reciente logro es el de ser la única persona que fue capaz de llevar a dos países diferentes, primero su natal Países Bajos y ahora Inglaterra, a la última instancia de una Copa del Mundo en la historia de la competición -femenina o masculina.

En una final con sabor a revancha, españolas e inglesas volverán a verse las caras un año después de que "Las Leonas" eliminaran a La Roja en los cuartos de final de la Eurocopa. Y el rol de la técnica neerlandesa, al frente de la selección inglesa desde 2021, podría mostrarse decisivo.

Nadie tiene la eficacia de Wiegman. La seleccionadora tardó tan solo siete meses en ganar su primer trofeo internacional con Países Bajos, tras haber sido nombrada entrenadora permanente en enero de 2017, poco antes de la campaña triunfal que coronaría la Oranje, campeona europea ese año.

Asimismo, al frente de la absoluta naranja ha conseguido el récord como más longeva entrenadora del país: fueron 79 partidos disputados, con 56 victorias, 7 empates y 16 derrotas.

Pese a que fue nombrada seleccionadora de Inglaterra en agosto de 2020, decidió permanecer con Holanda durante su campaña en los Juegos Olímpicos de Tokio, aplazados un año por la pandemia de la covid, y donde las neerlandesas alcanzaron los cuartos de final.

Igualmente condujo a Países Bajos a la final del Mundial de Francia 2019, en la que cayó ante Estados Unidos, pero consiguió una histórica posición de subcampeona mundialista. Cuatro años después, Wiegman se ve nuevamente en una final de la mayor cita del fútbol global, esta vez en Australia y al frente de Inglaterra.

Una victoria contra España supondría el broche de oro a una hoja de ruta irreprochable del combinado inglés, actual campeón europeo, y al extenso currículo de Wiegman.

Tres veces elegida la premio The Best de la FIFA (2017, 2020, 2022) y seria candidata para la edición 2023, la seleccionadora ha llevado a Inglaterra a la cima del podio de la Euro 2022, de la Copa Arnold Clark en 2022 y 2023 y de la Finalissima Femenina Conmebol-UEFA 2023 desde que asumió el banquillo, en septiembre de 2021.

Y es que su condecorada trayectoria no ha pasado desapercibida. El director de la Asociación de Fútbol de Inglaterra, Mark Bullingham, afirmó que no dejará que nadie se lleve a Wiegman, en medio de los rumores de que estaría siendo sondeada por otros países.

"Hemos visto muchos rumores y mira, ella es un talento especial. Lo sabemos” y "nos gustaría tenerla con nosotros durante mucho tiempo", dijo Bullingham en declaraciones a la prensa británica.

Incluso, se ha especulado con la posibilidad de que la entrenadora de las Leonas dirija a la selección masculina, que desde 2016 está en manos de Gareth Southgate, cuyo contrato concluye tras la Eurocopa 2024.

Bullingham ha asegurado que, en caso de que Southgate se marche, se escogerá a la mejor persona para el puesto, sin tener en cuenta que sea hombre o mujer.

"Nuestra respuesta es que tiene que ser la mejor persona para el puesto. Sarina está haciendo un gran trabajo y esperamos que siga así durante mucho tiempo. Creo que Sarina podría hacer lo que quisiera en el fútbol", añadió el directivo.

"Si en algún punto del futuro decide que quiere cambiarse al fútbol masculino, será una conversación interesante, pero es su decisión".

En el fútbol profesional, nunca una mujer ha dirigido a un equipo masculino, más allá de Hannah Dingley, que llevó las riendas del Forest Green Rovers, de League Two (Cuarta división inglesa), durante el verano.

Wiegman podría romper un nuevo techo. Es uno de estos talentos únicos que empezó a dejar su marca en la historia hace muchos años. En los tiempos en los que actuaba como jugadora, dejó su nombre para la posteridad de Países Bajos al convertirse en la primera futbolista en llegar a un centenar de internacionalidades con la Oranje.

En 2003, decidió colgar las botas: era el fin de una destacada futbolista y el inicio, tres años después cuando inició su carrera en los banquillos, de una entrenadora aún más sobresaliente.

Nayara Batschke

(c) Agencia EFE