El presidente de la RDC tilda de "provocación de mal gusto" un acuerdo de la UE y Ruanda

Kinsasa, 23 feb (EFE).- El presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi, tildó de "provocación de mal gusto" que "fomenta el saqueo" de su país el memorando de entendimiento entre la Unión Europea (UE) y Ruanda para cooperar en el desarrollo de las cadenas de valor de materias primas.

"Es una provocación de muy mal gusto. Cuando firmamos un memorando de entendimiento con este país (Ruanda), estamos fomentando el saqueo y el fraude. Una serie de ladronzuelos roban nuestros minerales y los venden a Ruanda, que gana miles de millones con la sangre de nuestros compatriotas. Esto es inaceptable", dijo el mandatario en una rueda de prensa a última hora de este jueves.

Según Tshisekedi, "con estos productos ilegales van a equipar a su Ejército y continuar su expedición aventurera en la RDC".

"¿Y quién es su cómplice? La Unión Europea. La UE, que siempre nos ha dado lecciones de democracia, predica ahora con el peor ejemplo posible. Afortunadamente, en esta UE hay Estados que están en contra", añadió.

También el movimiento ciudadano Lucha por el Cambio (LUCHA, por sus siglas en francés) expresó en un comunicado su "indignación por la complacencia" que la UE brinda a Ruanda en "en este momento en que el este de la RDC es presa de graves atrocidades, debidas, entre otras cosas, a la invasión del Ejército ruandés".

El pasado lunes, la UE y Ruanda firmaron un memorando de entendimiento para cooperar en el desarrollo de las cadenas de valor de materias primas en el país africano, incluyendo financiación para infraestructura, innovación e investigación o formación.

El acuerdo fue alcanzado en el marco de una grave escalada de tensiones diplomáticas entre la RDC y Ruanda por la presunta colaboración de Kigali con el grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23) -que opera en el este congoleño- un extremo que las autoridades ruandesas siempre han negado, pese a haber sido confirmado por la ONU.

A su vez, Ruanda y el M23 acusan al Ejército congoleño de cooperar con las rebeldes Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), fundadas en 2000 por cabecillas del genocidio de 1994 y otros ruandeses exiliados en RDC para recuperar el poder político en su país.

Esa colaboración también ha sido corroborada por la ONU.

Desde el pasado 1 de octubre, esta milicia ha avanzado por varios frentes hasta situarse a unos veinte kilómetros de la ciudad de Goma, capital de la provincia nororiental de Kivu del norte, que ocupó durante diez días en 2012 antes de retirarse por la presión de la comunidad internacional.

Los insurgentes han tomado el control de las carreteras principales que unen el resto del país con esa estratégica capital provincial, de más de un millón de habitantes y base de numerosas ONG internacionales y agencias de las Naciones Unidas.

Asimismo, los combates han empeorado la crisis humanitaria y más de 150.000 personas han huido de sus casas en esa área desde el pasado día 2, más de la mitad niños, según indicó este 8 de febrero la organización Save the Children.

Desde 1998, el este de la RDC está sumido en un conflicto alimentado por milicias rebeldes y el Ejército, a pesar de la presencia de la misión de paz de la ONU en el país (Monusco).

(c) Agencia EFE