San Lorenzo da el impacto: llega Iker Muniain, último eslabón de una histórica conexión con los futbolistas vascos

Iker Muniain firma autógrafos a los hinchas de San Lorenzo en las calles de Buenos Aires
Iker Muniain firma autógrafos a los hinchas de San Lorenzo en las calles de Buenos Aires - Créditos: @X

Eliminado en la Copa Libertadores y en medio de una manifiesta disconformidad de los hinchas hacia una dirigencia que lleva menos de un año de gestión, San Lorenzo da un golpe de efecto a horas del cierre del libro de pases con la contratación del español Iker Muniain, de 31 años, y que hasta aquí era un one club man (jugador de un solo club) con una carrera íntegra en el Athletic Bilbao.

El media-punta, que en la semana anterior estuvo en Buenos Aires y mantuvo los primeros contactos con el presidente Marcelo Moretti y el entrenador Leandro Romagnoli, viajó a España y regresó este miércoles para realizar la revisión médica en la clínica Rossi, de Belgrano. Se estima que en las próximas horas firmará el contrato hasta diciembre de 2025 y será presentado oficialmente. En caso de que Nahuel Barrios acepte ser traspasado a Barracas Central, Muniain llevará la camiseta N°10 que dejará el “Perrito”.

Varias cuestiones están pendientes para que haga su debut. San Lorenzo, más allá de que reglamentariamente lo puede inscribir, antes debe levantar las inhibiciones por deudas con dos exfutbolistas que presentaron el reclamo vía FIFA, Fabricio Formiliano y Cristian Zapata, por un total de algo más de 400.000 dólares. Marcelo Culotta, excandidato a presidente y promotor de la vuelta a Boedo, cuestionó la operación: “San Lorenzo no puede andar pagando contratos en dólares, que no se pueden sostener. Hoy llega Muniain y mañana te llega una inhibición”.

El otro aspecto a cumplir para ver a Muniain en las canchas argentinas es su acondicionamiento físico y futbolístico. Su último partido en Athletic Bilbao fue el 19 de mayo, ante Sevilla, por la Liga de España. Viene de una temporada con escasa continuidad. Disputó 586 minutos en 20 partidos, en los cuales solo fue titular en cinco, y marcó dos goles. “Espero tenerlo cuanto antes para que empiece a entrenarse con el plantel para que agarre ritmo de manera progresiva. Seguramente al principio jugará 30 minutos, después un tiempo, se tiene que adaptar. El fútbol argentino es más físico que el español”, expresó Leandro Romagnoli a ESPN.

Iker Muniain, este miércoles, a la salida del aeropuerto de Ezeiza
Iker Muniain, este miércoles, a la salida del aeropuerto de Ezeiza - Créditos: @X

Si bien hace tiempo Muniain manifestó su deseo de jugar en River, club del que es hincha, la falta de una propuesta desde Núñez lo llevó a escuchar el interés del Ciclón. “La semana pasada estuvimos hablando más de una hora. Lo noté entusiasmado, motivado, me preguntó qué idea tenía, cómo quería que jugara el equipo. Me dijo que conocía el fútbol argentino, que siempre lo seguía, y que después de ganar la Copa del Rey con el Athletic sentía que debía cerrar un ciclo de casi 15 años en ese club. Le dije que lo veía de enganche, detrás del punta. Tiene la jerarquía, la pausa, el pase-gol y la pelota detenida que estábamos buscando. Puede convertirse en un líder futbolístico”, agregó Romagnoli.

Muniain cierra en Athletic Bilbao una carrera de 579 partidos, con 79 goles y 70 asistencias. Obtuvo una Copa del Rey y dos supercopas de España. Jugó en casi todas las categorías juveniles del seleccionado español y disputó dos encuentros en la mayor. Entre 2011 y 2013 fue dirigido por Marcelo Bielsa, que lo tuvo como una pieza importante en el equipo que alcanzó las finales de la Copa del Rey (derrota contra el Barcelona de Pep Guardiola) y la Copa UEFA (caída contra el Atlético de Madrid de Diego Simeone). “El Loco Bielsa dejó un gran recuerdo. Fue muy exigente, lamentablemente nos quedamos sin un gran premio, a pesar de hacer méritos. Es el entrenador que conozco que más sabe de fútbol en todo: conceptos, análisis, videos... Lo tiene todo controlado”, manifestó Muniain hace un par de años.

La llegada de Muniain entronca con una tradición de San Lorenzo, un vínculo histórico con futbolistas españoles, de origen vasco. Jugadores que dejaron un gran recuerdo y con sus rendimientos llevaron a que varios inmigrantes de la comunidad española en nuestro país se hicieran hinchas del Ciclón. Un lugar destacado ocupa Isidro Lángara, potente centro-delantero, autor de 110 goles en 121 partidos entre 1939 y 1943. Guillermo Stábile, exentrenador del seleccionado argentino, lo había visto jugar en Europa y se lo recomendó a un dirigente de San Lorenzo: “Con Lángara, usted compra goles seguro”. Tras disputar el Mundial 1934 para España y marcar más de 200 tantos para Oviedo, el 21 de mayo de 1939 debutó en San Lorenzo con cuatro goles en un 4-2 a River. No tardó en convertirse en un ídolo para los hinchas. Es el séptimo goleador histórico del club (19° en el fútbol argentino), el primero de San Lorenzo en un torneo local. Solo faltó obtener un torneo local.

Lángara fue convencido de venir a la Argentina por su compatriota y también vasco Ángel Zubieta, un mediocampista que jugó 352 encuentros y anotó 29 goles para San Lorenzo entre 1939 y 1952. Integró la columna vertebral del equipo que ganó brillantemente el campeonato de 1946 y realizó una exitosa gira por España. De fuerte temperamento, también se destacaba por su manejo de la pelota y capacidad para llegar a las dos áreas.

Lángara y Zubieta son los más sobresalientes de los siete españoles que vistieron la camiseta azulgrana, la que ahora se pondrá Muniain, último eslabón de la conexión vasca con el Ciclón.