Santiago Maratea le puso fin a la colecta de Independiente y una pregunta surca el aire: ¿fue un éxito o un fracaso?
A su modo, a medianoche y a través de una serie de mensajes cortos en su cuenta de Instagram, Santiago Maratea comunicó oficialmente el cierre del fideicomiso y la colecta que inició en abril para saldar las deudas de Independiente, cumpliendo el plazo que él mismo había establecido en su apertura. El resultado concreto de una iniciativa innovadora dentro del mundo del fútbol argentino, más allá de las dificultades para hacer cálculos exactos que surgen a partir de los cambios de cotización del dólar durante el tiempo transcurrido, es que el club logró abonar una parte importante de la deuda que mantenía con América de México por el pase de Cecilio Domínguez, y con ello levantar la inhibición para contratar jugadores.
“¿Podemos comparar cómo estaba Independiente el 17 de abril y cómo está ahora? Es increíble cómo se levantó. Los hinchas son los que mejor lo saben”, sentenció el popular influencer en sus declaraciones, como para zanjar una incipiente polémica sobre el nivel de éxito de su acción.
En la conferencia de prensa para presentar la colecta, Maratea había manifestado la intención de recaudar 20 millones de dólares para saldar todo el pasivo que acumula el Rojo, y el saldo final arroja una cifra cercana a los 3,5 millones de la moneda estadounidense. A primera vista, la diferencia parece mayúscula, pero la mirada de los socios y simpatizantes de Independiente es muy diferente.
“No había que juntar 20 millones sino la plata que se le debía al América para levantar la inhibición. Se abonó más de la mitad y desde ahí se convino una forma de pago para cancelar todo”, opina Miguel Ángel Santoro, quien fue la cara conocida que trabajó junto a Maratea para ganar la confianza de hinchas y socios. “La colecta nos dio tranquilidad y la posibilidad de traer jugadores que están respondiendo bien y también de inscribir a 49 chicos de inferiores que no podían incorporarse. Estoy contento de haber participado porque me identifico como hincha, de hecho ya lo era antes de ser jugador de fútbol”.
Aunque todavía no se dieron a conocer todas las cifras finales, el dinero recaudado por Maratea sirvió para abonar dos cuotas de 52.839 dólares a Boca por el pase de Pablo Pérez y así cancelar esa deuda. Durante su comunicación nocturna, Maratea transfirió los últimos pagos a contadores, auditores y abogados y mostró que quedaban 1.226.757 pesos en la cuenta. “Falta pagar unas retenciones que nos tiene que informar Mercado Pago y si sobra algo será para que el club lo utilice donde crea necesario”, señaló el influencer, quien aseguró que renunciaba a cobrar los últimos 10.000 dólares por su tarea, “porque no hay plata suficiente en el fideicomiso”.
“Más allá de lo económico, la colecta generó un caso de éxito disruptivo en el fútbol”, dice Juan Marconi, vicepresidente del Rojo y el responsable de acercar a Maratea a la entidad de Avellaneda. “Nosotros fuimos por otro lado: un infuencer, una conferencia de prensa, el mundo hablando de esto... La colecta generó un sentido de pertenencia, con la gente poniendo la plata que no tiene para salvar al club. Esa unidad me parece lo más importante. A nadie que puso algo de plata le podés quitar hoy la satisfacción de decir que ayudó a Independiente solo por una cuestión de pasión”, agrega el dirigente.
Ese sentimiento que excede el resultado económico es el que más resaltan los hinchas y socios del Rojo. “Levantó el ánimo y mejoró mucho el ambiente en un tiempo de desesperanza, hizo que todos se sintieran parte y sacudió a una dirigencia dormida”, afirma Edgardo Broner.
El propio Maratea subraya que el ánimo de la gente logró incluso superar campañas contrarias a la colecta: “Nos dieron palos, a mí y a los hinchas, por todos lados; instalaron teorías de todo tipo; que yo me robaba plata, que financiaba las campañas de Patricia Bullrich o de Grindetti, que era para lavar dinero… Se comprobó que todo era mentira y los hinchas sacaron el club adelante”.
También los dirigentes opositores de la actual conducción del club resaltan el aspecto emocional y psicológico a la par del económico como valor a tener en cuenta a la hora del análisis. “Personalmente, la colecta me ha generado dos sensaciones encontradas. Por un lado la alegría y el orgullo de ver encolumnarse a la gente detrás de una bandera ante una situación límite. Por el otro, mucha tristeza y vergüenza de que una dirigencia nueva no haya tenido la credibilidad para poder hacerlo por sí misma y hayamos tenido que apelar a un influencer que no tenía nada que ver con el fútbol y mucho menos con Independiente”, dice Fernando Montenegro, líder a la agrupación Puro Sentimiento Rojo. A su vez, Claudio Rudecindo, que fue uno de los candidatos a presidente en las elecciones del año pasado, sostiene que la colecta “salvó a Independiente. Esto lo hizo la gente. El hincha es el que nunca falló. Ahora se necesita que la creatividad de la dirigencia para crear nuevas formas de obtener dinero”.
🔴 COLECTA | Maratea confirma que se cerró el Fideicomiso para pagar las deudas de #Independiente.
▶️ CAI pudo pagar 3 M USD al #America 🇲🇽 y dos cuotas de 52.839 USD a #Boca.
🇦🇹Total ingresado por los socios/as, hinchas al Club: 3.105.678 USD.
💵Quedó un saldo de $1.226.757… pic.twitter.com/OE7FB6fMhL— Matias Martinez (@Mati_Martinez) October 25, 2023
En ese sentido, Marconi piensa en futuras colectas a través del mecanismo de crowdfunding para acciones puntuales, “aunque sería una medida a realizar a mediano plazo”.
La colecta de Maratea ya es historia. Gracias a ella, Independiente logró superar un momento muy difícil y deportivamente escapar de la amenaza del descenso y soñar con un porvenir más acorde a su historia, aunque su deuda continúe siendo millonaria. El tiempo dirá si es capaz de lograrlo.