Así pasó Venus de ser un mundo abundante en agua a uno seco

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 9 (EL UNIVERSAL).- Venus es el segundo planeta del Sistema Solar, situado entre Mercurio y la Tierra. Es conocido por ser el planeta más brillante del cielo nocturno, después de la Luna, y por su similitud con la Tierra en cuanto a tamaño, masa y densidad.

Sin embargo, a diferencia de la Tierra, Venus tiene características únicas que lo convierten en un mundo completamente diferente.

No obstante, guarda una historia que tiene a fanáticos de la astronomía sorprendidos, pues en algún momento este planeta perdió cantidades enormes del elemento, cambiando para siempre su fisonomía astral.

De acuerdo con un estudio basado en simulaciones por ordenador, y publicado en la revista Nature, un equipo de investigadores de la Universidad de Colorado en Estados Unidos descubrió "que los átomos de hidrógeno de la atmósfera del planeta salen disparados hacia el espacio a través de un proceso conocido como "recombinación disociativa", lo que provoca que Venus pierda aproximadamente el doble de agua al día en comparación con las estimaciones anteriores".

El caso de Venus causa un gran impacto, pues, tal y como se ve en el texto citado, ese mundo se encuentra parcialmente seco.

"Estamos tratando de averiguar qué pequeños cambios se produjeron en cada planeta para llevarlos a estos estados tan diferentes», dijo Eryn Cangi, investigadora del Laboratorio de Física Atmosférica y Espacial (LASP).

La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) compartió algunos datos curiosos sobre el planeta.

Venus se ve como un planeta muy activo.

Tiene montañas y volcanes.

Venus es similar a la Tierra, en tamaño.

Tarda alrededor de 243 días terrestres en girar solo una vez.

Es el planeta más cálido del sistema solar.

Un día dura 243 días terrestres.