Policía de Monterrey localiza a víctimas de extorsión telefónica
MONTERREY, NL., diciembre 8 (EL UNIVERSAL).- Extorsionadores lograron que una familia les hiciera un depósito de 400 mil pesos, al contactar con dos adolescentes a quienes les ordenaron que salieran de su domicilio, porque de lo contrario ingresarían a dañar a sus seres queridos, y una vez que les indicaron acudir hasta un negocio de Internet (cibercafé), y de ordenarles que no mantuvieran comunicación con familiares, llamaron a sus casas para exigir el pago de un "rescate" de 300 mil pesos por cada uno, advirtiendo que los tenían en su poder.
Sin embargo, la madre de uno de los menores llamó a las autoridades, que lograron ubicarlos a salvo en el interior de un cibercafé de la colonia Tecnológico, al sur de esta ciudad, informó la Policía Municipal de Monterrey.
La corporación policiaca señaló que, a través de los teléfonos celulares de dos adolescentes de 14 años de cada uno, los extorsionadores realizaron las llamadas para exigirles que se retiraran de calles de la Colonia Florida y que no tuvieran comunicación con ninguno de sus familiares, porque ingresarían a sus respectivas casas para causarles daño.
Los menores recibieron indicaciones de dirigirse hacia la colonia Tecnológico para que se introdujeran en un negocio de cibercafé, y que ahí esperan nuevas instrucciones, pero sin comunicarse con sus familias.
Posteriormente, los extorsionadores se comunicaron con una de las madres de familia para exigir un depósito de 300 mil pesos por cada uno de los menores de edad.
Ante dicha situación, los familiares decidieron solicitar el apoyo de las autoridades que lograron ubicar a los adolescentes por medio del GPS de uno de los aparatos celulares.
La Policía de Monterey informó que las llamadas telefónicas de extorsión se realizaron desde los estados de Jalisco y Coahuila, habiendo logrado los delincuentes que se les depositaran en total 400 mil pesos. Las autoridades realizan las investigaciones correspondientes.
Los adolescentes quedaron al cuidado de su familia, sanos y a salvo, al tiempo que los afectados por esta práctica delictiva realizaron la denuncia correspondiente.